El Ministerio de Transición Ecológica preara una orden para abonar a empresas eléctricas sobrecostes, a través de la factura de la luz, después de que así lo haya establecido una sentencia del Tribunal Supremo,

El impuesto se cargará sobre la factura

En concreto, según informaba esta semana en EL CONFIDENCIAL el periodista Juan Cruz Peña, Cantabria es la tercera comunidad más afectada, con un pago de 7,69 euros anual más en el recibo eléctrico. Las más afectadas son Galicia y Castilla-León. En total, entre todas las comunidades afectadas se generarán ingresos por valor de 110 millones de euros. Sólo Baleares y el País Vasco no tiene ningún tipo de afección, pero en el resto de comunidades a partir de Cantabria la cifra está por debajo de los cinco euros.

En 2013, tal y como enumera EL CONFIDENCIAL, distintos gobiernos autonómicos crearon una serie de impuestos sobre los activos de las eléctricas. Algunas de ellas recurrieron, en un recurso que fue estimado en parte, incidiendo en que esos impuestos debían compensarse en los peajes de la factura eléctrica. Galicia y Castilla-León resultan las más afectadas debido a los canones eólicos en estas comunidades con abundante generación eólica y que fueron las que más recaudaron.

De momento es una propuesta, enviada ya a la Comisión Nacional del Mercado de la Competencia para que se pronuncie, si bien el Supremo señalaba que el asunto debía estar resuelto antes del pasado 15 de julio. Las partes afectadas podrán presentar alegaciones antes del 10 de agosto. Se ha cargado sobre el usuario en lugar de sobre las comunidades que recaudaron.

Es una victoria de las empresas del oligopolio eléctrico (en este caso Iberdrola, Endesa, Naturgy, EDP y Viesgo), un modelo contra el que están surgiendo otras alternativas, como las cooperativas de energías renovables.

En Cantabria, existe la cooperativa Solabria, que ya comercializa energía de origen renovables y factura por sí misma, en un proceso que puede hacerse desde su página Web.

Solabria sigue un modelo en el que los usuarios, los cooperativistas, se hacen socios. Y todo dentro de un modelo que permite ahorrar, ya que la cooperativa no tiene ánimo de lucro.

Además, su objetivo es el ahorro de energía, para lo cual hacen un asesoramiento personalizado sobre su consumo, potencia, etc…

También existen tarifas especiales para colectivos con algún tipo de dificultad económica, en un momento en que se debate sobre la pobreza energética.

Como cooperativa, las decisiones las van tomando sus miembros, y está integrada en una federación estatal de cooperativas de energías renovables.