
«La inteligencia artificial es como un martillo, es una herramienta, puede ser bien o mal utilizada»
Tres días, del 7 al 9 de julio, es lo que durará esta segunda edición del curso sobre IA, dentro de los Cursos de Verano de la Universidad de Cantabria. este se desarrollará en Camargo. Este jueves, 3 de julio, finalizará el plazo de matrícula. Toda la información de los Cursos de Verano se puede consultar en este enlace.
Diego García, profesor titular de la UC y codirector del curso, reconoce que todo avanza muy rápido. De hecho, plantear un curso de estas características hace que los contenidos cambien de un año para otro. Aclara, en una entrevista concedida a EL FARADIO, que este curso «está enfocado a la inteligencia artificial para acercarla al público en general». Sirve para personas que sean conocedoras de esta materia y para los que no lo son, pero no se trata de impartir «conocimientos técnicos profundos» sobre la materia.
Se trata de intentar dar diversos puntos de vista, implicaciones en la vida cotidiana y en el mundo laboral, con ejemplos prácticos de diversos sectores, desde el económico hasta el jurídico, pero siempre con una intención pedagógica. Y que eso genere un debate entre expertos y no expertos.
García admite que «esto va demasiado rápido incluso o por desgracia para los que nos dedicamos al mundo de la investigación en inteligencia artificial. Por poner de un ejemplo, hay veces que desde el punto de vista de un experto, una persona que se dedica al desarrollo y a la investigación en este campo, a veces es desesperante porque tú ahora te puedes dedicar utilizando la tecnología que acaba de salir a ver cuál es su potencialidad, aplicarla a distintos campos y es que no has acabado la investigación y el desarrollo y a la semana siguiente ya tienes otra diferente y ya tienes que volver a empezar otra vez». Su visión de experto apunta en la dirección de que esta velocidad de desarrollo supone una dificultad, para los propios expertos, pero también a la hora de regular el asunto.
La regulación, en opinión de este profesor, se queda obsoleta demasiado pronto. Indica que ya hay un primer reglamento a nivel europeo, pero es insuficiente. Además, porque las grandes empresas tecnológicas que más rápido van en cuanto al desarrollo de esta tecnología no son europeas, sino estadounidenses y chinas. Esto supone que se puede establecer un marco, pero después son esas grandes empresas las que deben de cumplirlo.
Sin embargo, con todo el debate político, social y ético que debe desarrollarse en este tema, lo que García tiene claro es que la IA es el futuro, guste más o menos. «La inteligencia artificial es como un martillo, es una herramienta, puede ser bien o mal utilizada», explica. Y no quiere decir que vaya destruir empleos, prefiere aplicar la visión de que hay trabajos que tendrán que ser repensados y que muchas personas trabajadoras tendrán que hacer un reciclaje durante su vida laboral, algo que precisa de un cambio de mentalidad de empleados y empleadores, porque habrá que dedicar un tiempo de la jornada laboral a esa formación específica.
Lo verdaderamente importante para este experto es que el empleo que se cree sea de calidad, y que «esta tecnología no acabe creando una mayor brecha entre ricos y pobres, entre gente que pueda acceder a ella y gente que no». Si los efectos de esta tecnología no desembocan en beneficios para la ciudadanía, habría que darle una vuelta.
Otro de los temas que tendrán cabida en el curso son los engaños que se pueden cometer con la IA. Por ejemplo, si hablamos de medios de comunicación, canales de información, redes sociales… Confundir intencionadamente a telespectadores, followers, lectores… O incluso, que alguien acusado formalmente por un tribunal esgrima como defensa que los audios que le incriminan no son ciertos, que pueden estar hechos por IA. García recuerda el caso de X, la red social antes conocida como Twitter, que tiene una IA llamada Grok, pero es una red social comandada por alguien que tenía intereses políticos muy claros, ligados al actual presidente de Estados Unidos. «Todo lo que estamos leyendo en esa plataforma ¿nos lo podemos creer a pies juntillas? ¿Está sesgado? Yo diría que sí, pero claro, parece que lo que te presenta es real».