«Nuestra misión también es hacer una labor divulgativa, educativa»
Del 2 al 17 de octubre se desarrolla la nueva campaña de ODECA, de nuevo unida al Racing de Santander, para promocionar los productos de Cantabria. Juan Luis Centeno, el director de la ODECA, explica que esta es «una nueva etapa para sumar fuerzas y mensajes. El Nuestro Norte, que es el eslogan del Racing reciente, pues se une a este Sabe a Norte de nuestros productos con un consejo de calidad», dice en una entrevista concedida a EL FARADIO.
Se trata de compartir valores a través de esta campaña, sintonizando las frecuencias de la Consejería de Desarrollo Rural, Ganadería, Pesca y Alimentación del Gobierno de Cantabria y del club deportivo más representativo de la Comunidad Autónoma. Esta campaña se extenderá también a los escolares de los diferentes colegios durante el segundo trimestre de este curso. Centeno pone en valor que «nuestra misión también es hacer una labor divulgativa, educativa», es decir, que a la población le suenen los productos, las maneras de producirlos y los sellos de calidad desde la infancia.
Sabe a Norte es directamente la marca que «certifica la calidad diferenciada que tienen los productos de Cantabria, que gira en torno a figuras como la Indicación Geográfica Protegida, la Denominación Geográfica Protegida, Producción Agraria Ecológica, la marca de Garantía de Calidad Controlada, etcétera. Digamos que todos esos sellos de calidad están bajo el paraguas de la nueva marca de Sabe a Norte», cuenta Centeno.
La idea es que los productores pongan un sello en sus etiquetas y luego los consumidores también identificarán esos productos de calidad de Cantabria en los lineales de los supermercados. Distintivos importantes en estos tiempo de tanta competencia en un mercado globalizado.
Centeno subraya la importancia del sector agroalimentario en la economía de Cantabria. «Representa el 22% de la riqueza generada en nuestra Comunidad Autónoma, con una cifra de negocio que supera los 1.700 millones de euros y más de 3.000 empresas, la inmensa mayoría son pequeñas y medianas que son de carácter familiar, con mucha experiencia y tradición», afirma.
En cuanto a la calidad de sus productos, Centeno destaca aquellos que, hasta ahora, han conseguido el sello de la denominación de origen protegida, que son los quesucos de Liébana, el queso picón, el Bejes-Tresviso, el queso de nata de Cantabria y la miel de Liébana. Por otro lado están las indicaciones geográficas protegidas, que son la carne de Cantabria, el sobao pasiego, el vino de la tierra de la costa de Cantabria y el vino de la tierra de Liébana.
ODECA trabaja en ampliar esta lista de productos de Cantabria de acuerdo con la normativa europea, como es el caso, por ejemplo, de la patata de Valderredible, que «actualmente está en tramitación a falta del visto bueno de la Comisión Europea, pero, vamos, está ahí a puntito ya de hacerse oficial», revela. Y también están intentando conseguir la indicación geográfica para la anchoa, «que sería también un trampolín muy importante para el sector».
Centeno ensalza la pasión con la que trabajan los profesionales del sector, «por mantener vivas nuestras tradiciones y su capacidad de adaptación a los nuevos tiempos y la apuesta por la innovación para seguir siendo competitivos». Por eso la ODECA aspira a estar detrás de los productores, para asesorarles, por ejemplo, en cuanto a la normativa europea, que considera «dinámica», pero también «un poco farragosa». Y también para ver cómo se consigue combatir la falta de relevo generacional, «que es lo que yo veo que es uno de los principales problemas a los que se enfrentan estas pequeñas empresas que se dedican a producir artesanalmente».