Este jueves 26 de enero, el colegio celebra una ‘miniedición’ de ‘Corre por Siria’, la carrera solidaria con este pueblo castigado por la guerra y el sufrimiento en las fronteras, de donde proceden los refugiados que están sufriendo la crisis humanitaria en los campamentos sobre suelo europeo y el incumplimiento por España de sus propios compromisos de acogida.

En el colegio Ángeles Custodios estaban acostumbrados a celebrar el Día de la Paz, pero este año han decidido vestirlo de la solidaridad de la sociedad civil con el pueblo sirio.

La ayuda recaudada en otra carrera, en Siria

Así, el conjunto de la comunidad educativa celebrará, el próximo jueves 26 de enero, en el Parque de Las Llamas, una carrera solidaria, y leerán un manifiesto por Siria escrito por el propio alumnado.

Después, miembros de la Asociación de Apoyo al Pueblo Sirio y de Pasaje Seguro Cantabria se encontrarán con la comunidad educativa en el salón de actos del colegio.

El acto es la culminación del proyecto “Yo creo (en) un mundo mejor”, como una experiencia de Aprendizaje Servicio en la que ha sido protagonista toda la comunidad educativa -alumnado, familias y profesorado-, desarrollando actitudes solidarias, actitudes de rechazo a la guerra y coordinando la colaboración con la población civil afectada por ella.

PROYECTO EDUCATIVO

Se trata de una manera de enseñar y de aprender a través de un servicio que se presta a la comunidad. “La idea básica es aprender a ser competentes siendo útiles a los demás, mediante una herramienta que es doble, educativa y social”, explica Paulino Pumarejo, profesor encargado del proyecto.

Para este docente, “la escuela es un instrumento de cambio, de mejora social. En estos momentos, la escuela no puede volver la espalda ante el horror de la guerra y el drama de los refugiados; debe actuar y, al menos, comunicar su desacuerdo con los conflictos armados e intentar llevar un poco de ilusión a las personas que sufren por la guerra”.

Mediante metodologías activas y participativas en las que el alumnado es el protagonista activo y autónomo de los procesos de aprendizaje, este año se han embarcado en este proyecto interdisciplinar con el pueblo sirio como protagonista.

Tras semanas de actividades relacionadas con el tema que han ido despertando el interés y la empatía del alumnado, la del jueves es la actividad en la que convergen los esfuerzos.

La ayuda se canalizará a través de tres de proyectos de la Asociación de Apoyo al Pueblo Sirio: la Mochila Solidaria (en los días previos a la carrera, ya se ha aportado en tono a 150 mochilas con material), el Proyecto Esperanza, de recogida y donación de material escolar para los niños y niñas sirias de los campos de refugiados, y el envío de ayuda humanitaria a Siria vía donación económica.

DE LA SOCIEDAD CIVIL PARA LA SOCIEDAD CIVIL

Para Pasaje Seguro, que colabora con este y otros proyectos, y que en su propia edición de “Santander corre por Siria” superó las 400 inscripciones, recaudando 9.940 euros, “actos como este muestra esa constante que es el compromiso ciudadano, en todos los ámbitos, con la situación de los refugiados… Confiamos en que este tipo de actos sirvan para remover la conciencia de quienes tienen los medios para cumplir con los compromisos de nuestro Estado en materia de refugio… Ya sólo faltan unos 16.000 por venir”.

‘Corre por Siria’, de la que Santander fue la primera edición que se celebró fuera de Madrid, se concibe como, ante la inacción de las instituciones una iniciativa de la sociedad civil para la sociedad civil: organizan asociaciones, colectivos y otros entes para recaudar dinero que se destina directamente a la sociedad civil en el país de origen.

En el caso de la carrera en Santander, dentro del compromiso de la organización por la transparencia, los gastos se pueden consultar en su Web y la asociación informó de la llegada de la ayuda a meta

Esteban Beltrán, responsable de Amnistía Internacional en España. valoraba esta semana desde Cantabria la iniciativa ‘Santander corre por Siria’, destacando que «funcionó como estaba previsto» y «la ayuda ha llegado a los desplazados internos en Siria», ha destacado.

Y añadía que «es importante que la gente de forma lúdica participe en estas carreras», que tuvieron una primera edición en 2016 en Madrid y Santander y que se van a celebrar de nuevo en 2017, no sólo en estas ciudades, sino que también en otros lugares de España.