Trabajadores de las ambulancias critican incumplimientos de seguridad

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Miembros de la sección sindical de Ambuibérica, responsable del servicio de ambulancias del Servicio Cántabro de Salud, advierten de los “flagrantes” incumplimientos por parte de esta empresa de las normativas de seguridad, condiciones laborales y otros requisitos.

Lo hacen en un escrito dirigido a la gerencia del Servicio Cántabro de Salud, en el que lamentan el “retroceso y empeoramiento de niveles incalculables en la atención prestada a los pacientes” y piden actuaciones “de urgencia”.

Servicio de ambulancias

Servicio de ambulancias

Así, se refieren a cuestiones como la distribución interna dentro de las ambulancias, las sujeciones (advierten del riesgo de las caídas en los traslados), sin medios alternativos en caso de avería, la falta de reposición del vestuario laboral –con la consiguiente ausencia de esterilización cada vez y el “riesgo biológico” tanto para usuarios como para los profesionales–, o la falta de un espacio para descanso cuando esté fuera de uso.

También hablan de la falta de instrumentos como termómetros internos, tensiómetros, cubos adecuados de residuos que garanticen la higiene, la falta de barras de sujeción, o el hecho de que los cierres de las corras son de plástico que, entienden, no garantiza la seguridad, o que el extintor de la zona asistencial es “inaccesible” desde el interior de la parte sanitaria, mientras que el de la zona no asistencial está “fuera de garantía”.

Asimismo, citan la falta de un asiento homologado para los técnicos ayudantes les impide a estos profesionales prestar asistencia, en lo que se había convertido en una característica positiva del servicio en los últimos años.

Igualmente, critican la “indefensión total” e “incertidumbre” en determinados servicios en los que integridad “corre peligro” al no contar con protección extra y hacerles moverse entre estar “al borde del intrusismo profesional” o caer en el “exceso en la asunción de funciones”.

En los distintos casos van enumerando los decretos y normativas que se incumplen, como el “vacío legal” respecto a los traslados para psiquiatría –que requieren medidas específicas– que puede suponer sanciones a los conductores y que causa un “riesgo e indefensión inasumible”, señalando también sanciones que en otras comunidades autónomas se han producido por esos incumplimientos.

El Comité de Empresa recuerda en su escrito que había solicitado hace más de un año una reunión con la gerencia del Servicio Cántabro de Salud para hablar de protocolos de actuación y seguridad, sin tener respuesta.

El pasado verano la empresa fue condenada judicialmente a abonar a sus trabajadores el exceso de jornada del último año: más de 50.000 horas extras y un importe superior a los 800.000 euros que la empresa quería considerar tiempo “de presencia”.

La sentencia se consiguió a instancias del sindicato USO, que también había alertado del abuso de la figura de prácticas, con contratos encadenados por esta modalidad que afectaría a una cuarta parte de la plantilla, mientras ATI ha denunciado el incumplimiento de los servicios mínimos en la reciente huelga de los servicios de atención primaria.

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