Tras el éxito del estreno de su nueva obra, ‘Mal’, hemos querido hablar con Edy Asenjo para analizar esta y otras de las obras que han triunfado en El Principal, ese teatro escondido en una antigua casa de la capital cántabra.

El Principal cuenta actualmente en cartel con ‘(Mal)Criadas’, una obra en la que el que quien fue el premio Max de Teatro realiza una versión extrema del clásico ‘Las criadas’, de Jean Genet.

Edy Asenjo en El Principal.

La trama habla de la relación que mantienen dos hermanas que trabajan como criadas para una dama de la alta burguesía en el París de finales de la II Guerra Mundial. Es la obra que ha sucedido a ‘Ex’ y ‘La sesión’, las otras obras de producción propia de El Principal Santander, que han tenido más de 2.000 espectadores.

Los interesados en conocer este montaje, que se representará todos los viernes y sábados de noviembre a las 20.00 horas, pueden reservar las entradas en el teléfono 606 897 950.

Sobre este drama y los anteriores clásicos versionados, EL FARADIO habla con Edy Asenjo.

– Parece que en tus obras te guste interiorizar en los extremos de las personalidades de los personajes, o ver hasta dónde pueden llegar. Llevarles al extremos. ¿Por qué te gustan tanto este tipo de tramas?

Es que si eso no tiene lugar yo creo que no tiene interés. Es como el vino rebajado con agua. Es algo que en la ficción, en un teatro de 90 minutos, la trama tiene que ser intensa, agudizada y subrayada, y hasta el extremo claro está.

El teatro no deja de ser una pequeña compresión de la vida, así que hay que tirar del extremo. Estas tramas me gustan pero por lo que le gusta a la gente. Lo otro es un aburrimiento, un coñazo. Siempre vamos con historias potentes, con textos que ya de inicio tiran muchos al ser leídos, y que

Jean Genet, Albert Camus, Junyent… toda esa gente escribió tan bien, tan bien… que el texto ya una vez le das un ojo, ves que los personajes ya están puestos en situaciones límites. Me encanta eso, claro.

– Sí, porque en ‘Mal Criadas’, parece que el juego se les va de las manos a las hermanas al ir demasiado lejos. Un recurso que coincide, en términos generales, con ‘Ex’, que aguantó más de un año en cartel y estaba basada en ‘El Malentendido’ de Camus…

Yo creo que es la única manera de reconocernos como espectadores en situaciones vividas por otros. Y que sirvan un poco de espejo el llevar a la gente a situaciones de estrés máximas a los personajes. Si esto no tiene lugar, yo creo que te quedas como a medio camino. Pero bueno, como todo, es como si en vez de hacer un oleo haces un acuarela. Está bien pintado, los colores están bien, pero no es la realidad, no es la naturaleza en su grado puro.

La señora y el servicio en ‘Mal (criadas)’.

– No es la primera vez que incides en el tema de la diferencia de clases, o en historias que giran alrededor del dinero. ¿Crees que este lo corrompe todo?

Sí, claro. Lo creo y lo creemos. Creo que los móviles de la naturaleza humana están ya descubiertos. El dinero, la familia, las pasiones… es lo que mueve la gente. Y el dinero viene a corromperlo todo, a cambiar el comportamiento de las personas. Emborrona, convierte a una persona aparentemente honesta y noble en alguien corrupto. Porque el dinero te da acceso a cosas que la naturaleza humana no tiene al alcance.

Pero no solamente el dinero, sino una falta de autoestima. Los personajes les hace compensar una cosa con la otra, necesitan dinero para curar eso otro.

– Así la falta de autoestima es un agravante o se ve agravada más por la llegada de dinero, ¿no?

Sí, hay una cosa importante que es la falta de autoestima unido a la falta de cultura. Hace que los personajes nuestros intenten llenar esos huecos con dinero. Las criadas de ‘Mal’, las dueñas de la pensión en ‘Ex’, es gente con un nivel cultural bajo, que no tiene una riqueza personal, ni un mundo interior muy desarrollado.

Entonces todo lo achacan al exterior que les rodea. Es un poco eso de que ‘el mundo me debe y no me paga’. Y eso lo vemos en el día a día también. Creo que la cultura es fundamental para que la gente no le eche la culpa al resto del mundo de lo que le pasa. Estos personajes sí le echan al mundo la culpa de sus males, por lo que se convierten en corruptos, que roban y que matan. Si su nivel cultural fuera otro, no lo haría.

– Esta obra trata de dos hermanas que sirven juntas y se intercambian los roles. En La Sesión, la anterior obra que tuviste en cartel, también la protagonizaban dos hermanas. ¿Te atraen ese tipo de historias donde la conexión familiar quizá no sea suficiente para conseguir un buen final?

A mí lo que me encantan son las historias protagonizadas por mujeres. Creo que las mujeres son las que le dan una cierta riqueza a las relaciones interpersonales. Los hombres, entre la testosterona y otro tipo de cosas son más simples, más sencillos, más verticales.

Esa cuarta dimensión en la vida le dan esas relaciones entre mujeres; y si es dentro de la familia mucho mejor, porque se dan una serie de estrategias o vaivenes, un concepto del tiempo diferente. En los hombres yo creo que todo tiene que ser de una forma más inmediata, y las mujeres se toman más tiempo. El juego es mucho más rico.

En ‘La Sesión’ había un conflicto entre dos hermanas, con dinero de por medio de nuevo, porque había herencia que repartir. Y la confrontación no era tan frontal como hubiera sido entre dos hombres. Entre dos hermanas era más lateralizada, y todo eso genera un juego mucho más divertido.

– Los que hayan leído el clásico de Jean Genet, ‘Las Criadas’, en el que está basada la obra ‘Mal’, ¿qué diferencias van a encontrar?

Nosotros hemos intentado huir de la pamplina, el ridículo. He echado un ojo a muchas puestas de escena, y como es un texto tan bueno a la gente a veces se le ha ido la olla. A los actores, a los directores… Hemos intentado ser austeros en ese sentido, buscando la autenticidad entre las actrices, sin juego floral.

Nos hemos permitido pocas licencias porque de por sí es tan potente la obra que no hace falta más. Es un intento de que el espectador se sumerja en algo que está ocurriendo de verdad. Los personajes que salen de aquí son bastante humanos, a pesar de que el texto de Genet es muy complejo, con mucas interpretaciones. Será Genet en estado puro, no hemos cortado nada.

– Las anteriores obras han durado mucho en cartel, y parece que Mal criadas estrena con llenos. ¿Hasta cuándo os planteáis interpretarla? ¿Tenéis una fecha pensada?

Tenemos un cupo de entre 30 ó 40 representaciones por obra, y todo lo que venga de más será bienvenido. Solemos alternarlas con otras obras que ya tenemos en la cartera y que vamos rescatando. Creo que hasta enero o febrero duraremos con ‘Mal’.

– ¿Estás ya pensando en las siguientes obras?

Sí, estoy con ello ya para que en los comienzos de 2016 poder anunciaros cosas nuevas, nuevos autores.