Danza y laúd para una tierra herida: Ihab y Tareq Abu Salameh llevarán la resistencia cultural palestina a Cabezón de la Sal
El Festival Solidario “Sumud y Cabezón por Gaza”, que se celebrará el 22 de noviembre en Cabezón de la Sal, contará con dos presencias palestinas que encarnan formas complementarias de resistencia a través del arte: Ihab, bailarín especializado en dabke, y Tareq Abu Salameh, músico que traerá al festival la espiritualidad del oud, el laúd árabe.
Dos artistas, dos lenguajes y un mismo propósito: afirmar vida, identidad y memoria en un momento especialmente doloroso para Palestina.
Cabezón acoge una segunda edición del Festival Solidario por Gaza el 22 de noviembre
Ihab: el dabke como afirmación de existencia
A las 16:00 h, en la Casa de Cultura, Ihab impartirá un taller de dabke, la danza colectiva más emblemática de Palestina.
El dabke —que se baila enlazando manos y golpeando el suelo con determinación— nació en las aldeas palestinas como gesto de unión frente a la adversidad y hoy es un símbolo de arraigo, identidad y resistencia cultural.
Formado en centros culturales de Ramala y con experiencia trabajando con comunidades de la diáspora en Europa, Ihab defiende que el dabke es “más que movimiento: es memoria en los pies”. Sus talleres combinan técnica, historia y un sentido profundo de pertenencia. Para él, aprender dabke es también aprender a sostener la identidad palestina con el propio cuerpo.
Por la tarde, a las 18:45 h, Ihab dirigirá en la carpa la danza palestina en colectivo, una de las actividades más participativas del festival. Ese baile grupal —circular, contundente, festivo— se ha convertido en un ritual de afirmación compartida. Será un momento en el que la comunidad local podrá unirse al latido cultural palestino a través del ritmo y la unidad del movimiento.
Tareq Abu Salameh: el laúd que guarda la memoria
A las 18:30 h, en la carpa, actuará Tareq Abu Salameh, músico y compositor palestino que sitúa al oud en el centro de un trabajo artístico que mezcla tradición, espiritualidad y emoción.
Nacido en Jerusalén y formado entre Ramala y Amán, Abu Salameh pertenece a una generación de músicos que han utilizado la música como refugio frente al trauma. Su repertorio combina melodías tradicionales palestinas, poesía árabe clásica y contemporánea e influencias sufíes, que conforman una mezcla de silencios y repeticiones que evocan la respiración de una tierra desgarrada.
Ha dicho en entrevistas que “el laúd es una manera de hablar cuando las palabras ya no alcanzan”, por lo que sus actuaciones se convierten en un viaje sonoro que conecta memoria y espiritualidad, y que encarna la dimensión más interior de la resistencia cultural palestina.
DE PUEBLO A PUEBLO: CABEZÓN CON GAZA
Esta edición surge tras el éxito del festival celebrado el año pasado por la propia plataforma, que reunió a centenares de personas y recaudó un total de 27.588 euros, evidenciando el fuerte compromiso social de la comarca con la causa palestina.
Para esta segunda ocasión, Sumud y Cabezón por Gaza han unido fuerzas para organizar una jornada ampliada que se celebrará en el Parque Conde San Diego y en la Casa de Cultura. El evento, abierto y gratuito, busca reivindicar la solidaridad internacional con el pueblo palestino, generar espacios de encuentro entre artistas de distintos territorios y contribuir así a mantener viva la atención pública sobre Palestina.
La programación incluye más de una veintena de actividades que combinan música, danza, circo, poesía y propuestas audiovisuales, con presencia de artistas locales y voces palestinas. Entre los momentos destacados figuran la intervención del periodista y productor gazatí Kayed Hammad, un pase visual del archivo fotográfico “The Palestine Museum”, talleres de dabke y rap, y actuaciones musicales de Tareq Abu Salameh, Los Castos, Mario de Celis, Bárcena L’Ábrigu, Mala Hierba, Cahórnega y A Dalli Folk, entre otros. El cierre estará a cargo de la DJ Sara Puaj.
Además, del 22 al 25 de noviembre podrá visitarse en la Casa de Cultura una exposición y venta de pósters de artistas gazatíes, pensada para apoyar directamente al sector cultural palestino. Toda la recaudación del festival, incluida la de esta exposición, se destinará íntegramente a la UNRWA y a las y los artistas de Palestina participantes.
Noticias relacionadas:
- “El rock nace como libertad, y la libertad es política”: crónica de dos jornadas de cultura militante
- Smolny acoge un foro sobre el Sáhara con jóvenes saharauis residentes en Cantabria
- Amnistía Internacional Cantabria convoca este jueves una nueva concentración en Santander contra los ataques en Gaza