Tatiana Yáñez-Barnuevo (Ganemos) y Antonio Mantecón (Santander Sí Puede), en el Pleno de este viernes || Imagen: streaming Ayto. Santander

El concejal de Santander Sí Puede, Antonio Mantecón, que como consecuencia de la expulsión de Ganemos ha pasado a ser concejal no adscrito, ha denunciado un «contubernio» entre la concejal que quedará como portavoz de Ganemos (número 2 de su lista en las elecciones), Tatiana Yáñez-Barnuevo; el propietario de esa marca política, Julià de Fabiá y el Partido Popular.

Mantecón ha insistido en la actuación en «connivencia» de estos «tres elementos» para fraguar «el mayor ataque y conculcación de los más elementales derechos y principios democráticos en 39 años del Ayuntamiento» y contra el «derecho legitimo a la representación de una parte de la ciudadanía santanderina».

Así lo ha puesto de manifiesto en un bronco Pleno Extraordinario que se ha celebrado este viernes para dar cuenta de estos cambios, que dejan a Yáñez-Barnuevo como única concejal y portavoz de Ganemos (formalmente Ganemos Santander Sí Puede), con todos los recursos del Grupo Municipal aunque el Reglamento establece que para su creación debe tener al menos dos ediles.

Y a Antonio Mantecón sin despacho ni auxiliares, como concejal no adscrito, figura desarrollada a partir del Pacto Antitransfuguismo. Esto le ha servido al alcalde, Iñigo de la Serna, para reafirmarse en sus declaraciones a los medios («Si Mantecón se aferra al sillón será un tránsfuga»).

«Ser tránsfuga es una condición, no un delito», ha matizado sus declaraciones en la prensa, pero ha insistido en que «es objetivo» que «si permanece en el cargo» será considerado «tránsfuga», al tiempo que ha apelado a la «responsabilidad» del resto de partidos para cumplir las «obligaciones» del Pacto Antitransfuguismo «íntegramente» y con «firmeza».

A este respecto, se da la circunstancia de que a Mantecón le expulsa Ganemos, la marca, partido en el que ni siquiera milita. Por el contrario, cuenta con el apoyo del partido, Santander Sí Puede, del que se ha desvinculado progresivamente la otra concejala, Tatiana Yáñez-Barnuevo.

UN «CONTUBERNIO A TRES BANDAS»

En su intervención, tras la cual ha abandonado el Salón de Plenos para no ser «protagonista involuntario» del «esperpento», Mantecón ha explicado lo que, a su juicio, ha sido un «contubernio» a «tres bandas» en su expulsión de Ganemos.

En primer lugar, se ha referido a Tatiana Yáñez Barnuevo, una «representante del pueblo, para la cual el principio ético de priorizar las demandas y necesidades de miles de esperanzados votantes a través del reforzamiento de un proyecto nacido para propiciar el cambio político y social en esta ciudad tiene menos peso que el principio menos honorable pero más poderoso de satisfacer sus propias ambiciones».

A continuación, al propietario de la marca Ganemos, Julià de Fabián, un «estafador» y un «chantajista» que, «asistido» por Yáñez-Barnuevo, ha «persistido en la coacción a nuestro proyecto buscando la manera de desastibilizarlo para sacar un beneficio económico ilegítimo, que de haber sido satisfecho nos hubiera colocado en una situación de fraude e ilegalidad»

Además, ha asegurado que De Fabián está dejando un «reguero de candidaturas destruidas por todo el Estado a partir de acuerdos y contactos con el PP y «partidos de otro pelaje» para «lucrarse con los recursos económicos de las diferentes agrupaciones municipales de la marca Ganemos». «La lista es tan larga como las demandas que se agolpan en los tribunales», ha añadido.

Y le ha enviado un mensaje: «Tenemos puestos en él todos los sentidos y nuestros recursos», por lo que le ha augurado «un prometedor futuro en lugares muy adecuados para gente como él como -las cárceles- Alcalá Meco o Puerto del Real, donde podrá compartir experiencias con ilustres miembros corruptos del PP».

Finalmente, se ha referido a la actuación del equipo de Gobierno del PP, que ha «actuado en connivencia» con las otras dos partes, con un «papel fundamental de este despropósito y atropello», por su «celeridad obscena», que es en su opinión «esclarecedora de su voluntad al respecto».

Una voluntad que, a su juicio, ha sido la de «eliminar a su oposición más combativa, de la forma más sucia posible».

«Para usted ser adversario político no es alguien a quien se venza o convenza con argumentos; sino que es alguien a quien se le lamina sin ningún tipo de consideración», le ha espetado al alcalde.

De la Serna, que ha advertido al resto de formaciones políticas sobre la condición de «tránsfuga» que, a su juicio, adquiere Mantecón como concejal no adscrito, ha polemizado con el portavoz del PSOE, Pedro Casares, a quien ha acusado de no repudiar la «violencia verbal» de la que fue víctima la concejala de Ganemos, en la Junta de Portavoces. Casares ha pedido un turno por alusiones para aseverar que ningún concejal del grupo socialista ampara esos comportamientos.

Desde el público, el exauxiliar de Mantecón – cesado esta semana por Alcaldía tras una petición de Yáñez-Barnuevo-, Roberto Mazorra, ha acusado a De la Serna de mentir.

Según Mazorra, no irrumpió en la Junta de Portavoces, sino que le espetó a Yáñez-Barnuevo que es una vergüenza desde la puerta de la sala. Previamente, Mazorra matizaba a De la Serna que se dirigió al alcalde en funciones, Cesar Díaz, para pedirle explicaciones por la presencia de Yáñez-Barnuevo como portavoz, sin que el Pleno hubiera dado cuenta de la modificación.

El alcalde le ha apercibido de su expulsión del Pleno.

LA NUEVA COMPOSICIÓN DE LAS COMISIONES DE PLENO

También se ha aprobado la nueva composición de las comisiones de Pleno. Empezó la legislatura con cinco concejales, pasó a nueve y ahora serán 15: siete del PP, dos del PSOE y PRC y uno de Ciudadanos, Ganemos, Grupo Mixto (IU) y Antonio Mantecón.

Frente a las críticas de la oposición, que ven maniobras para asegurarse la mayoría en las comisiones, en una legislatura en la que el PP no cuenta con la mayoría absoluta, pero sí con el apoyo constante de Ciudadanos, el portavoz del equipo de Gobierno ha defendido la «proporcionalidad» del reparto, una cuestión de «matemáticas».

La medida ha salido adelante con los votos del PP (11, por la ausencia dos ediles populares), Ciudadanos (2) y Ganemos (Tatiana Yáñez-Barnuevo).

Quedará para otro Pleno el debate de la reducción de las dietas, que se verán incrementadas. El concejal de IU, Miguel Saro, ha adelantado que «si lo que realmente se quiere que no haya más coste, la reducción será proporcional a los miembros del equipo de Gobierno y de la oposición», mientras que «si lo que se quiere es laminar con métodos antidemocráticos la labor de la oposición ese coste será soportado sólo por la oposición».

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