FAMPA Cantabria denuncia la inacción institucional ante la apertura de una nueva casa de apuestas en Santander
La Federación de Asociaciones de Madres y Padres de Alumnado de Cantabria (FAMPA Cantabria) ha mostrado su indignación por el inicio de las obras de una nueva sala de apuestas en la calle Juan Carlos Calderón de Santander, en Peñacastillo, pese al rechazo expreso de familias y vecinos desde que se conocieron los trámites en 2024. La federación lamenta la falta de respuesta del Ayuntamiento y del Gobierno de Cantabria y denuncia que ambas instituciones están “mirando hacia otro lado” en la protección de la infancia y la juventud.
FAMPA recuerda que en septiembre de 2024 el Parlamento de Cantabria aprobó una proposición no de ley (PNL) que instaba al Ejecutivo autonómico a adoptar medidas en materia de prevención del juego. Entre ellas figuraban la elaboración de materiales educativos sobre los riesgos de las adicciones, el diseño de un plan estratégico con objetivos y plazos, campañas de información dirigidas a la población y la revisión extraordinaria de las distancias entre locales de apuestas. El texto fue aprobado el 17 de septiembre de 2024 y publicado en el Boletín Oficial del Parlamento el 19 de septiembre de ese mismo año.
Un año después, la federación asegura que no se ha constatado ningún avance en estas medidas. Por ello, ha registrado tres escritos solicitando información a la Consejería de Presidencia, la Consejería de Educación y el Ayuntamiento de Santander, con el objetivo de conocer qué pasos se han dado para cumplir la resolución parlamentaria.
En relación con la concentración de locales, FAMPA recuerda que la Ley 4/2022, de Regulación del Juego de Cantabria, permite revisar las distancias mínimas cuando un municipio de más de 150.000 habitantes supere la ratio de un local por cada 7.000 vecinos. Según la federación, Santander ya supera ese umbral, e incluso hay localidades de la comunidad con mayor densidad de establecimientos.
Las familias insisten en que la ubicación del nuevo local es “especialmente sensible” por situarse en un punto de paso frecuente de jóvenes de los barrios de Peñacastillo y Nueva Montaña. Subrayan además que el crecimiento del juego online no debe usarse como excusa para no actuar sobre la proliferación de casas de apuestas físicas.
En su comunicado, FAMPA Cantabria recalca que las administraciones cuentan con información de asociaciones que trabajan en prevención de adicciones, así como con datos de las autoridades sanitarias sobre la magnitud del problema. Según el último informe del Ministerio de Sanidad sobre adicciones comportamentales, publicado en 2023, el 6,7% de la población de 15 a 64 años ha jugado dinero online en el último año, y la prevalencia de juego con posibles problemas es del 0,9%. Entre adolescentes, la Estrategia Nacional sobre Adicciones ya advierte de la especial vulnerabilidad frente a las apuestas deportivas y el juego en línea.
La federación reitera que el cumplimiento de la legalidad y la protección de la infancia deben situarse en el centro de la acción política, más allá de los intereses económicos del sector del juego.
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