Las ventajas de la carne de pasto frente a la de pienso, en el Fluviarium de Liérganes
El Fluviarium de Liérganes acoge este viernes una charla sobre las ventajas de las razas autóctonas y la carne de pasto frente a la de pienso (es decir, sobre las reses que se alimentan directamente del pasto en lugar de por otros productos)
La actividad, organizada por Fundación Naturaleza y Hombre, correrá a cargo de Emma Serrano, investigadora del Centro de Investigaciones y Formación Agrarias (CIFA), y se inscribe dentro del proyecto LIFE ‘Anillo Verde de la Bahía de Santander’, que pretende crear una red de espacios naturales en torno a la bahía y divulgar sus valores medioambientales entre la población.
El aparato digestivo de los rumiantes como vacas, ovejas o cabras está adaptado a utilizar forrajes (pasto, hierba seca, silo de hierba…) como alimento. En la producción intensiva o industrial, sin embargo, los animales permanecen estabulados, se reduce la cantidad de forraje de las raciones y se incrementa la de piensos.
“Este tipo de alimentación consigue que el ganado crezca más rápido y con mayor proporción de grasa”, como señala Emma Serrano. “Pero, al mismo tiempo, la calidad se resiente. La composición de la carne del ganado alimentado con forraje es más rica en ácidos grasos poliinsaturados, especialmente del famoso tipo omega-3 y tiene menos ácidos grasos saturados, lo que la hace más cardiosaludable. La hierba verde es, además, rica en vitaminas y otros antioxidantes, que también pasan a la carne”.
Además, las ventajas se incrementan si el tipo de ganado que se cría es autóctono. Las razas rústicas son especialmente adecuadas para la producción de carne con pasto: a partir de un alimento poco concentrado como el forraje, tienen mayor capacidad de acumular grasa infiltrada, que es uno de los principales factores que hacen que la carne esté sabrosa. En Cantabria hay varias razas autóctonas como las vacas tudancas y las monchinas o la oveja carranzana, que son idóneas para este tipo de producción.
Esta charla, que se celebrará a las 19 h. con entrada libre hasta completar aforo, forma parte de los debates sobre temas medioambientales de interés local que, una vez al mes, tienen lugar en el Fluviarium de Liérganes. Este municipio se integra dentro del Anillo Verde de la Bahía de Santander desde que los Pozos de Valcaba se sumaron a esta red de espacios naturales.
El proyecto LIFE “Anillo Verde de la Bahía de Santander: conectando la naturaleza y la ciudad” está coordinado por Fundación Naturaleza y Hombre en colaboración con la empresa pública MARE y se lleva a cabo gracias a la cofinanciación de la Unión Europea a través del Programa LIFE de conservación medioambiental, a la de la Consejería de Medio Ambiente del Gobierno de Cantabria y al apoyo de Fundación Biodiversidad, dependiente del Ministerio para la Transición Ecológica, así como a la colaboración del Ayuntamiento de Liérganes y la Junta Vecinal de Pámanes para las actuaciones llevadas a cabo en este municipio.
PROYECTO DE LECHE DE PASTO
En Cantabria existe el proyecto ‘La Vaca Que Pasta’, que promueve la creación de cooperativas ganaderas en esta línea, y que ha sumado los estudios científicos en los que apoya estas conclusiones, apoyados en el Grupo Operativo (GO) “Praderas de Cantabria y alimentos saludables con beneficio ambiental”.
Este grupo de trabajo está formado por Unión de Ganaderos y Agricultores Montañeses (el sindicato UGAM-COAG) y AgroCantabria Sociedad Cooperativa, centros de investigación: Área de calidad de los alimentos de origen animal del Centro de Investigación y Formación Agraria (CIFA, dependiente de la Consejería de Medio Rural del Gobierno de Cantabria, el Departamento de calidad e innovación del CIFP –centro de formación profesional– La Granja, el Departamento de ingeniería Química y Biomolecular y el Departamento de química e ingeniería de procesos y recursos de la Universidad de Cantabria, además de empresarios como Leche El Buen Pastor y el grupo hostelero Deluz (que tiene restaurantes como Días de Sur, Deluz o la Caseta de Bombas, e impulsor de la cooperativa ganadera Siete Valles de Montaña).
El objetivo del proyecto de La Vaca que Pasta es transferir el conocimiento resultante de las investigaciones llevadas a cabo tanto a los productores como a los empresarios y consumidores, de manera que todos los agentes implicados sean conscientes de los beneficios que aporta este tipo de alimentación de ganado en diferentes aspectos.
Según detallaron en sus conclusiones, las vacas que pastan o comen hierba fresca producen leche y carne con grasa más saludable, disminuyendo la incidencia de obesidad y diabetes, presión arterial y enfermedades cardiovasculares.
Además, realizando estudios de huella de carbono y ácido grasos se ha demostrado la mejora de resultados cuando las vacas se alimentan de pasto o hierba fresca en pesebre.
Este tipo de alimentación mejora el perfil de los ácidos grasos poliinsaturados y la calidad nutritiva de la leche y la carne de vacuno.
En el plano ganadero, cuestiones como el uso racional de los fertilizantes, el mejor equilibrio alimenticio entre los nutrientes de las raciones ofrecidas a los rumiantes, la mejora genética y en definitiva un mayor conocimiento científico y técnico de los procesos implicados en la producción y calidad de alimentos contribuyen a la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero, ya que una gran parte de las emisiones proceden de la agricultura y ganadería. Así por ejemplo los suelos, el manejo del estiércol y la aplicación de fertilizantes son fuentes principales de óxido nitroso (N2O), el metano (CH4) procedente de los arrozales o de la fermentación entérica de los rumiantes y de la energía fósil, plásticos, pesticidas, etc., el dióxido de carbono (CO2).
Además, la producción y compra de alimentos para el ganado están deslocalizando grandes áreas de praderas y bosques en pro de cultivos proteicos, como la soja, la alfalfa, etc. Las praderas son grandes fuentes de proteína, actuando positivamente sobre los efectos del cambio climático como reservorios de secuestro de carbono; mientras, un laboreo continuado y desproporcionado contribuye a más emisiones y pérdida de carbono.