“Lo preocupante son los casos de violencia de género que no llegan a los juzgados”
Joaquim Bosch e Ignacio Escolar
En el juzgado en el que trabaja, Joaquim Bosch se ha encontrado muchas denuncias falsas…por robos de móvil (diez casos en el último mes) o para cobrar el seguro, pero muy pocos por violencia de género: seis o siete casos en los 17 años que lleva en la carrera judicial.
“Los propios perjudicados, que tienen sus abogados, hubieran denunciado si hubieran sido detenidos de forma injusta”, argumentaba en conversación con EL FARADIO DE LA MAÑANA en ARCO fm (103.2 FM).
Bosch estará esta misma tarde en Cantabria para presentar su libro ‘El secuestro de la Justicia’, escrito junto al periodista Ignacio Escolar, director de eldiario.es. La presentación será a las 19.30 horas en la librería Estvdio, en la calle Burgos.
“No existe un problema de denuncias falsas”, afirma categórico, para aportar a continuación otro dato: el 75% de las víctimas mortales de violencia de género no habían denunciado, “y el asesinato no sería el primer acto que sufrirían” porque “muchas mujeres aguantan y no denuncian”. “Lo que es preocupante es el elevado de número de casos de violencia contra las mujeres que no llega a los juzgados”, advierte.
LA “ANOMALÍA” DEL CONTROL POLÍTICO DE LA JUSTICIA EN ESPAÑA
El libro que presenta el que fue portavoz de la asociación Jueces para la Democracia y que ha escrito junto a Ignacio Escolar aborda los “intentos” de “control” por parte del poder político de la Justicia, algo que, recalca, es una “anomalía” en Europa, que ya viene haciendo reproches porque este esquema “no se adapta al sistema mixto de equilibrios institucionales que hay en Europa”.
Joaquim Bosch
En nuestro entorno, señala, ya se están haciendo “reproches” por las “disfunciones” que esta visión de la Justicia como una “tarta” que se “reparte” el poder político a través de cuotas de partidos genera entre los ciudadanos y que se aparta del modelo europeo, que es mixto y en el que hay órganos de dirección judicial elegidos por el Parlamento y por los propios jueces.
A esto suma la existencia de otras vías de acceso a la carrera judicial por “influencia política” en lugar de por mérito o capacidad.
Joaquim Bosch pone como ejemplos de estas “disfunciones” los Whatsapps que trascendieron de Ignacio Cosidó, portavoz del PP en el Senado, presumiendo de haber podido conseguir el nombramiento del presidente del Consejo General del Poder Judicial y el Supremo; o la deliberación en el Tribunal Supremo sobre quién debía pagar el impuesto de actos jurídicos documentados sobre las hipotecas, con un cambio de criterio a favor de la banca en el que se “dio la impresión” de que se estaba respondiendo a “criterios que no eran los del país”.
“No es ningún secreto que determinados intereses muy elevados, en muchas ocasiones, están muy conectados”, afirma el juez.
Pero a la vez, ha reivindicado el “esfuerzo enorme” de muchos jueces en la lucha contra la corrupción o en la defensa de los intereses de los consumidores frente a los abusos financieros. En este campo, el financiero, se producen “tensiones enormes” entre jueces, con criterios de jueces “de base” a favor del usuario que chocan con los de instancias superiores, como, detalla, sucede con las cláusulas suelo.
EUROPA CUESTIONARÁ LA ACTITUD DE ESPAÑA ANTE LAS LIBERTADES
Mirando de nuevo a Europa, Bosch ha pronosticado que el Tribunal Europeo de Derechos Humanos dirá en breve “cosas negativas” sobre la legislación española en materia de libertades, ya que la legislación más reciente en esta materia “no se ajusta al Convenio Europeo de Derechos Humanos.
Tal y como ha explicado, esta legislación forma parte de un contexto de crisis económica y protestas ciudadanas, que generaron como respuesta un conjunto de leyes que parte de una “aplicación restrictiva de las libertades”.
En algunos casos, incluso restrictivas de libertades como la de expresión cuando este es un derecho que tiene que ser “reforzado”.
Finalmente, se ha referido a la derivada judicial del proceso independentista catalán, en el que cree que ha habido un “apasionamiento enorme” que se pregunta si ha podido afectar también a decisiones judiciales. A su vez, esto le hace temer que este tipo de decisiones puedan ser cuestionadas en Europa. En cualquier caso, confía en que los juicios pendientes sean el “momento adecuado” para “acabar con este apasionamiento” y poder analizar “sin visiones apocalípticas” de lo que se trata, si se han producido delitos.
