Dos de los miembros del nuevo Gobierno de Cantabria PRC-PSOE, Rafael de la Sierra y Juan José Sota, figuran entre los beneficiarios de los créditos blandos, en mejores condiciones que el mercado, que la antigua Caja Cantabria concedía a consejeros de la entidad.

Rafael de la Sierra y Juan José Sota, en su toma de posesión como consejeros

Entre ellos, dada la condición vinculada a lo público de la Caja, figuraban durante la última decada representantes de partidos políticos, patronal y sindicatos, así como de ayuntamientos, impositores y representantes de la sociedad bajo la denominación de “reconocido prestigio”.

Durante esos años había índices que fuera de la Caja, para clientes normales en el sector financiero, se movían por el Euribor+2, frente al Euribor+0,50 que se concedía a consejeros de la Caja.

LOS CRÉDITOS BLANDOS

Los créditos blandos comenzaron en las cajas, al igual que en el resto del sector público, como una forma de compensar a los trabajadores de estas entidades con los propios productos, como sucede, por ejemplo, con los descuentos en billetes de tren a los familiares de trabajadores ferroviarios.

Pero esta figura se acabó extendiendo más allá de los propios trabajadores, abarcando a los representantes en los consejos de administración, que sumaban así esta posibilidad a otras compensaciones, como las dietas por asistencia, los regalos en forma de entradas a toros, fútbol y FIS.

Y que se añadían a las propias retribuciones que de forma paralela a la caja tenían sus miembros, algunas de ellas con dinero público también, en el caso de los diputados o concejales.

CARAS CONOCIDAS

En la lista de receptores de préstamos blandos, nombrados parte de ellos a propuesta del Parlamento de Cantabria, figuran caras conocidas de la última década de la política cántabra, como Carlos Saiz, que fuera secretario general del PP.

Es el caso de Rafael de la Sierra, principal novedad en la parte regionalista del nuevo Gobierno de Cantabria, al ser el único de los consejeros que no repite respecto a 2003.

Pero eso no significa que sea una cara nueva: el consejero de Presidencia y Justicia ha sido durante años portavoz del PRC en el Parlamento de Cantabria, que llegó a presidir, y también ha sido concejal en Santander y consejero durante años en Caja Cantabria.

Por su parte, Juan José Sota, consejero de Economía, Hacienda y Empleo, también es un veterano político, que ha sido senador, diputado, concejal, director general de Administración Local, consejero de Industria y asesor en el Parlamento, en la pasada legislatura.

Por tanto, ante esta trayectoria tan ligada a sus partidos, era previsible su paso en algún momento por la entidad financiera, hoy integrada en Liberbank y sin tanta relación con lo público (formalmente es un banco privado formado por varias cajas).

LOS CRÉDITOS A DE LA SIERRA

De la Sierra no es ni el que más préstamos pide ni el que más cantidades, pero las cifras son significativas:

A partir de 2004, fecha a partir de que por ley fue obligatorio hacer constar este tipo de operaciones, le constan dos crédito de 230.000 euros al Euribor+0’7 en los años 2005 y 2007, otro de 228.000 euros en las mismas condiciones a un familiar vinculado (posibilidad que también tenían los consejeros de la caja), además de un préstamo personal por valor de 42.000 euros al Euribor +1,5 o mil euros de un préstamo hipotecario.

LOS CRÉDITOS A SOTA

En cuanto a Juan José Sota, no son grandes cifras (o no las mayores en el conjunto de los consejeros): le constan un préstamo hipotecario por valor de 46.000 euros al MIBOR+0,75, uno personal por valor de 15.000 euros, así como dos préstamos personales de 1.000 euros con un interés fijo de 9,25 y un aval para 2.000 euros con una comisión del 0,75 trimestral.