Alberto Muñoz se balancea en ‘Territorio ingrávido’ en la Fundación Bruno Alonso
Desde este lunes, la sede de la Fundación Bruno Alonso, en la calle Isaac Peral, acoge hasta el próximo 9 de enero la exposición ‘Territorio ingrávido’, de Alberto Muñoz.
La muestra está compuesta por una selección de aguadassobre papel hecho a mano, realizadas durante un retiro personal en la localidad de Bristol (Inglaterra).
Licenciado en Bellas Artes por la UPV, Alberto Muñoz (Torrelavega,1954), ha estado vinculado durante décadas al mundo artístico como profesor, pintor y autor de collages, fotografías, relatos y video poemas.

Inauguracion de la exposición (Foto: Carlos Atienza)
El creador cántabro afirma que ha realizado las pinturas «seducido por el suave balanceo de los barcos en los canales de la ciudad de Bristol” y motivado por como “una soledad buscada y mecida por el fluir de las aguas ha contribuido a generar cierta atmósfera evanescente que no he pretendido representar sino evocar».
Este trabajo supone un desarrollo respecto a su anterior exposición que llevaba por título: “Almas soñadas”. En ella ya estaba presente la conexión con el mundo onírico y espiritual, el vuelo, la levitación y el alma. Si en esa ocasión la técnica pictórica fue la acuarela; ahora, los colores han desaparecido, dejando al negro en solitario y su disolución en el agua sobre el blanco del papel.
En palabras de Alberto Muñoz:
«Una gota de tinta vertida sobre un charco acuoso es un fenómeno visual majestuoso. En la expansión y dilución incontrolada del pigmento aparece un universo en trance de pintarse por sí sólo. En esos momentos de contemplación y comunión con la magia y belleza creada por el azar, de atención plena y enajenación del mundo exterior, nace en mí el impulso de intervenir. La mente, liberada de otras anclas, se predispone a ayudar al fenómeno con leves intervenciones para modelar las formas que, desde la irrealidad del “otro lado”, piden a gritos revelarse, aparecer y significar. Así se configuran unos pocos elementos que aluden a la pureza del paisaje. Montañas, nubes, árboles conviven con presencias animales y humanas flotantes, ingrávidas en un territorio de ensoñación que permite una recreación o, mejor, un reencuentro con una autenticidad primigenia, con el paraíso perdido que en realidad siempre estuvo ahí. Y sugiero habitar».
Trayectoria

(Foto: Carlos Atienza)
Además de su participación en numerosas obras colectivas y eventos poéticos, Alberto Muñoz es autor de siete libros de poesía experimental y narrativa: Pastor a la intemperie. Cantárida (Poesía visual). 2013. Dislocaduras. Coeditado por Zoográfico y L.U.P.I. (Poesía visual). 2017. Presagio de un relámpago. Libros del aire. (Poesía). 2019. Hilos de tiempo. Libros Indie. (Relatos). 2020. El valor de la mentira. Amazon. (Novela). 2021. Quienes sueñan de día. Libros del aire. (Novela). 2024. Balbucientes. Pliegos de la visión. Babilonia. (Poesía visual), 2024.
Sus últimas comparecencias en salas de exposiciones tuvieron lugar en Madrid en el 2015 (Balbucientes. Sala El dinosaurio todavía estaba allí.), Bilbao en el 2015 (Sala Kubrick), Madrid en el 2016 (Sala El Calvario) Santander en el 2017 (Hápax. Fundación Bruno Alonso) y Torrelavega en el 2020 (Fuera de quicio en el CNFoto)
Fundación Bruno Alonso
La entidad toma su nombre de Bruno Alonso González (1890-1979), sindicalista, periodista y político nacido en Santander. Fue uno de los principales representantes del socialismo cántabro, diputado por el PSOE y director general de la Marina Mercante durante la Segunda República. Exiliado tras la Guerra Civil, vivió en México y posteriormente en Francia, donde siguió vinculado al republicanismo en el exilio. Su vida estuvo marcada por el compromiso con la justicia social, la libertad de expresión y la lucha antifranquista.
La labor de la Fundación Bruno Alonso también incluye la conservación de documentos históricos, la organización de conferencias, exposiciones y ciclos de cine, y la cesión de su espacio como punto de encuentro para colectivos sociales y culturales de Cantabria.