Zonas rurales de Cantabria como los Valles Pasiegos, Liébana, Soba, Campoo, Cabuérniga o parte de Saja-Nansa continúan sin cobertura móvil estable ni acceso a Internet de alta velocidad, una situación que lastra su desarrollo y acentúa la desigualdad digital. Así lo denuncia la Asociación La Columbeta en el marco del proyecto Acortando la brecha digital, impulsado por Colectivos de Acción Solidaria (CAS) y financiado por el Ministerio de Derechos Sociales y Agenda 2030.

El programa, en el que participan 11 entidades de todo el Estado, tiene como objetivo facilitar la accesibilidad digital, formativa y laboral de las mujeres rurales, promoviendo su empoderamiento y el acceso a empleo de calidad. Sin embargo, según datos del Gobierno de España, entre un 8% y un 10% de la población rural cántabra sigue sin acceso a banda ancha ultrarrápida.

En muchas localidades, la cobertura no alcanza siquiera el estándar 3G o señal telefónica básica, lo que compromete desde las comunicaciones de emergencia hasta el teletrabajo, la educación online, los servicios sanitarios o la competitividad económica del territorio.

La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) ha subrayado la lentitud en el despliegue de fibra óptica en las comarcas con orografías más complejas, lo que agrava el retraso en la conectividad efectiva. A pesar de los compromisos establecidos en planes como España Digital 2026 o el Plan UNICO Banda Ancha, los fondos europeos no han llegado con eficacia a estas zonas, vulnerando el principio recogido en la Ley General de Telecomunicaciones, que reconoce el acceso a Internet como un derecho básico.

En este sentido, desde La Columbeta y CAS insisten en que la conectividad no es un lujo, sino un derecho, y apelan a las administraciones a corregir esta desigualdad estructural.

Además de la labor de denuncia, el proyecto incluye la creación de herramientas digitales, formación online en competencias profesionales, y el mapeo de puntos de acceso gratuito a Internet. Se impartirán talleres y cursos online para fortalecer las capacidades digitales de las mujeres del entorno rural.

Tanto La Columbeta como CAS reafirman con esta iniciativa su compromiso con un modelo de desarrollo rural inclusivo y sostenible, en el que “nacer o vivir en un pueblo no limite derechos, oportunidades ni expectativas de futuro”.

La Columbeta es una organización con sede en Cantabria que trabaja desde hace décadas en la mejora de la calidad de vida de personas vulnerables, mediante proyectos educativos, sociales y de acompañamiento. Por su parte, CAS es una red estatal de organizaciones sociales con amplia experiencia en intervención rural y en la promoción de la igualdad de oportunidades.

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