El Racing perdió 0-3 ante el Reus

Hay muchas cosas teóricamente registradas que resultan casos paranormales, o incluso milagros, que son actos inexplicables, pero con una connotación muy positiva. Y algo así necesitará el Racing el próximo domingo en la localidad tarraconense de Reus para poder subir a Segunda División a la primera, tras perder 0-3 en el partido de ida.

La imagen del equipo de Pedro Munitis volvió a ser la de un equipo que no está lo suficientemente trabajado para lograr grandes empresas. El presupuesto y los fichajes del verano pasado sugerían que el equipo debía estar en condiciones de ascender, pero el juego y la escasa seguridad defensiva que ofrecía el equipo hacían temer que no diera para lograr el objetivo fundamental.

El ambiente en El Sardinero era proclive para tener una gran tarde, con 17.926 espectadores en las gradas, según publicó el club. El racinguismo respondió al llamamiento para ir a El Sardinero, pero el que falló fue el equipo.

El Reus, un equipo que jamás ha jugado en Primera ni Segunda División, tiene el ascenso en sus manos. Sólo tiene que certificarlo en su campo la semana que viene (el partido se jugará el próximo domingo a las 18:00). Su fútbol en los Campos de Sport de El Sardinero dieron a entender que sabían perfectamente cómo jugarle al Racing.

Si se consuma la eliminación en Reus, al equipo de Munitis le queda una segunda posibilidad. Entrará en otro sorteo con otros seis equipos, y necesitaría ganar dos eliminatorias para llegar a la categoría de plata.

De todos modos, resulta duro de encajar que el equipo, en el momento que se llevaba esperando desde el pasado agosto, cuando comenzó la competición, no sea capaz de hacer frente en casa al rival que le ha tocado en el sorteo. Para muestra, dolorosa, un botón: el único tiro a puerta del equipo fue en el minuto 91.

MALOS RESULTADOS PARA LOS CÁNTABROS DE TERCERA

Si mal le fue al equipo más representativo de la región, tampoco fueron buenas las noticias para los cuatro equipos que buscan el ascenso a Segunda B. en la eliminatoria directa de ascenso. El Laredo perdió 3-1 en Zamudio. Aún queda la vuelta en casa, en San Lorenzo, pero es un muro muy alto el que deben escalar los de José Gómez.

La Gimnástica de Torrelavega, en el play-off de cuartos de final, logró un resultado aún peor que los pejinos. En su visita a Navarra, se llevaron un 2-0 del campo de la Unión Deportiva Mutilvera. El filial del Racing, por su parte, cayó por 1-0 en el campo del filial de Las Palmas. No suena tan mal, pero no marcar a domicilio siempre otorga cierta ventaja al que juega la vuelta fuera de casa.

La única noticia buena la dio el equipo que jugaba en casa. El Cayón venció 2-1 al Atlético Cirbonero, un resultado que no es para tirar muchos cohetes, pero al menos sí tendrán ventaja en el play-off cuando arranque el partido de ida.

Al igual que en Segunda B, el Laredo tendrá dos balas más si no logra la remontada ante el Zamudio. Sin embargo, para los otros tres equipos es una eliminatoria a vida o muerte.