El Observatorio de la Vivienda organiza una mesa redonda sobre regeneración urbana

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El Observatorio de la Vivienda y Suelo de Cantabria organiza el próximo miércoles, 24 de octubre, a las 18:00 horas, la tercera mesa redonda sobre regeneración urbana.

Espacio Ricardo Lorenzo, sede del Colegio de Arquitectos para sus actividades culturales

En este caso, se hace bajo el título ‘La Regeneración Urbana III: ¿Qué escala debe tener para ser sostenible con mejoras energéticas y de accesibilidad? ¿La de un edificio? ¿La de un grupo de viviendas? ¿La de un barrio?’.

El acto se desarrollará en la sede del Colegio Oficial de Arquitectos de Cantabria, sito en la calle Los Aguayos, 5, de Santander, y contará con la participación del director general de Vivienda y Arquitectura, Francisco Javier Gómez Blanco; la arquitecta y catedrática emérita de la Universidad Politécnica de Madrid, Margarita de Luxán, y con los arquitectos Ana Lastra y Oscar Adrián Dossio, especialista en construcción bioclimática.

Precisamente, hace poco el Colegio de Arquitectos anunciaba que sus dos eses usarán energías renovables a través de la cooperativa Solabria, de la que además se han hecho socios, enmarcado dentro de su estrategia de sostenibilidad y su compromiso con el uso “responsable y sostenible” de la energía.

Dentro de esta estrategia, en breve harán público el cálculo de su huella de carbono (es decir, las emisiones de CO2 que generan con su actividad), para evidenciar ante la profesión y la sociedad el “necesario” o compromiso de la Arquitectura con la Baukultur de la Declaración de Davos, los Objetivos del Milenio ODS y la Agenda 2030.

La arquitectura está muy ligada al día a día: los edificios en los que vivimos o desarrollamos otras actividades canalizan nuestro consumo de energía, y de hecho pueden contribuir a reducirla, lo cual tiene la doble contribución de reducir las facturas y evitar daños al medio ambiente.

Existen técnicas como, por ejemplo, las ‘casas pasivas’, concepto desarrollado en Alemania en los años 80 que permiten ahorrar hasta un 75% de energía a través de técnicas de eficiencia, con técnicas como los aislantes térmicos, los cerramientos o la minimización de las pérdidas de ventilación con un sistema controlado con recuperación de calor, lo que evita el uso de mecanismos de refrigeración o calefacción convencionales.

SOLABRIA

Solabria sigue un modelo en el que los usuarios, los cooperativistas, se hacen socios. Y todo dentro de un modelo que permite ahorrar, ya que la cooperativa no tiene ánimo de lucro.

Solabria funciona como cooperativa

Además, su objetivo es el ahorro de energía, para lo cual hacen un asesoramiento personalizado sobre su consumo, potencia, etc…

También existen tarifas especiales para colectivos con algún tipo de dificultad económica, en un momento en que se debate sobre la pobreza energética, y no realizan cortes de suministro.

Como cooperativa, las decisiones las van tomando sus miembros, y está integrada en una federación estatal de cooperativas de energías renovables.

La empresa ya comercializa energía de origen renovables y factura por sí misma, en un proceso que puede hacerse desde su página Web y que permite, al sumar socios y clientes a este modelo, restarle poder a las empresas del oligopolio eléctrico, que se vienen, además, beneficiando de todo un sistema de ayudas públicas por conceptos como la disponibilidad de las centrales que acaba repercutiendo en la factura que paga el usuario.  

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