Fernando Díaz
Tema Denuncias Falsas.
Está claro que por más que se insista en desmontar ese mito falso de las Denuncias Falsas es inútil, y lo es porque no hay voluntad, no hay peor ciego que el que no quiere ver. Y siendo juez tiene doble delito (valga la expresión).
Lo mismo se puede decir de desviar la atención hacia las supuestas denuncias que NO se presentan, ¿qué tendrá que ver una cosa con la otra?
No es ético querer confundir al personal dando por real esa ridícula cifra de los decimales (cada vez es distinta al ser improvisada), sabiendo que corresponde ÚNICAMENTE a las sentencias de causas iniciadas por ´denuncia falsa´. Argumentando además que si alguien se siente afectado por una denuncia falsa lo denunciará …. ésto viniendo de un profesional del gremio es sencillamente infumable y hasta ofensivo. Como si fuera tan sencillo, y más con está Ley diseñada únicamente en una dirección contra la otra, defenderse con una denuncia por denuncia falsa.
Hay un cálculo que hasta un niño puede entender y refleja lo que estamos hablando:
En España circulan cada día 20 millones de vehículos. Produciéndose 2.000 multas diarias por exceso de velocidad. Es decir: el 0.0001 % de los conductores españoles lo hacen por encima del límite de velocidad.
Por tanto, sólo ese porcentaje supera el límite de velocidad cada día en todas las ciudades, carreteras y autopistas españolas.
El problema de la manipulación de las Denuncias Falsas va más allá de una discusión por un número. Primero, refleja la manipulación que está detrás de este movimiento, Segundo, supone un empeño absurdo para que esta Ley sea aún más dañina para la mitad de la población (masculina hetero), el uso torticero de la denuncia falsa emponzoña no solo su aplicación, sino también la convivencia en cantidad de situaciones familiares. Tercero, demuestra el carácter IDEOLÓGICO del neofeminismo hembrista actual; al negarse a entenderse con el mundo real y obstinarse en vivir en una burbuja propia, donde reinan los dogmas y los axiomas autosuficientes. Es como intentar razonar con un creyente religioso, tarea inútil.
Fernando Díaz
Una de las ventajas de no tener deudas ideológicas es la independencia de criterio, partiendo lógicamente de un sentido crítico mínimo.
En relación al tema tratado hoy, lunes, en la Tertulia de El Faradio sobre la situación circense de Podemos. Como es un tema como varias aristas que quedaré en una concreta, en aquella de si una candidata denuncia o no (haciendo honor a su apellido) alegre o frívolamente.
Y más en concreto, hablamos de una denuncia por Violencia de “género” dentro de un escenario de intereses políticos.
Lo siento, pero como decía el clásico: “soy amigo de Platón, pero más amigo de la verdad”. Hemos escuchado con todo lujo de detalles desde la dirección de El Faradio la explicación de cómo la interfecta Lidia Alegría lleva meses especulando con la posibilidad de denunciar o no por violencia de “género” con una total irresponsabilidad, es decir, siendo consciente de no tener caso, de ser una acusación hueca, ficticia, artificial y manipuladora para obtener beneficios ajenos a la causa. Es decir, lo que dice el manual que es una DENUNCIA FALSA.
El problema es que por las deudas mencionadas al principio el periodista parece incapaz de reconocer que lo que ha hecho es describir con todo lujo de detalles tal Denuncia Falsa: cómo desde una acusación (mujer) + abogado con los escrúpulos adecuados, se cuecen este tipo de situaciones lamentables.
Cómo se va a negar que existen Denuncias Falsas en gran volumen y con uso torticero, si la autocensura y la hipoteca ideológica te lo impide, como en este caso. Y cómo se va a resolver el problema (grave) que es si no se reconoce.
Sirva por lo menos este comentario para señalar desde la independencia cómo funcionan las cosas realmente y para llamar esas cosas por su nombre:
Las propias feministas cocinando lo que niegan cada día. Una muestra más de que la realidad supera la ficción.
Pd.-Al final, yo que no fui niño/espectador de La Bola de Cristal, voy a ser el que siga sus enseñanzas a la hora de ser un ciudadano crítico. Echándolo de menos en sus teóricos discípulos …