El Centro de Coordinación de Emergencias 112 del Gobierno de Cantabria ha gestionado, entre las 07:00 de ayer y las 7.00 de hoy, un centenar de intervenciones derivadas de 218 llamadas recibidas en relación al viento que ha azotado, fundamentalmente, el litoral, el centro y el valle de Villaverde, como consecuencia de la borrasca llamada Gabriel.

Rachas del oeste y noroeste de hasta 120 kilómetros por hora han provocado la activación por parte de la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) del aviso naranja en la zona costera, y el aviso amarillo en las citadas comarcas del interior.

El grueso de las llamadas se ha recibido a partir de las 15:00 horas, poco después de la entrada en vigor de los niveles de riesgo decretados por la AEMET.

Los incidentes gestionados se corresponden con la caída de árboles y ramas, que en algunos casos han cortado vías, como la CA-424 a la altura de Ribamontán al Montes o la CA-256 a su paso por Soba; desperfectos y desplazamiento de mobiliario urbano y señalética; daños en infraestructuras, fundamentalmente el desprendimiento de cascotes de fachadas y cornisas, y la caída de cableado de tendido eléctrico y telefónico, sin que se hayan registrado sucesos de gravedad ni daños en personas.

Los avisos por viento finalizan esta medianoche, tanto en el litoral como en el interior, y permanecerá activado el nivel de riesgo naranja por fenómenos costeros adversos hasta las 15:00 horas de este miércoles.

Se esperan hasta esa hora vientos de oeste y noroeste ocasionalmente de fuerza 8, y mar combinada del noroeste de 5 a 7 metros. Inmediatamente después, hasta el final del día, se rebaja el aviso al nivel inferior, amarillo, por mar combinada del noroeste con olas de 4 a 5 metros.

DISPOSITIVO EN SANTANDER

A la vista de las predicciones de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) y siguiendo los protocolos previstos para este tipo de situaciones, el Ayuntamiento santanderino desplegó el dispositivo preventivo horas antes de la activación de la alerta, ha explicado el concejal de Personal y Protección Ciudadana, Pedro Nalda.

Así, se procederá a la retirada de los vehículos que se encuentren estacionados en la avenida de García Lago y se acordonará la zona para evitar el acceso rodado y peatonal.

Mientras se mantenga activo el aviso naranja no se podrá aparcar en esta avenida y sólo se permitirá el acceso a residentes a sus garajes, así como a usuarios del hotel Chiqui, que podrán estacionar dentro del recinto hotelero.

Tampoco se permitirá el acceso al minizoo de la península de la Magdalena, ha agregado el edil, quien ha precisado que las medidas preventivas se irán modificando y adaptando en función de la evolución de las alertas.

En el caso de la alerta por fenómenos costeros adversos, se activará el nivel naranja –que conlleva el cierre de los espacios públicos más expuestos al oleaje- a las 15.00 horas del martes y se prevé que se prolongue hasta las 15.00 horas del miércoles, bajando entonces a nivel amarillo.

Por su parte, según las predicciones de la Aemet, la alerta naranja por vientos estará activa desde las 13.00 horas del martes hasta la medianoche y conllevará el cierre de Los Pinares así como de todas las instalaciones deportivas municipales.

Las instalaciones afectadas son el Complejo Municipal de Deportes Ruth Beitia, el campo municipal de golf de Mataleñas y todos los campos de fútbol.

Se aconseja mantenerse alejados del litoral y zonas expuestas al oleaje mientras dure la alerta y evitar lugares donde pueda haber riesgo de acumulación de agua o golpes de viento.

EL GOBIERNO CIFRA EN 15 MILLONES LOS DAÑOS PROVOCADOS POR EL TEMPORAL EN LAS CARRETERAS

El Gobierno de Cantabria estima en 15 millones de euros el valor de las reparaciones que, en una primera evaluación, tendrá que realizar para restaurar los daños provocados por el temporal de los últimos días en la red autonómica de carreteras, con desprendimientos que siguen produciéndose, según anunciaba el presidente Revilla en una visita al argayo de San Mateo, en Los Corrales de Buelna, que ha obligado a desalojar 11 viviendas y alrededor de 30 personas,

Revilla visita San Mateo, afectada por un argayo

El presidente espera que Cantabria pueda obtener recursos del Gobierno de España y en que el Estado permita a la Comunidad Autónoma un margen de endeudamiento que no compute como déficit para hacer frente a los efectos de las inundaciones en las infraestructuras públicas.

El Gobierno de Cantabria ha puesto a disposición ocho viviendas en Arenas de Iguña para acomodar, en coordinación con el Ayuntamiento de Los Corrales, a aquellas personas evacuadas que lo necesiten. Desde el Ayuntamiento, la alcaldesa Josefina González ha llamado a los vecinos a ponerse en contacto con el Ayuntamiento si no disponen de un piso donde realojarse. Hasta el momento, tan solo una persona ha sido reubicada en una casa rural, el resto se han trasladado a casas de familiares o amigos.

Esta medida se suma a la habilitación por parte de la Consejería de Sanidad de una Unidad de Soporte Vital Avanzado para prestar atención sanitaria a la población de la zona las 24 horas del día.

