(El autor, Israel Ruiz Salmón, quiere agradecer el trabajo de documentación inicial que Alfonso Vélez, concejal de Asón en Común Ramales, realizó. Gracias a ello, se ha podido profundizar aún más, materializándose en esta tribuna de opinión)

Estos días ha aparecido en prensa la noticia sobre la aplicación de la Ley de Memoria Histórica (LMH) en Ramales.

Titular de la noticia

Atraído por el titular, curioso por el avance en materia de democracia que supone el hecho descrito, entro en el cuerpo de la noticia para ver el recorrido de la misma.

Al llegar al penúltimo párrafo, descubro la trampa, no sólo en el falso titular de la noticia, sino en el esperpento defendido por PP, PRC y PSOE, al que sólo se opone Asón en Común Ramales (ACR). Este es el párrafo en cuestión:

Penúltimo párrafo de la noticia

Es decir, si los franquistas son de fuera del municipio se pueden quitar. Pero si son de Ramales tienen patente de corso. Son menos franquista o algo. Son franquistas, pero sólo un poco.

Pero veamos en qué grado en el ayuntamiento de Ramales (con una superficie de 32,97 km² y 2827 habitantes, en 2016) se pretende cumplir la LMH. A continuación, las vías y plazas que serán, previsiblemente y según marca la información de la noticia, cambiados:

1- Avenida General Franco.

2- Travesía General  Franco.

3- Calle General  Queipo de LLano.

4- Plaza José Antonio.

5- Calle General  Sanjurjo.

6- Plaza Onésimo Redondo.

7- Calle General Mola.

8- Calle Luis Alonso Otero (Fundador y jefe del Sindicato Español Universitario).

De estos 8 casos, 6 ya tienen nombre nuevo decidido por los vecinos en participación popular, a la espera de aprobación en pleno.

Acta del proceso participativo. En él se incluye el nombre que adquirirán las calles una vez sea aprobado en el próximo pleno.

Veamos ahora las vías y elementos en los que muestran reticencias o directamente su oposición a cambiar con argumentación (sic) varía:

9- Colegio Rosario Pereda (Fundadora de la Sección Femenina de la Falange).

Dicen que «ya no es nombre oficial». Eso es cierto: desde hace décadas el colegio cambió el nombre de una dirigente franquista por el de «Príncipe de Asturias».

Ahora estaría bien que se lo hicieran saber al resto y se deje de usar en el blog oficial del centro escolar «Príncipe de Asturias».

Blog oficial del colegio Príncipe de Asturias, donde siga la denominación «Rosario Pereda» para uno de sus edificios.

O en la página oficial del Gobierno de Cantabria.

Nota de prensa del Gobierno de Cantabria.

O en convocatorias como la de la Prueba Específica de Ciclo Final de Espeleología, en septiembre de 2016, donde figura el membrete del Gobierno de Cantabria y de la Consejería de Educación.

Extracto de la convocatoria de las Pruebas de Espeleología.

Pero no nos detengamos más en este caso y vamos con el siguiente:

10-Grupo de viviendas sociales Queipo de Llano. Placa en la fachada del edificio.

Están «a ver si les parece bien a los propietarios.» Esperemos que a la hora de hablar con los propietarios muestren mayor entusiasmo en lugar de la dejadez del caso anterior.

11-Monumento a los caídos (Iglesia de San Pedro).

En este caso, el equipo de gobierno PRC-PSOE aceptan la argumentación del PP: «se trata de una responsabilidad de la parroquia». Pues bien, los curas del pueblo han dirigido una carta a los feligreses con un tono bastante más democrático que el mostrado por el tripartido, dejando en evidencia su postura. He aquí la carta en la que aceptan la modificación de la placa:

Carta de los párrocos del pueblo enviada a los feligreses

Y ahora, recordemos el párrafo en el que no se aplicará la LMH a «los nombres de vecinos de Ramales que por alguna circunstancia tuvieron relación con el franquismo, pero no participaron en el golpe de estado». Vamos, pues, con las calles dedicadas a franquistas menos franquistas «POR SER DE RAMALES», que según PP, PRC y PSOE no deben ser modificadas:

12- Calle General Bakali.

Este hombre (recordemos, de Ramales) fue un golpista, un militar a las órdenes de Franco en el norte de África que participó en la rebelión del 36, principalmente en Toledo y Madrid.

Extracto del libro «Historia de La Legión española: La infantería legendaria. De África a Afganistán», de Luis Eugenio Togores.

13-Calle Alcalde Domingo Gómez Maza, cacique del pueblo y padre de Bakali.

Extracto del libro «Guerra Civil en Cantabria y pueblos de Cantabria y Castilla», por Jesús Gutiérrez Flores

14-Calle Julián Fuentecilla.

Fue concejal de la derecha durante la República. Al entrar las tropas franquistas en Ramales, fue proclamado alcalde y durante su mandato fueron asesinados más de treinta vecinos en la represión posterior.

Extracto del libro «Poder político y bases sociales del primer franquismo en Cantabria», de Julián Sanz Hoya

15- Calle Alcalde Luis García Juárez (otro cacique).

16-Calle Manuel González Peral.

Este hombre fue un falangista asesinado por la CNT en Jesús del Monte. Fue una víctima. Sin duda. Por ello, en este caso, el planteamiento de ACR es que fue una víctima entre otras muchas y que dedicar una calle sólo a él supone un agravio a los demás asesinados. Por ello, ACR sugiere cambiar el nombre de la calle a «Víctimas de la violencia» o algo similar.

Sin embargo, el resto de la corporación (PP, PRC y PSOE) argumenta que eso podía herir  la sensibilidad de la familia. En esto, Alfonso Vélez, concejal de ACR, se hace la siguiente pregunta: ¿qué pasa entonces con la sensibilidad de las familias del resto de víctimas? Una pregunta, una posición, por cierto, que los párrocos también muestran en la carta a los feligreses.

Y esta pregunta la hago yo: ¿acaso hay víctimas de primera y otras de segunda?

Todo lo acontecido y expuesto me lleva a una única conclusión:

Se vende un éxito democrático cuando en verdad no es más que un lavado de cara superficial sin que el entramado franquista local haya cedido en nada. Parece que, después de tantos años, algunos pueden seguir diciendo el famoso «la calle es mía».