Colectivos y espacios cántabros se movilizan para apoyar La Nuestra, el archivo digital de testimonios sobre violencia sexual impulsado por Cristina Fallarás
Mientras algunos no sólo niegan que las mujeres sufren una violencia específica por el hecho de serlo y por la búsqueda de controlarlas a través de sus cuerpos –peor aún, mientras intentan convertir esa ideología en una agenda institucional–, la realidad se empeña en desmentirles.
Sólo esta semana, apenas se han apagado los rescoldos del 25-N, tenemos dos juicios por agresiones sexuales, datos oficiales que nos indican dónde estamos o el reciente caso del chat de Castro Urdiales con hombres compartiendo fotos íntimas de mujeres.
La lucha de todas las mujeres resuena en Santander por el 25N
Y esto sin olvidar que el Ayuntamiento de Santander ha lanzado una campaña por el Día contra la Violencia de Género en la que apelaba al sufrimiento de las madres, mensaje que convive con el mantenimiento en su cargo de asesor del policía local nombrado como coordinador de Barrios ligado a la Concejalía de Barrios que ocupa Lorena Gutiérrez sin que haya asomado siquiera una critica pública por su parte a quien se presenta en redes como entusiasta del PP. Parece que en este caso la víctima no era madre.
Normal que ante esa acumulación de realidades las mujeres decidan organizarse y crear sus propios espacios seguros. Como ‘La Nuestra’, una nueva red social feminista y soberana impulsada por la periodista Cristina Fallarás, que funcionará como archivo digital de testimonios sobre violencia sexual.
«A los delitos los llamamos por su nombre, pero la violencia sexual no estaba relatada»
En el marco de esta campaña de apoyo se han colocado huchas solidarias en varios puntos de la ciudad, todos ellos espacios vinculados al activismo cultural y social en Santander. Así, las huchas están disponibles en el Centro Cultural Eureka (calle San Simón), la librería y espacio de cultura críticaLa Vorágine (Cisneros, 69), y en bares como el Rvbicón (calle del Sol), el Bolero (San Celedonio) o La Buhardilla (calle Liébana).
Esta recogida de fondos local se enmarca dentro de una campaña de crowdfunding más amplia, alojada en la plataforma Goteo.org, con el objetivo de financiar la primera fase del proyecto: migrar, clasificar y anonimizar miles de testimonios recopilados durante años por Cristina Fallarás, y poner en marcha la infraestructura técnica de la nueva red.
Además, este sábado 6 de diciembre, como cierre de la campaña, se celebrará un evento cultural en Eureka, que incluirá cuentacuentos con After Perdices, micrófono abierto y una sesión de cabaret en el que se mezclarán disciplinas como el mimo, el clown, la máscara o la improvisación.
La cita empezará a las 18.00 horas, con una entrada de 5 euros, y además de las actuaciones y la músic,a habrá un sorteo para la caja de resistencia feminista.
Qué es ‘La Nuestra’
La Nuestra es un proyecto de red social feminista y segura, concebida como un archivo vivo de testimonios sobre violencia sexual. El objetivo es ofrecer a las mujeres un espacio controlado por ellas mismas, donde se priorice la privacidad, el respeto y el acompañamiento, frente a los modelos actuales de redes comerciales.
Cristina Fallarás, su impulsora, es periodista, escritora y activista feminista. En 2018 promovió el movimiento #Cuéntalo, que reunió decenas de miles de testimonios en redes sociales, constituyendo uno de los archivos espontáneos más importantes sobre violencia machista en castellano.
Como red social testimonial, el espacio recoge y visibiliza los testimonios que ha acumulado Cristina Fallarás desde agosto de 2023, los clasifica a través de etiquetas y permite a las usuarias seguir aportando nuevos testimonios.
La plataforma permite, además, relacionarse con más personas para hacer grupos de soporte (siguiendo el concepto del «match» digital), es decir, permite construir redes de contacto, acompañamiento y apoyo mutuo con otras personas además de proporcionar información sobre herramientas y recursos públicos y privados a disposición de las mujeres.