Según ha dicho, el argayo de San Mateo es en estos momentos unas de las principales preocupaciones de Cantabria, junto con el argayo en la CA-180, a la altura de Ruente, que impide el tráfico entre Cabezón de la Sal y Cabuérniga.

EL GOBIERNO ESPERA HABILITAR UN PASO PROVISIONAL ANTE EL ARGAYO DE RUENTE

El Gobierno de Cantabria estima que antes de tres semanas podrá habilitar un paso provisional en la CA-180, en Ruente, si las condiciones climatológicas lo permiten, una vez que se retire parte de la tierra caída y se construya un muro de refuerzo que sujete la carretera en el tramo afectado por las inundaciones. Estos trabajos, que han comenzado hoy, resultan imprescindibles para permitir el paso de vehículos en condiciones adecuadas de seguridad.

Visita al argayo de Ruente

Esta vía quedó afectada desde el pasado jueves por un argayo que ha ocasionado importantes destrozos, cortado la carretera y dañado también el puente sobre el río Saja, situado a la misma altura del corrimiento, lo que ha interrumpido el acceso al Valle de Cabuérniga desde Cabezón de la Sal.

El consejero de Obras Públicas, José María Mazón, junto al director general, José Luis Gochicoa, ha visitado a última hora de la mañana de este martes las actuaciones en la zona y ha expuesto a los alcaldes de Cabuérniga, Los Tojos y Ruente la solución adoptada para habilitar cuanto antes una vía de paso para los vecinos.

Según ha explicado, los sondeos y el estudio geotécnico de la zona efectuados por el Ejecutivo han permitido identificar que el argayo continúa deslizándose sobre la roca que lo soporta y empujando hacia el río la carretera, que actúa como contrafuerte al corrimiento de la tierra.

Para habilitar el paso provisional, el Ejecutivo rellenará primero el muro de sujeción de la carretera derruido por el desbordamiento del río para posteriormente reforzarlo con un nuevo muro de hormigón. Al mismo tiempo, se retirará toda la tierra caída para evitar nuevos desprendimientos y el desplazamiento que su peso provoca sobre la calzada.

La apertura total de la carretera se demorará unos tres meses, en función de la climatología, y pasa por la retirada de las cerca de 80.000 toneladas de tierra desprendidas. Para ello, se contratará a una empresa especializada para que realice los trabajos desde dos puntos de forma simultánea, con el fin de acelerar al máximo los mismos.

EL ALCALDE REGIONALISTA DE CABUÉRNIGA ADVIERTE DE UN DESBORDAMIENTO «INMINENTE» DEL SAJA

Río Saja a su paso por Cabuérniga

Mientras, el alcalde de Cabuérniga, el regionalista Gabriel Gómez, advertía  de un riesgo de desbordamiento “inminente” del río Saja, que puede afectar a viviendas de las localidades de Renedo, Terán y Sopeña, y ha acusado tanto a la Confederación Hidrográfica como a la Delegación del Gobierno en Cantabria de “mirar para otro lado”.

Gómez ha realizado esta denuncia pública ante la negativa de las autoridades competentes a autorizar al Ayuntamiento a retirar los árboles que en este momento se encuentran atascados en el puente sobre el río Saja en la carretera de Viaña y que están provocando un desplazamiento del cauce. “Si sube el río, se lleva las casas de los tres pueblos”, ha asegurado, reiterando la tesis de Revilla de que la falta de limpieza tiene efecto sobre las inundaciones.

El regidor asegura que ha intentado contactar con responsables de la Confederación Hidrográfica del Norte, pero sólo ha conseguido ser atendido por “un vigilante”, que le ha indicado que en este momento no puede acceder a la zona y que la empresa encargada de este tipo de labores, la pública Tragsa, no cuenta con medios para intervenir.   También se ha dirigido al delegado del Gobierno, Pablo Zuloaga, con quien le ha resultado “muy difícil” ponerse en contacto y cuando lo ha conseguido “no ha servido para nada”, porque “no ha aportado ninguna solución”. “Su respuesta ha sido que van a valorar los daños”, ha precisado.

Gómez ha asegurado sentirse “absolutamente impotente”, ya que ni siquiera ha logrado autorización para que el Ayuntamiento pueda intervenir “dentro de sus posibilidades, para paliar algunos de los problemas que sufren los cauces”.

En este sentido, ha explicado que en situaciones similares el anterior delegado del Gobierno facultaba al Consistorio para actuar y asumía la responsabilidad, una opción que en este momento “ni siquiera se baraja, a pesar de la gravedad de la situación y de los daños terribles que puede llegar a provocar”.

Acusaciones, en la misma línea que la ofensiva institucional desplegada por Revilla, que eran negadas tanto por el PSOE como por la Confederación Hidrográfica:

-Por un lado, el PSOE defendía que el propio alcalde regionalista de Cabuérniga sí había hablado con el delegado de Gobierno, negando que el municipio hubiera estado desatendido

-Y, sobre todo, la Confederación Hidrográfica del Cantábrico desmentía que hubiera negado a ningún ayuntamiento peticiones de limpieza de cauces de ríos que, apostillaba, se hacen siguiendo las directrices de la Consejería de Medio Rural (gestionada por el PRC). En el caso de Cabuérniga, detallaba varias intervenciones y negaba que el regidor hubiera intentado contactar con ellos.