Santoñismo es una manera de ser y de actuar en esta vida. Con la alegría de un pueblo con alma de Cádiz, pero en el norte. Así que, para empezar, gente exageradamente divertida.

Imagen de Santoñismo en el último carnaval 2016

Así es como una pandilla de amigos ha empezado a tejer red social en Internet y llama la atención de empresas e instituciones como plataforma para promocionar eso, su santoñismo.

En definitiva, un grupo constituido en asociación, donde aplican lo que siempre se ha recetado como factor de éxito y rara vez o nunca se ha visto en la administración o la gran empresa privada: un grupo con carácter – alerta, sobresdrújula- multidisciplinar (que cada uno sabe de una cosa y lo aplican en beneficio del grupo).

Santoñismo es un proyecto en redes sociales, que ha logrado más de 60.000 impactos en poca horas con una sola publicación. Es una página de Facebook, un perfil de Twitter y otro de Instagram, para celebrar los días de verano en invierno y comentar la última santa granizada.

Un foro de participación, un sitio donde dar los buenos días con otro amanecer espectacular en La Bahía – hay competición de amaneceres y puestas de sol-.

O con la foto de la mochila de un peregrino del Camino del Norte, de escala en la Playa de Berria. O toda una panorámica desde la cruz del monte Buciero. O cualquier paseo por El Pasaje.

Santoñismo para emocionarse, sin cortarse ni media, con Santoña.

Un lugar para recordar la historia y sentirse orgulloso de un pasado común. De los mapas de Juan de la Cosa, de la crítica al caciquismo de Macías Picavea y de… bueno Carrero Blanco también era de Santoña. Y sí, la Falange Española saca concejales.

Mural en un edifico de Santoña || Foto: santoñismo

Santoñismo, donde los santoñistas comparten fotos, vídeos e información del día a día. Del carnaval del norte, de las fiestas patronales. Del paseo en barco pesquero a la Virgen del Puerto. Santoñismo es mar, puerto, lonja y pescado.

Está permitido (incluso aconsejado) vacilar, compartir memes y darles contexto santoñista; comentar noticias de actualidad y presumir de tener las mejores anchoas del mundo, que lo han dicho en programas de televisión internacionales.

Y compartir un blanco antes de comer, mucho y bien.

Santoñismo empieza a ser una marca, una marca que funciona desde la sencillez: si esto es Santoña, nuestro orgullo de pueblo en esta fase de la vida se llama santoñismo.

Ah, y se puede hacer santoñismo sin ser de Santoña. Porque los que eligen vivir aquí, son tan santoñistas como los de aquí. Y si no, escuchad a Juan Lasquety, madrileño de nacimiento y santoñés adoptivo, uno de los impulsores de Santoñismo.

Y así lo cuenta en una entrevista en BUENAS TARDES CANTABRIA.