Comisiones Obreras de Cantabria cree que Alfredo Pérez Fernández, el propietario del grupo Pitma, principal accionista del Racing de Santander, no debe ser presidente del club.

De izquierda a derecha, arriba: Isabel López, Sonia Clabuig, Virginia del Moral, Asun López, Eva Berodia; abajo: Marta Pellón, Marta Fernández, Arancha Varela y Patricia Pinto.

Según recuerdan, el nuevo presidente Alfredo Pérez Fernández está envuelto en un escándalo de persecución sindical ya que una de sus empresas, AON Mobile, despidió a nueve mujeres por haberse organizado en una candidatura sindical de CCOO, en un caso que está despertando críticas y alarma sindical.

Por eso ha convocado una concentración este martes 5 de junio en el estadio de El Sardinero a las 18:30 horas coincidiendo con el Consejo de Administración del club de fútbol que prevé nombrar al empresario como presidente del club.

Bajo el lema “Un presidente indigno para el Racing”, la concentración busca “meterle un gol a la persecución sindical” ante la práctica reiterada de los despidos nulos a personas organizadas en listas de CCOO en las empresas del grupo empresarial de Pérez Fernández.

Durante la concentración se chutarán penaltis contra la persecución sindical y se mostrará la indignación por el caso de #Las9deAON, las empleadas para las que CCOO pide la readmisión inmediata en sus puestos de trabajo.

El caso ya está en tribunales, después de que fracasara el acto de conciliación en el Orecla, y el juicio ya ha sido fijado para el 17 de julio.

Las nueve de AON son Isabel López Palau, Marta Fernández González, Virginia del Moral Fernández, Sonia Calabuig Salegui, Marta Pellón Palacio, Mª Asunción López González, Arancha Varela Montila, Patricia Pinto García y Eva Barodia Regaliza.

Conócelas mejor en este reportaje de Eva Mora

Las trabajadoras despedidas se desempeñaban como teleoperadoras y algunas llevaban ocho años de servicio en diferentes empresas del grupo de telemárketing. En dos casos, como se señalaba, los contratos eventuales terminaron el 31 de marzo y fueron renovados el 1 de abril.

Cinco días después fueron despedidas por “disminución continuada y voluntaria del rendimiento.

Y el suyo no es el primer caso del Grupo Pitma: hace cinco años, a finales de 2012, otra empresa del grupo despidió a 13 trabajadores de Comisiones Obreras, cuyos despidos declaró el Juzgado nulos.

Son prácticas que Comisiones Obreras tacha de «indecentes». Este sindicato ha pedido una Ley para evitar que las empresas con este tipo de prácticas reciban dinero público, como es el caso de Pitma (y de otras como La Gallofa, condenada también por persecución sindical).