Los presupuestos generales de Cantabria para 2019 se basan en la “confianza” de que el Gobierno central sepa como compensar la pérdida de ingresos que el propio Estado prevé reducir.

Es una afirmación que hace el propio Ejecutivo en el documento presupuestario, consultado por EL FARADIO.

El consejero de Economía, Hacienda y Empleo, Juan José Sota, registra el proyecto de ley de Presupuestos Generales de Cantabria para 2019. FOTO: Raúl Lucio.

En concreto, lo que dice el Gobierno autonómico es que maneja una previsión de ingresos superior a la que ha recibido este año (a la propia liquidación del presupuesto que le ha trasladado el Ministerio de Hacienda).

Una liquidación que además será reducida ya que en julio del año pasado se implantó un nuevo sistema, denominado Suministro Inmediato de Información que, admiten, supondrá una pérdida de recursos para las Comunidades Autónomas.

Pero el Gobierno explica que esta consignación superior de ingresos se debe a “la confianza en que desde el Estado Central se adopten las medidas necesarias para compensar esta pérdida de recursos”.

En el informe se dice que “evidentemente” el Ejecutivo “deberá mantenerse a la expectativa” sobre lo que suceda para “en caso de ser necesario” adoptar “medidas de control del
objetivo de estabilidad presupuestaria” durante el año si finalmente la cifra acaba siendo menor, como ya se apunta a priori.

En ese caso, Hacienda ya avanza que aplicará acuerdos de no disponibilidad de partidas en el Presupuesto de Gastos no Financieros aprobado para este año por una cifra igual a la cantidad que se reduzca.

Acuerdos de no disponibilidad significa dejar de gastar partidas que se hayan previsto en los presupuestos, y estos gastos que no se acometerán serán en el apartado no financiero (el que recoge las operaciones de crédito o deuda), es decir, en las inversiones y servicios.

Además, no se cuenta con los presupuestos estatales, que vienen con aportaciones a las comunidades autónomas (eso permitiría ‘afinar’ más en las cuentas cántabras la previsión de dinero que viniera del Gobierno central)

De modo que ambas circunstancias suponen que el Gobierno de Cantabria “se verá obligado” a mantener un “control adicional” sobre la evolución de la ejecución de los presupuestos para poder reacciones si las cifras que recibe son menores a las que maneja o incluso si son prorrogadas.

En cuanto a la deuda, el documento presupuestario admite que hay factores que impiden calcular con precisión como evolucionará, como puede ser la evolución del PIB y la deuda de las empresas y organismos públicos, que no es conocida de antemano.

En consecuencia, “es evidente que resultará necesario controlar el volumen de deuda durante el ejercicio 2019 para garantizar este objetivo de endeudamiento” por lo que “se podrían realizar los ajustes técnicos oportunos en los mecanismos adicionales de financiación y resto de operaciones de endeudamiento”.

Los presupuestos de Cantabria ascienden a 2.850 millones de euros, con una subida de un 4,47% respecto al anterior (que en realidad es de un ),  aunque cae un 2% es la sección de las inversiones reales. Estos presupuestos lanzados por PSOE-PRC cuentan con el apoyo de Ciudadanos (pendiente de la aprobación definitiva de los presupuestos tras el trámite en el Parlamento), que les ha arrancado un compromiso de reducción de impuestos de 40 millones de euros que ha llevado a otros partidos a plantear la duda de el efecto sobre de dónde se reducirá estos gastos.

PRESUPUESTOS DE SANTANDER

En Santander los presupuestos también venían con aviso previo del Interventor que contradecía la información trasladada desde el equipo de Gobierno. Un informe señalaba que la rebaja fiscal anunciada por el PP incumpliría la regla de gasto aprobada para el ejercicio anterior (la compra de autobuses municipales llevó a incumplirla y a recortar un millón de euros del servicio de basuras), lo que se traduciría en «correcciones» (medidas de reducción de gasto o de aumento de ingresos –impuestos–) cuando se confirmara.