ARCA, Ecologistas en Acción y la Federación DEAN denuncian que la política del Gobierno de Cantabria sobre el lobo ignora la normativa europea y pone en riesgo la supervivencia de la especie
Con motivo de la convocatoria de la Mesa del Lobo, ARCA, Ecologistas en Acción y la Federación DEAN (Defensa Animal Cantabria) denuncian que la política del Gobierno de Cantabria continúa centrada exclusivamente en la eliminación de ejemplares, desatendiendo las obligaciones legales destinadas a garantizar la coexistencia entre la especie y la ganadería extensiva.
Las organizaciones recuerdan que la legislación vigente exige la puesta en marcha de medidas preventivas, la publicación de un Catálogo de Buenas Prácticas —que Cantabria sigue sin elaborar— y el mantenimiento de un conocimiento científico actualizado para orientar la gestión hacia la conservación. Sin embargo, la administración cántabra continúa utilizando la información disponible únicamente para justificar la muerte de lobos.
La normativa europea es clara: no puede autorizarse la explotación cuando existe incertidumbre
La Directiva 92/43/CEE establece que los Estados Miembros deben realizar cada seis años una evaluación rigurosa del estado de conservación de las especies y de sus hábitats. El último informe sexenal disponible (2013–2018) clasifica al lobo en España como «Desfavorable-Inadecuado» en todas las regiones biogeográficas donde está presente.
El nuevo informe sexenal, que debía publicarse este verano, sigue pendiente después de que el Ministerio solicitara una prórroga a la Comisión Europea.
Por su parte, el Censo Nacional del Lobo indica que entre 2015 y 2025 la población apenas ha crecido un 1% anual, situándose actualmente en 333 manadas, muy lejos de las 500 que la comunidad científica considera necesarias para garantizar la viabilidad a largo plazo.
En julio, la comisaria europea de Medio Ambiente, Jessika Vilhelmsson, recordó que, según la jurisprudencia del Tribunal de Justicia de la Unión Europea, ningún Estado miembro puede autorizar la explotación de una especie de interés comunitario si existe incertidumbre sobre el mantenimiento de un estado de conservación favorable del animal.
El MITECO pidió a Cantabria revisar el Plan del Lobo
En septiembre, la Dirección General de Biodiversidad del MITECO instó a la Consejería de Medio Rural a revisar profundamente el borrador del Plan de Gestión del Lobo de Cantabria, incorporando datos científicos actualizados, información fiable sobre la mortalidad no natural y objetivos medibles que permitan una gestión compatible con la conservación de la especie, tal y como exige la legislación europea y estatal.
Una estimación inflada y sin base científica
La Consejería de Medio Rural insiste en que viven más de 200 lobos en Cantabria, cifra obtenida al multiplicar las 23 manadas detectadas por una supuesta media de 9 individuos, un cálculo sin respaldo técnico que pretende justificar la eliminación del 20% de la población: 41 lobos muertos en un solo año.
Sin embargo, la ciencia demuestra que los grupos familiares del lobo ibérico están compuestos, de media, por entre 3,4 y 4,2 individuos en invierno. Aplicando estos valores —reconocidos por la comunidad científica—, los 23 grupos presentes en Cantabria equivaldrían a aproximadamente 100 lobos, no 200.
Matar lobos en Cantabria supondría un daño irreversible
ARCA, Ecologistas en Acción y la Federación DEAN advierten de que, si se lleva a cabo la eliminación anunciada por el Gobierno, la mitad de la población de lobos de Cantabria podría desaparecer, lo que constituiría un daño ecológico irreversible para una especie ya catalogada en estado de conservación desfavorable.
Las organizaciones exigen al Gobierno de Cantabria que abandone su estrategia basada en la eliminación de ejemplares y adopte de inmediato una gestión responsable, preventiva y acorde a la normativa europea, centrada en la protección de la especie y en la reducción real de los conflictos en la ganadería extensiva.
«La Mesa del Lobo, no abordará ninguna cuestión relativa a la conservación del lobo. ¿Cuál es plan de la Consejería para garantizar el mejor estado de conservación de la población de lobo en Cantabria? ¿Cómo está afectando a la población y su viabilidad el haber matado más de 30 ejemplares, incluidos cachorros? ¿Se están dispersado los grupos familiares? ¿Cuál es la mortalidad total de la especie? ¿Qué investigaciones y por quién se están llevando a cabo para asegurar el futuro del lobo? ¿Qué medidas preventivas se están adoptando para prevenir ataques al ganado?», se preguntan las organizaciones.
Señalan que ·la Consejería no tiene respuesta a estas cuestiones simplemente porque no les interesa, porque el objetivo no es conservar el lobo, ni facilitar la coexistencia con la ganadería extensiva, el objetivo es dar satisfacción al loby de la caza, y a unas organizaciones agrarias que, en lugar de velar por el futuro de la actividad ganadera, han comprado los argumentos de la extrema derecha y van a conducir al sector primario a un callejón sin salida al futuro».
«No vamos a participar en una Mesa, que sólo pretende tapar el verdadero objetivo de este gobierno y que no es otro que ganar un puñado de votos, aunque lleve al lobo al borde la extinción», sentencian.