Esta semana llega un caso de violación a los tribunales de Cantabria
Según el escrito de acusación de la fiscalía, el procesado y la víctima se encontraban en la vivienda del primero acompañados de otros familiares tomando “abundantes bebidas alcohólicas”. La mujer que se había puesto el pijama un rato antes, se quedó dormida en el sofá.
A medianoche, el acusado, “aprovechándose de que su prima estaba totalmente embriagada por la gran cantidad de bebidas alcohólicas tomadas, la penetró vaginalmente, sin que ella pudiera reaccionar debido a su estado”.
A continuación, la mujer “sintió cómo volvía a ser penetrada, notando que el procesado le bajaba el pantalón y la braga, no pudiendo reaccionar ni moverse”.
Pasados unos momentos, continúa la fiscalía, “cuando pudo abrir los ojos, se dio cuenta de que se encontraba en la habitación de su primo”. Después, el acusado le introdujo por dedos en la vagina, sin que ella reaccionara.
A consecuencia de estos hechos, explica el escrito la mujer sufre sintomatología ansioso-depresiva y postraumática.
Para el ministerio público, el acusado es autor de un delito de agresión sexual y debe ser condenado a nueve años de prisión, diez años de libertad vigilada, quince años de inhabilitación para trabajo con menores y diez años de alejamiento y prohibición de comunicar con la víctima.
En concepto de responsabilidad civil, pide la fiscalía que el acusado indemnice a la mujer en 15.000 euros por los daños morales causados y las secuelas que padece.
Por su parte, la acusación particular que ejerce la mujer se suma a la petición de pena que solicita la fiscalía y eleva la petición de indemnización a 20.800 euros.