A ver. Nosotros somos muy de respetar al que más sabe de su tema y hacerle caso. Y en materia de divorcios, Yvana Trump dijo: “No os quedéis con las ganas… ¡Quedaos con todo”.

No os quedéis con las ganas

Esa frase es la base, un principio, un lugar desde el que zarpar, del espectáculo que Edu del Olmo representa esta semana en el nuevo espacio escénico Sala de Tres, en la calle Tantín, en sesión doble jueves y viernes a las 20.30 horas.

Edu del Olmo es actor, comediante y “gatopardo”.

Su compañía La Gran Maraña ha recibido el Premio a la Mejor Dramaturgia Original 2007 de SGAE y FCNC con la pieza “Vigilio y Lánguis, la Tragedia de la Chica que se Duerme”, con gira internacional.

Y ha desarrollado dos proyectos de cooperación cultural para la coordinación y difusión de las artes escénicas en Iberoamérica en colaboración con la AECID (México, 2009- Cuba, 2010).

Y aunque ha trabajado con figuras de la escena como Gerardo Vera, Albert Boadella y Natalia Menéndez, y es posible que os suene de haberle visto en series como ‘La que se avecina’, ‘Anclados’, ‘Los hombres de Paco’ y ‘Lalola’, ahora mismo se encuentra en una fase un poco experimental, explorando sobre el stand up comedy.

Por eso, el montaje no es un monólogo de café o madrugada televisiva al uso, sino una búsqueda de las posibilidades escénicas que abre este formato.

Por eso, como él mismo dice, el resultado es un show “Demasiado Punk para ser Exquisito. Demasiado Exquisito para ser Canalla. Demasiado Canalla para tanto Cachivache. Demasiado Cachivache para ser sólo un Monólogo. Demasiado monólogo para incluir dos cortometrajes. Demasiadas variedades para no resultar Frívolo. Demasiado Frívolo para ser Punk”. En definitiva, es demasiado.