Tecnología y solidaridad se alían para combatir el hambre y el despilfarro de alimentos

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En 2017, los hogares españoles desperdiciaron 1.229 millones de kg de alimentos solo en el año 2017, lo que supone 23,6 millones de kilos semanales. Unas cifras demoledoras en las que los hogares son los mayores responsables, el 42% del desperdicio se produce en ellos.

Un tercio de la comida que se produce termina siendo desperdiciada

Se estima que la perdida de alimentos por persona al año en España está en 176 kilos, mas o menos en la media europea, si bien lejos de los casi 600 kilos por persona que arrastra Holanda.

“Si el desperdicio alimenticio fuera un país, sería el tercer mayor contribuyente a la contaminación después de Estados Unidos y China”, advierte José María Medina, director de Prosalus.

“Las estadísticas demuestran que el despilfarro de alimentos no ha dejado de crecer pese a todo lo que ha crecido el uso de plásticos en la industria alimentaria, entonces en vez de tener un problema, tenemos dos”, añade Blanca Ruibal, responsable de Agricultura y Alimentación de la asociación Amigos de la Tierra.

Un tercio de la comida producida se desperdicia.

El Banco de Alimentos de Madrid está formado por cientos de voluntarios

“Hay tiendas y centros comerciales que no pueden hacer nada con todo eso que les sobra, y lo tienen que tirar., Es una contradicción, que tires comida cuando hay gente que no puede comer, cuando hay una necesidad”, lamenta Eric Bench, de ‘Cenas con fecha’,  un proyecto gastronómico y solidario itinerante para combatir el despilfarro de alimentos.

Es una de las iniciativas y debates que podrán verse en el documental ‘Tus desperdicios y otros manjares’, que suma nueve selecciones a los Premios Goya, del realizador cántabro Richard Zubelzu, miembro de la Real Academia de Cine. Un trabajo que se estrenará este sábado 8 a las seis de la tarde en el Teatro Principal de Reinosa.

En él se analizan aspectos como el marketing que ejercen las grandes empresas sobre el consumidor que lo llevan a comprar, no solo mas cantidades de las que necesitan, sino también a comprar productos que realmente no necesita.

«Uno de los problemas que tenemos es que las decisiones sobre estos asuntos se toman en Bruselas, y en Bruselas tienen mucha fuerza los lobbies y la gran industria y las grandes empresas», apunta Ana Etchenique, vicepresidenta de CECU (Confederación de Consumidores y Uusuarios).

Maquina de solidaridad, una original iniciativa de ayuda

En el otro apartado del debate está el hambre: 1 de cada 5 niños en España se quedan con hambre diariamente, y para luchar contra este tipo de situaciones nacieron los bancos de alimentos. El primero fue el de Barcelona, y a raíz de esa idea se creo el de Madrid.

Empezó con unos pocos voluntarios y un par de entidades benéficas y hoy en día cuenta ya con 400 personas trabajando por el hambre de la gente, 400 personas que están ahí como voluntarios. Mas de 500 entidades benéficas reciben alimentos cada año.

Un ejemplo de las iniciativas que llevan a cabo este tipo de asociaciones es la ‘Operación kilo’, conocida porque tanto colegios como empresas, como otros tipos de entidades la llevan a cabo de vez e cuando. Otro tipo de acciones también son ‘La gran recogida’.

Y surgen iniciativas diferentes como las maquinas de solidaridad. Se trata de una maquina similar a la maquina de tabaco en cuanto a su forma, pero a diferencia de esta, la maquina de solidaridad «da vida», mientras que la de tabaco «la quita». Una ducha, un café, un bono de bus, un corte de pelo…son algunas de las cosas que la maquina solidaria contiene.

Otras iniciativas solidarias vienen en forma de aplicaciones para el móvil, es el caso por ejemplo de yonodesperdicio, una app de Prosalus. La cosa es tan sencilla como registrarse en su aplicación -utilizable tanto desde la web como desde la app móvil-. Desde ella se pueden ver las ofertas de alimentos que está haciendo la comunidad, si alguna interesa, se abre una conversación con esa persona para concertar la entrega.

 

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