El PP favorece a los tránsfugas de Ciudadanos en Santander

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Los concejales David González y Cora Vielva ya han comunicado al Ayuntamiento de Santander que han dejado de pertenecer al partido por cuya lista fueron elegidos, Ciudadanos, del que se han marchado en medio de un proceso judicial que puede acarrear la imputación de González quien, de este modo, si cumpliera con las normas del partido naranja, debería abandonar su acta. Así, abandonando el partido no se ve obligado a dejar de ser concejal.

David González, concejal de Ciudadanos en Santander, con la alcaldesa Gema Igual.

No será así, y su marcha del partido, justificada en la llegada de Félix Álvarez a la dirección sin primarias –contemplada así en los estatutos–, les convierte en tránsfugas y eso tiene consecuencias sobre las instituciones, como es su paso al grupo de no adscritos, una figura contemplada precisamente para combatir el transfuguismo, al no tener los derechos y recursos de los que disponen el resto de concejales.

Para este miércoles se ha convocado un Pleno en el que tendrá que procederse a la adaptación del nuevo escenario: desaparece el Grupo Ciudadanos –que permitieron que el PP siguiera al frente del Ayuntamiento tras la pérdida de la mayoría absoluta—y sus dos ediles pasan al de no adscritos, donde ya estaba Antonio Mantecón, que sigue perteneciendo al partido por el que se presentó, Santander Sí Puede, pero que fue expulsado por la marca Ganemos, denunciada por irregularidades y chantajes a los cargos que la usaron.

Un informe del secretario municipal, consultado por EL FARADIO, deja claro que los ediles no adscritos no pueden disponer de recursos como liberaciones económicas (salarios, aunque sí dietas por ir a comisiones, reuniones puntuales), uso de despachos y no forman parte de la Junta de Portavoces, no recibiendo, por tanto, determinada información municipal.

Y también especifica a lo que sí tienen derecho, como a la presencia con voz y voto en las comisiones, una serie de grupos de trabajo de carácter temático (Hacienda, Obras, etc) con menos miembros que el Pleno y en los que se trata de respetar la proporcionalidad de las mayorías.

Pero el informe del secretario no detalla la forma en que debe hacerse este reparto, ante la ausencia de antecedentes y normas que lo regulen, dejándolo a la decisión del equipo de Gobierno del Partido Popular.

Y el PP ha comunicado que para que los no adscritos (antes uno, ahora tres) tengan presencia en las comisiones no pueden tenerla todos, sino sólo dos en cada comisión.

Y les insta o bien a llegar a un acuerdo entre los tres (los dos ex de Ciudadanos y Mantecón) o, en caso de no haberlo, se hará por sorteo.

Ambas fórmulas benefician a los tránsfugas de Ciudadanos y perjudican a Mantecón: a la hora de negociar ellos son mayoría dentro de los no adscritos (dos de tres), y en caso de sorteo, tienen ellos el doble de posibilidades y presencia.

Esto les proporcionaría a ellos más presencia en comisiones (esto implica votar decisiones, acceso a información y una dieta económica por asistencia), de las que quedaría expulsado Mantecón, que quedaría así con menos acceso a información institucional y sin poder votar determinadas decisiones.

El Ayuntamiento se escuda en que, al no ser formalmente un grupo, como marca el secretario en su informe, no se les puede marcar normas de funcionamiento interno, pero, a continuación añaden que estas deberán adoptarse por consenso de sus miembros.

El caso es que este informe del secretario no coincide con el criterio que él mismo marcó cuando se produjo la expulsión de Antonio Mantecón, ya que en ese momento dijo que «el concejal no adscrito tiene derecho a participar en todas las comisiones» por lo que había que proceder a su «reestructuración», mientras que ahora ese derecho se reparte de forma que no lo pueden ejercer todos los no adscritos (que en teoría son independientes y aislados entre sí, no un grupo), sino algunos de ellos.

Mientras, queda por ver qué sucederá en el Parlamento de Cantabria, ya que el diputado Juan Ramón Carrancio también ha abandonado el partido por el que fue elegido, pero no el escaño ni su presencia en la Mesa del Parlamento, órgano de funcionamiento de la Cámara con una retribución mayor que la de un parlamentario ‘raso’.

El nuevo coordinador de Ciudadanos, Félix Álvarez, ha pedido tanto a Revilla como a Gema Igual que no se apoyen en tránsfugas. Revilla ya se ha pronunciado en contra, mientras que la alcaldesa de Santander no lo ha hecho expresamente.

En Santander, en las últimas elecicones, el PP perdió la mayoría absoluta, pero retuvo la Alcaldía gracias a Ciudadanos que, sin embargo, siempre negaba la existencia de un pacto y sus contenidos, y que ellos mismos han confirmado hace semanas, justificándolo ahora en una imposición de la dirección nacional que, por tanto, en estos momentos ya no están obligados a respetar.

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1 Comentario

  • Saturnino
    12 de julio de 2017

    La alcaldesa sigue necesitando la sumisión absoluta de esos dos individuos que estafaron a sus votantes en campaña prometiendo cambios que, cuando pudieron, no quisieron hacer y por tanto les dará lo que haga falta para que sigan asintiendo como buenos borreguitos!

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