La Audiencia de Cantabria ha desestimado el recurso de Podemos, con lo que ratifica la sentencia del Juzgado de Primera Instancia número 6 de Santander que declaró nula la resolución del Comité Electoral de la formación que sirvió para apartar de las primarias autonómicas a la exsecretaria general, Rosana Alonso, y dos miembros de su equipo, el exsecretario de Organización, David González y la exsecretaria de Feminismos, Belén Milán.

La sentencia, en abril de este año, validaba sus candidaturas para participar en un proceso interno que nunca llegó a celebrarse para la confección de unas listas en las que sí aparecía, en el número tres, la exdiputada Verónica Ordóñez, que había rivalizado con Alonso por el control de la formación morada en Cantabria, y que había sido impulsora de las denuncias internas por acoso de las que se valió el Comité Electoral para purgar a sus oponentes.

En una resolución a la que ha tenido acceso EL FARADIO, firmada este lunes, la Audiencia rechaza todos los argumentos del recurso de Podemos, reitera que un partido político debe «respetar las exigencias constitucionales, evitando la indefensión, y respetando los principios de tipicidad y legalidad».

Y certifica la indefensión de Alonso, González y Milán, que considera “palmaria” y “evidente”, porque no eran parte “ni denunciante ni denunciada” en el informe del Comité de Seguridad y Salud Laboral que sirvió para apartarles de las primarias.

En este sentido, rarifica que a ninguno de ellos les tomó declaración el partido ni intervinieron como testigos en la investigación interna de Podemos por las denuncias de acoso contra el exdiputado José Ramón Blanco.

Aquel informe, «sin haberles dado ningún tipo de audiencia», concluía con la afirmación de que «por sus graves faltas de respeto y autoritarismo», Alonso, González y Millán «no deberían poder ostentar cargo de responsabilidad alguna en el partido».

Esto fue utilizado por el Comité Electoral para «privarles del derecho de sufragio pasivo», ya que no cumplían el requisito interno de «carecer de informes desfavorables en relación con la seguridad y salud laboral».

La sentencia vuelve a imponer las costas a Podemos por el recurso de alzada, confirma la imposición de costas de la sentencia previa y abre un periodo de 20 días para un posible recurso de casación y extraordinario por infracción procesal.

En el juicio, miembros del citado comité admitieron que plantearon esa sanción sin que hubiera denuncia previa contra ellos y que ni siquiera se les tomara testimonio para que pudieran matizar o rebatir esas acusaciones.

El 22 de octubre en EL FARADIO DE LA MAÑANA, días después de trascender en prensa el contenido del informe del Comité de Seguridad y Salud Laboral de Podemos, Ordóñez había desligado las denuncias del proceso de primarias.

Sin embargo la sentencia del mes de abril reveló un dato que no había trascendido: que quienes denunciaron por correo electrónico ante el Comité Electoral a la lista de Rosana Alonso, lo que desembocó en su exclusión de las primarias, fueron también las otras dos denunciantes de José Ramón Blanco: Lydia Alegría, la candidata de Podemos al Ayuntamiento de Santander, y Lucía Reguilón, que era la periodista del grupo parlamentario.

Con posterioridad a la anulación de las candidaturas de Alonso y su equipo, tanto Ordóñez como Reguilón presentaron sendas denuncias ante los tribunales contra Blanco que siguen pendientes de resolución judicial.

CON GESTORA Y SIN REPRESENTACIÓN

Podemos está regido en Cantabria por una gestora, un Equipo Técnico que tomó el control por orden de la dirección de Podemos. Fue inmediatamente después de que el Grupo Parlamentario retirara la portavocía a Ordóñez, que terminó la legislatura como diputada no adscrita, mientras que José Ramón Blanco y Alberto Bolado pasaron a integrar el Grupo Mixto.

A pesar de estas circunstancias el Equipo Técnico avaló a Ordóñez como representante legítima de Podemos en la Cámara autonómica, al tiempo que rechazaba la representatividad de Blanco y Bolado.

La situación interna de Podemos, que no celebró finalmente primarias para las listas al Parlamento de Cantabria – en las que aparecía como número 3 Verónica Ordóñez-, obstaculizó el entendimiento con Izquierda Unida y Equo, hasta el punto de que concurrieron por separado a las elecciones del 26 de mayo, con muy malos resultados para las dos candidaturas.

De tener 3 diputados y grupo parlamentario, Podemos pasó a ser extraparlamentario en Cantabria.

Tampoco obtuvo representación en las elecciones generales del 28 de abril, cuando en las anteriores (2015 y 2016) había obtenido el escaño, precisamente de Rosana Alonso. Y en la última convocatoria del 10 de noviembre ha repetido un resultado similar, quedándose fuera del reparto por Cantabria.

El partido morado sólo cuenta con dos concejales en los 102 ayuntamientos de Cantabria: uno en Castro Urdiales – lugar de origen de Ordóñez- y otro en Bezana – donde es concejal de Urbanismo el último candidato de las elecciones Generales, Luis del Piñal.