«Ser mujer no tiene nada de malo, no es inferior ni limitante»
Muy musical y muy reivindicativa. Así ha sido la manifestación que ha transcurrido en Santander con motivo del 8 de marzo, la celebración del Día Internacional de la Mujer.
Una manifestación que ha plantado cara a la lluvia y le ha hecho retroceder, juntando en las calles de la capital cántabra a más de 500 personas que han cantado y coreado por la igualdad real entre hombres y mujeres.
La cabecera de la manifestación pide derechos para todas las mujeres todos los días.
‘Todas las mujeres, todos los derechos, todos los días’ rezaba la pancarta que presidía la manifestación’, buscando que estas reivindicaciones no queden en una sola fecha en el calendario. «No queremos un día, nos queremos vivas», han declarado desde la comisión feminista del Colectivo de Estudiantes que juntos, hombres y mujeres, se han lanzado a adaptar varios de sus cánticos habituales en la lucha estudiantil para exigir los derechos de las mujeres.
Y es que los problemas en esta España del siglo XXI para las mujeres van desde la violencia de género hasta la expulsión del mercado laboral. Más del 53% de los parados son mujeres, y el 91,2% de los contratos que firmaron en 2015 fueron de carácter temporal. La temporalidad, la crisis y la pobreza afecta a todos, sí, pero las mujeres seguimos siendo un colectivo más castigado.
Y precisamente por ello desde la Coordinadora del 8 de marzo han querido reivindicar que «ser mujer no tiene nada de malo, no es inferior ni limitante», y denuncian que todavía hay una parte de la sociedad que envía «mensajes incorrectos, ajenos a la realidad», cargados de estereotipos malignos, como son que «las mujeres somos malas entre nosotras, que no tenemos cabeza para las matemáticas o que el problema de la desigualdad es nuestra capacidad de procrear».
«LA GENTE JOVEN HA SUFRIDO UN RETROCESO QUE RECUERDA A GENTE DE ANTAÑO»
Los más de 500 asistentes se han mostrado satisfechos con el apoyo de autoridades y sociedad, pero reivindican que este sentimiento no se quede en la anécdota del día. «Lo que queremos es que esto sirva para cambiar la situación real de las mujeres. Debería ser 8 de marzo todos los días y acordarnos todos los días de la que está cayendo», ha manifestado Mercedes Boix, de Izquierda Unida y la plataforma Cantabria por lo Público antes de la manifestación para BUENAS TARDES CANTABRIA.
La que está cayendo no es más que la perpetuidad de la ideología patriarcal que está resurgiendo especialmente en los más jóvenes, tal y como vienen alertando los últimos meses desde diferentes organismos. «La gente joven ha sufrido un retroceso que recuerda mucho a gente de antaño», asegura Laura, de la Asociación de Mujeres Jóvenes de Cantabria, que trabajan con adolescentes.
«A cualquier persona que se denomine feminista en Internet le cae un aluvión de críticas… lo más suave que te pueden decir es feminazi o hembrista»
El trabajo de activistas como ellas está siendo particularmente atacado desde Internet, donde muchos usuarios se aprovechan del anonimato de la Red para insultar e incluso a amenazar a las activistas feministas. «A cualquier persona que se denomine feminista en Internet le cae un aluvión de críticas enorme», en el que «lo más suave que te pueden decir es feminazi o hembrista», asegura Kiara, que ella misma ha sufrido ataques por decir alto y sin complejos que es feminista.
El concepto del amor tradicional también se ha cuestionado.
Aún hace falta mucha concienciación, «muchas políticas públicas que pulir y mejorar», cree su compañera Violeta, que considera que la solución debe venir de una «inversión tranversal en la educación desde pequeños» y que «las niñas puedan aspirar a otros modelos de conducta y laborales».
De ese modo también ayudaría a luchar contra la precaridad laboral, que entre las mujeres es más incisiva y ha aumentado en los últimos años. En Cantabria hay una brecha salarial del 28,77% entre hombres y mujeres.
RECUERDO PARA LAS MUJERES REFUGIADAS
En la manifestación ha estado presente Amnistía Internacional para reclamar, una vez más, un pasaje seguro para los refugiados de las guerras. En esta ocasión se han centrado en las mujeres refugiadas bajo el hastag #YoAcojo, en el que denuncian la indiferencia de las autoridades europeas ante la situación que viven miles de personas, especialmente las mujeres y niñas que se encuentran desamparadas y son violadas, o los 10.000 niños que han desaparecido en la llegada a Europa.
En el manifiesto también se ha rendido un homenaje a otra gran mujer, incansable y luchadora, como lo fue Berta Cáceres, la activista medio ambiental que la pasada semana fue asesinada en su casa en Honduras, tras años de ser amenazada por su lucha por el medio ambiente de su país.
PARTICIPACIÓN INSTITUCIONAL
Muchas autoridades se han unido hoy a la sociedad civil caminando por la igualdad. Allí estaba la vicepresidenta del Gobierno, Eva Díaz Tezanos, acompañada de la directora general de Igualdad y Mujer, Alicia Renedo, y consejeros como Ramón Ruiz y María Luisa Real (PSOE) y José María Mazón (PRC).
Además se encontraban los diputados Rosa Valdés (PRC), Verónica Ordoñez y Rosana Alonso (Podemos), los portavoces parlamentarios Silvia Abascal (PSOE) y Pedro Hernando (PRC), el alcalde de Bezana, Pablo Zuloaga, la alcaldesa de Polanco, Rosa Díaz; y varios concejales del Ayuntamiento de Santander como Pedro Casares, Carmen Ruiz, María Tejerina, Javier Antolín y Amparo Coterillo. Desde Izquierda Unida/Unidad Popular se encontraban Mercedes Boix y Sergio Tamayo.
La manifestación desembocó en la plaza del Ayuntamiento de Santander.