El Gobierno cántabro ha lanzado el anzuelo, y casi todo el mundo ha picado.

Dejando pasar unos días, y analizando nuevamente lo ocurrido, llego a la misma conclusión que llegué cuando avisamos de la trampa.

Me refiero al anuncio del decreto regulador del alquiler turístico y vacacional.

Es decir, del decreto regulador de una práctica especulativa pura y dura, que beneficia a unos pocos y perjudica a todos los demás.

Y para ello ha solicitado ayuda , en forma de alegaciones, para recabar ideas sobre cómo especular correctamente.

Ha sido un truco de manual. Y ha resultado.

Cuando después del verano, transcurrido ya un año de legislatura ,se publique el dichoso decreto, y se acepten algunas propuestas, no se podrá exigir responsabilidades.

Al fin y al cabo, han hecho y decretado aquello que se les propuso. Marcar normas sobre cómo especular adecuadamente.

¿De qué nos quejamos ?

Y mientras, y ahí está el truco, Cantabria sigue sin una ley de vivienda propia.

Una ley que proclame y reconozca el DERECHO SUBJETIVO de los cántabros a la vivienda.

Evita abordar el gravísimo problema de la vivienda, de forma global. Integral. Sin parches inconexos que desconciertan aún más, haciendo ver que se actúa cuando la realidad es que no se hace nada.

No promueve una ley de vivienda, ni tampoco aplica la estatal.

No señala zonas tensionadas por el elevado precio del alquiler, no realiza un mapa de vivienda vacía ( sólo en Santander el propio ayuntamiento dice que hay 2.500 ) , no pone tope al precio del alquiler y , en general, no afronta en profundidad y con seriedad el gravísimo problema de la vivienda.

El Gobierno de Cantabria no lo quiere solucionar. No va a hacerlo.

Está en su ADN dejar que las cosas sigan así.

No impulsará una ley de vivienda para Cantabria que reconozca el DERECHO SUBJETIVO a una vivienda en Cantabria.

Igual que está en su ADN no poner ningún remedio, ni tomar medidas para paliar las consecuencias del enorme número de desahucios.

El Gobierno de Cantabria se empeña en que los cántabros tengamos menos derechos que otros.

Y no hablo de prestaciones. Hablo de derechos.

Primero se consigue el derecho, y luego se disfruta de él, en mayor o menor medida , en función de las posibilidades.

Y mientras utiliza trucos para desviar la atención del meollo de la cuestión, el problema crece y crecerá, los precios suben y subirán, y sufriremos las consecuencias en forma de empobrecimiento y desahucios.

Pues bien. Ante esto no se debe conceder NI UNA SOLA LICENCIA PARA ESPECULAR CON EL ALQUILER TURÍSTICO DE VIVIENDAS , hasta que quede integrada la actividad existente dentro de una Ley de Vivienda para Cantabria.

Una Ley de Vivienda que deberá consagrar el DERECHO SUBJETIVO de los cántabros al disfrute de una vivienda.

Una Ley que acabe con la pandemia que supone la especulación, sin utilizar trucos para que colaboremos en su regulación.

La especulación, si se está en su contra , no se regula. Se combate.

De no ser así, gente , personas que llevan toda una vida en un barrio, se verán obligados por la subida de precios y el empobrecimiento que conlleva, a hacer las maletas e irse a otro sitio.

Uno que puedan permitirse.