La PACANT abre una campaña de sensibilización por el Día Europeo con la Trata de seres humanos
Con motivo del Día Europeo contra la Trata de Seres Humanos, conmemorado el próximo 18 de octubre, y con el apoyo del Ayuntamiento de Santander, la Plataforma Abolicionista de Cantabria (PACANT) ha desarrollado una campaña de cartelería dirigida a recordar a los ciudadanos y, especialmente, a los varones, que la prostitución no es otra cosa que una forma de violencia extrema contra mujeres y niñas.
Lejos de representar la libertad de elección de las mujeres, un viejo oficio o una forma de empoderamiento, la prostitución supone la compraventa y explotación de los cuerpos de miles de mujeres y niñas a lo largo y ancho del planeta y, no en baja medida, en nuestro país y región.
Y esta atroz forma de violencia se sustenta en la continua demanda ejercida por los puteros, hombres que perpetúan esta lacra sin cuestionar sus implicaciones. Y es que, como ya ha manifestado la Plataforma en otras ocasiones, sin prostitución no habría trata de mujeres y niñas con fines de explotación sexual.
En palabras de Charo Quintana, una de las portavoces de la PACANT, «si de verdad queremos acabar con la trata, tenemos que dejar de mirar hacia otro lado y reconocer que sin demanda de prostitución no existiría este mercado de explotación.
Condenar la trata sin cuestionar la prostitución es incoherente». Así, siguiendo en la línea del mensaje lanzado el pasado 30 de julio, Día Mundial Contra la Trata de Personas, la Plataforma recalca que no puede acabarse con la trata de personas con fines de explotación sexual sin poner el foco en quienes la hacen rentable: los puteros.
Por todo ello, la campaña de cartelería desarrollada en esta ocasión contiene mensajes breves, concisos e imperativos, dirigidos a sensibilizar y remover las conciencias de los ciudadanos que no hayan reflexionado todavía, o no lo suficiente, sobre esta forma de violencia de género.
Y como no podía ser de otra manera, se enfatiza también por la Plataforma la necesidad de exigir a nuestros gobiernos la aprobación e implementación de una ley que proteja de forma eficaz a las mujeres penalizando la explotación y el ejercicio de violencia sexual contra las mujeres por parte de proxenetas y traficantes, pero también puteros.