Bomberos del Gobierno trabajan en Cieza || Foto: 112 Cantabria

La situación de los ríos de Cantabria mejora con el paso de las horas y, pasado sin mayores incidentes el momento más delicado de las 20 horas, coincidiendo con la pleamar, la evolución en las diferentes cuencas es favorable y se está rebajando en nivel de alerta por riesgo de desbordamientos.

A esta hora de la tarde, está descendiendo el caudal del Besaya, a su paso por el puente de Torres, y del Pas, a la altura de Carandía y de Puente Viesgo, que durante todo el día se han mantenido en un nivel de alerta roja. Se espera que a lo largo de la noche pasen a un nivel de prealerta naranja, en el que se encuentra en este momento el Miera, en la zona de Puente Agüero. La situación del resto de ríos está estabilizada.

El Gobierno de Cantabria había activado el nivel 1 del PLATERCANT, el Plan Territorial de Emergencias, por riesgos derivados de las intensas lluvias de los últimos días y la nieve en el interior, que ponen en riesgo de desbordamiento varios ríos, entre ellos el Pas o el Besaya. El mal tiempo ha generado también problemas en las carreteras nacionales y autonómicas, afectadas por argayos e inundaciones.

A las lluvias de los últimos días hay que sumar los más de 80 milímetros que han caído, sólo en lo que llevamos de domingo, en las estaciones de Villacarriedo o Los Tojos. Esto es más de lo registrado en toda la jornada del sábado, con Soba como el punto que más precipitación registró (87,7 mm.) según la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET).

El consejero de Presidencia, Rafael de la Sierra, que ha visitado este domingo varias zonas en riesgo, confía en que el nivel de riesgo decrezca si se cumple la previsión meteorológica, que apunta a una bajada del volumen de precipitaciones.

El Centro de Atención a Emergencias 112 del Gobierno de Cantabria ha recibido este domingo 280 llamadas relacionadas con los fenómenos meteorológicos adversos que azotan Cantabria. Estos avisos han derivado en la coordinación de 109 incidencias.

EVACUADOS DOS ANCIANOS EN PIÉLAGOS

Los sucesos más destacables han sido la evacuación de dos personas de avanzada edad en Carandía por inundación de su vivienda, y la asistencia  a dos vehículos atrapados por el agua en Hoznayo y Barros, este último prácticamente cubierto de agua y volcado sobre un lateral. Su conductor ha resultado ileso.

Además, un argayo ha provocado el corte del ferrocarril en el tramo que une Gibaja con Marrón, y otro desprendimiento de gran tamaño mantiene cortado dos carriles de la A8 entre los puntos kilométricos 205 y 203, dirección Bilbao. El tráfico está desviado en este punto por la N-634.

Además, el agua ha dejado daños en diferentes puntos de la geografía con varias viviendas, garajes y locales inundados, con especial incidencia en Los Corrales de Buelna y Corvera de Toranzo; y carreteras anegadas, como la CA-274 a su paso por Polientes con un carril habilitado, la CA-652 Hoznayo-Riaño, la CA-424 Hoznayo-Villaverde de Pontones, y la CA-233 a la altura de Quijano, estas tres últimas cortadas al tráfico.

ALERTA POR NIEVE Y LLUVIA

Efectivos de Emergencias intentan rescatar un vehículo atrapado por las lluvias || Foto: 112 Cantabria

En estos momentos continúa la alerta naranja por nevadas en el centro, Valle de Villaverde y Liébana, y el aviso amarillo por lluvias en el centro, Valle de Villaverde y el litoral.

Se encuentran cerrados al tráfico los puertos de Lunada, La Matanela y Palombera. Cinco vías más de la red autonómica requieren el uso de cadenas: el alto del Caracol, Alto Campoo, Piedrasluengas, Espinama-Fuente Dé y Puentenansa-Piedrasluengas (información permanentemente actualizada en www.carreterasdecantabria.es).

Por acumulaciones de agua, han tenido que ser cerrados los viales Polientes-Carrales, Hoznayo-Riaño y Hoznayo-Villaverde de Pontones, y se han producido desprendimientos en diferentes puntos de la región, como el acontecido en el kilómetro 105 de la A-8, entre Pámanes y Liérganes, que ha obligado a cortar un carril, o en la vía de tren entre Gibaja y Ramales.

En la tarde del sábado fueron varios los vehículos que se quedaron atrapados en Palombera, Brañavieja y la Matanela. Preocupaba especialmente la situación en el primero de los puertos, ya que se desconocía si podía haber gente aislada junto a sus vehículos. Hasta la zona se movilizó al Grupo de Rescate Especial de Intervención en Montaña de la Guardia Civil (GREIM) y una fresadora de la Dirección General de Obras Públicas que pudieron constatar que los turismos estaban vacios.

La abundante lluvia caída en las últimas horas provocó el desbordamiento de los ríos Aguanaz a su paso por Entrambasaguas, Campiazo en San Mamés de Meruelo, y Verdero en Sopeña.

El agua ha provocado daños en infraestructuras, fundamentalmente en la cuenca del Besaya, con una vivienda y dos garajes inundados en Los Corrales de Buelna, y un tercer estacionamiento afectado en Torrelavaga.

Asimismo, la red viaria se ha visto afectada con un árbol caído en la CA-150 a su paso por Pondra (Ramales de la Victoria), un tramo de la CA-424 inundado a la altura de Hoz de Anero, desprendimiento de piedras en la CA-261 a su paso por el municipio de Arredondo, y varios argayos registrados en carreteras de Puentenansa y Lamasón.