Hasta 3.000 cántabros, según los convocantes, han ‘abrazado’ este sábado a Valdecilla, el hospital del que temen que acabe privatizado dentro de los planes del Gobierno de Cantabria, que justo el día antes proponía que sea Ferrovial la empresa constructora que se haga cargo de la finalización de las obras a cambio de prestar los servicios no sanitarios (limpieza, seguridad, etc…).

Los convocantes, la Plataforma por lo Público y sin Recortes, denunciaban que ese contrato «esconde una clara voluntad» de convertir Valdecilla en un «negocio», aunque «realmente la beneficiaria» sera la empresa privada.

Además, el manifiesto asegura que los resultados del megacontrato serán «sin duda desastrosos» para las arcas publicas.

Una manifestación que ya ha tenido respuesta desde el Partido Popular: el portavoz del Grupo Parlamentario, Eduardo Van den Eynde, replicaba a los participantes en el acto de la mañana que «el mejor abrazo que se puede dar a Valdecilla es dejar de torpedear el proyecto», negando que lo sucedido en la protesta se correspondiera con una preocupación real de los ciudadanos, y advirtiendo: es «muy probable» que, de seguir así, «empiece a existir indignación ciudadana contra los que están tratando de manipular la realidad del hospital». El PP cargaba contra la oposición por tratar de «confundir» con el proceso, e insistía: lo que el Gobierno esta consiguiendo es, al contrario, «blindar» el carácter público del centro.

Previamente, los manifestantes recordaban el origen del Hospital Valdecilla, que sitúan en 1918, cuando un grupo de ciudadanos se asociaron para crear un nuevo centro que sustituyera al antiguo de San Rafael (hoy el Parlamento de Cantabria), y que gracias a la financiación del Marqués de Valdecilla pudo inaugurarse en el año 1929.

A la figura de Ramón Pelayo han apelado algunos de los participantes en la protesta, aseverando que si el marqués «levantara la cabeza, otros tendrían que agacharla».

Desde sus orígenes, Valdecilla ha transitado por diferentes fases, pasando de patronato, a depender de la diputacion provincial, la seguridad social y el sistema nacional de salud, pero siempre con una «buena calidad asistencial» que ha sido «una constante», han reivindicado.

En conclusión, los convocantes se dirigían al presidente Ignacio Diego con «firmeza» para recordar que  van a seguir defendiendo que Valdecilla siga siendo un hospital público., porque «cualquiera, sea cual sea su capacidad económica tiene derecho a ser atendido» en un centro donde «las personas y su salud sean lo importante y no los balances económicos»

LAS OBRAS, EN LA PRECAMPAÑA DE 2015

La protesta intenta frenar los planes del Gobierno del Partido Popular, que ha programado cortar la cinta del final de las obras del Hospital Universitario Marqués de Valdecilla en marzo de 2015, dos meses antes de las elecciones, al límite de la fecha en que quedarán prohibidas las inauguraciones por la Ley Electoral, antes de las elecciones autonómicas.

Es una de las novedades del megacontrato de Valdecilla que va para adelante. La Mesa Especial de Diálogo Competitivo formulaba ste viernes la propuesta de adjudicación provisional a la UTE Ferrovial-SIEC de la concesión de obra pública para la finalización del hospital y la gestión de más de 40 servicios no asistenciales por un importe de 918.680.400 millones de euros IVA incluido – 258 millones más que el pliego provisional inicial, con el que dio comienzo el proceso de diálogo competivo-.

Sin embargo, la oferta cumple de forma “escrupulosa” el pliego definitivo, con una baja del 0,1%, 760.000 euros por debajo del pliego definitivo, y una rebaja de dos meses (un total de 16) en el plazo de ejecución de las obras, que permitirá inaugurar, de cumplirse los plazos, antes de las elecciones municipales y autonómicas de 2015.

Ya sólo queda el último pase para que el proceso de adjudicación sea definitivo. Se ha requerido a Ferrovial-SIEC para que presenta la documentación acreditativa en los próximos 10 días, un trámite tras el cual la Gerencia del Hospital Universitario dictará la resolución definitiva del megacontrato. Después habrá 15 días para posibles recursos.

El megacontrato de Valdecilla ya aparece en los presupuestos generales de la comunidad autónoma para el año 2014, con una primera partida para la concesión de obra pública (PFI) de 43,5 millones de euros – el coste de la finalización de las obras está estimado en casi 100 millones de euros-.

Así que, en la práctica, el Gobierno de Cantabria asume el primer año de colaboración público privada (CPP) casi la mitad del coste de las obras.

Mientras, los 28 millones que aportará el Estado en 2014 para las obras forman parte del presupuesto de ingresos como transferencia de capital con destino a inversión.