El Grupo Socialista en el Ayuntamiento de Santander propone atajar las carencias de mobiliario urbano en la ciudad con un plan para la instalación de más sillas, bancos, bancos inclusivos y cubiertos, papeleras, así como fuentes de agua potable «porque son elementos que facilitan el día a día de miles de personas y activan la vida urbana».

En esta línea, los socialistas santanderinos han registrado una moción al Pleno de enero instando a la concejalía de Obras a elaborar un estudio, en el plazo de tres meses, de las necesidades que tienen los diferentes barrios de Santander para la instalación de estos elementos, y que en el estudio participen las asociaciones vecinales y el Consejo Municipal de Personas Mayores.

Según el portavoz municipal y candidato a la Alcaldía, Daniel Fernández, «la especial orografía de Santander, donde existen fuertes desniveles, implica que desde el ayuntamiento tengamos la obligación de hacer un especial esfuerzo para reducir los problemas de movilidad que se generan tanto para los peatones como para los vehículos».

Así, ha explicado que el Consistorio debe abrir un enlace en la web del Ayuntamiento para que los santanderinos puedan solicitar la instalación de sillas, o bancos, así como sugerir ubicaciones de fuentes en sus calles para que sean los técnicos municipales quienes estudien la viabilidad o no de estas demandas.

Para Fernández, de cara al peatón, «la necesidad» de salvar los accidentes geográficos y las conocidas cuestas de Santander, unido a una población que cada vez está más envejecida, «obliga a las administraciones a seguir avanzando en movilidad vertical. Las rampas y escaleras mecánicas facilitan el día a día de miles de vecinos y vecinas de la ciudad que han visto mejoradas las comunicaciones Norte-Sur y viceversa», ha puntualizado.

No obstante, a su juicio, «queda mucho por implementar para que Santander sea plenamente accesible e inclusiva».

Para ello, ha añadido «es fundamental» que a la hora de instalar mobiliario urbano se opte también por bancos que sean inclusivos, con espacios para introducir sillas de ruedas en el medio, «lo que facilitaría la integración de las personas con movilidad reducida que hasta ahora tenían que colocarse siempre en los laterales o enfrente».

«Hacer que Santander sea más habitable es potenciar también que la gente esté en la calle, que se encuentre en las plazas, en sus calles, que se reúna a charlar, y mejor si están sentados porque muchas veces son personas mayores, con alguna discapacidad motora o con movilidad reducida de manera puntual por algún tipo de lesión que necesitan estos bancos para descansar o apoyar sus compras», ha señalado.

En este sentido, el portavoz socialista ha asegurado que «una de las premisas en la instalación de estos bancos a lo largo y ancho de la ciudad es que se elijan preferentemente lugares estratégicos para la observación, el descanso, o la diversión en áreas deportivas».

Finalmente, Daniel Fernández apuesta por que en las nuevas remodelaciones que se hagan desde el Ayuntamiento de Santander, a la hora de determinar el mobiliario urbano que las complemente, «siempre se tenga en cuenta la instalación de bancos inclusivos y fuentes de agua potable que puedan estar también habilitadas para perros».