La Nuestra será alojada en una web propia, sin depender de las grandes plataformas y redes mainstream ni tecnofaraones digitales. Se construye a través de un equipo multidisciplinar comunicativo, de expertas digitales, juristas, archiveras y activistas, que ha construido una herramienta que funcionará de archivo con capacidad de ser consultado y que podrá escalar con más contenido relacionado al tema central de la investigación.
El equipo impulsor está formado por Acción Comadres: María Botto, Cristina Fallarás, Cecilia Gessa, Marisa Kohan , Karmele Marchante , Zinnia Quirós, Piluca Baselga, Vicky Rosell, Andrea Aldana, Nerea Barjola, Carla Vall, María Naredo, María San Miguel, Teresa Meana, Maribel Medina, Irene Zugasti, Lourdes Lucía, Isabel Muntané, Marta García Carbonell, María Palau Galdón, Elena Ollero, Ana Amanda Sáinz, Abril Seguí y Esther López Barceló.
Del trabajo de Fallarás en su cuenta de Instagram surgieron las denuncias contra el fundador de Podemos, luego en Más Madrid, Íñigo Errejón; o contra los raperos Ayax y Prok, que están viviendo en las últimas semanas cancelaciones de sus conciertos tras denuncias masivas durante meses sobre su trato a distintas mujeres.
Delitos sexuales y violencia digital: contexto reciente en Cantabria
La campaña se desarrolla en un contexto marcado por el aumento de los delitos contra la libertad sexual en Cantabria. Según el Balance de Criminalidad del Ministerio del Interior conocido este mismo lunes, estos delitos han crecido un 11,3 % en los primeros nueve meses de 2025, con un incremento del 3 % en las agresiones sexuales con penetración y del 14,3 % en el resto de delitos sexuales.
Además, esta semana se están celebrando en la Audiencia Provincial de Cantabria dos juicios por agresiones sexuales.
-El lunes 1 de diciembre, comenzó en la Sección Tercera un juicio con jurado por un delito de allanamiento de morada en concurso con un delito de violación, tras la entrada de un hombre en una autocaravana donde dormía una pareja en Santander. El acusado está procesado por introducir la mano en el pijama de la mujer y tocarla vaginalmente mientras dormía. La fiscalía solicita cinco años y medio de prisión y diversas medidas de alejamiento, vigilancia e indemnización.
-El jueves 4 de diciembre, la Sección Primera acogerá una vista de conformidad por un caso en el que dos hombres están acusados de agredir sexualmente a dos menores de edad de catorce y quince años tras consumir MDMA. Se imputan tres delitos de agresión sexual con acceso carnal y uno sin acceso carnal, con penas acordadas de hasta cuatro años de prisión, inhabilitaciones para trabajar con menores y prohibiciones de acercamiento a las víctimas. Es decir, los acusados ya han admitido los hechos.
Por otra parte, en Castro Urdiales, se ha hecho público un caso de difusión de imágenes íntimas sin consentimiento, tras descubrirse un grupo de WhatsApp con más de 90 hombres que compartían fotografías privadas de sus parejas. La Concejalía de Igualdad del Ayuntamiento ha denunciado los hechos, que podrían constituir un delito previsto en el artículo 197.7 del Código Penal. Algunas afectadas han reconocido haber visto sus imágenes circulando incluso por redes sociales, lo que ha reavivado el debate sobre la violencia digital y la necesidad de herramientas de protección y denuncia adecuadas.
Arte feminista y memoria colectiva
Coincidiendo con el 25N (Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres), la Biblioteca Central de Cantabria acoge hasta el 12 de diciembre la exposición organizada por la Comisión 8 de Marzo de Cantabria, con trabajos de la asociación Mujeres Dos Rombos.
Bajo los títulos ‘Heridas’ e ‘In‑defensa propia’, las instalaciones visibilizan distintas formas de violencia machista desde una perspectiva artística y testimonial. La muestra se cerrará con una charla sobre arte y lucha feminista, en un contexto que refuerza la importancia del arte como vía de expresión y denuncia.
(Por cierto, en estos momentos hay otra campaña de recaudación activa, en este caso en clave de memoria democrática, lanzada por Héroes de la República para rehabilitar el monumento conmemorativo en Ciriego a las personas fusiladas por el franquismo)
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