El secretario general de los socialistas santanderinos, Pedro Casares, se siente con la responsabilidad de liderar un proyecto alternativo al del Partido Popular, según ha declarado en una entrevista para Pasa Página, la revista de alumnos de 3º de Periodismo en la Universidad Europea del Atlántico.

En ella ha destacado que ya no es tiempo de mayorías absolutas, y por ello, defiende que el futuro de Santander debe pasar por el acuerdo entre distintas fuerzas políticas, es decir, ‘’se abre un tiempo para convencer y no solamente de vencer’’, en palabras del líder del PSOE. Y recuerda que su partido ha llegado a acuerdos con las distintas formaciones a lo largo de la legislatura porque, según dice, comparten la idea de la necesidad de cambio en la ciudad ya que ven claro que «es la hora del cambio».

Pedro Casares durante una entrevista.

Además, Casares también se ha referido al polémico MetroTUS, que ha calificado como ‘’un mal proyecto para la ciudad y que además está mal gestionado’’ al carecer de una visión de «conjunto».

En este sentido, lamenta que se están haciendo políticas ‘a parches’ con obras como la obra del aparcamiento de Mendicouague, que está vacío y presumiblemente habrá que rescatarlo con dinero público.

Pero para solucionar el problema de aparcamiento que se origina en Santander, el líder de la oposición cree que la solución está en los aparcamientos disuasorios: ‘’si Santander quiere ser una ciudad en la que se pasee, una ciudad sostenible, una ciudad europea y del Siglo XXI, debe evitar que los coches vengan al centro de la ciudad, y eso se evita mediante la construcción de aparcamientos disuasorios’’.

Así, Casares cree que se deben construir aparcamientos disuasorios en las afueras de la ciudad que incentiven a que los coches no lleguen hasta el centro y después que haya un transporte público lanzadera que permite acercarse hasta el centro cada muy poco tiempo para que se pueda llegar al centro muy rápidamente.

En la entrevista, el líder socialista también se refiere a la gestión del exalcalde Íñigo de la Serna como ministro de Fomento, cuya labor fiscaliza también desde la Ejecutiva Federal del PSOE como responsable de Transportes: «Íñigo de la Serna está demostrando al frente del Ministerio de Fomento lo que realmente es y lo que piensa. Es una de los personas del Partido Popular y de ese Gobierno más liberal y más conservador, es decir, más a la derecha de lo que es el propio Gobierno y lo demuestra con sus actos», entre los que cita los rescates a las autopistas o las privatizaciones de servicios públicos.

Casares no es el único político santanderino que se ha referido a la necesidad de acuerdo entre las fuerzas políticas: durante el debate sobre el Estado de la ciudad, Antonio Mantecón de Santander Sí Puede apeló a la «colaboración de todas las fuerzas de la oposición para trabajar conjuntamente en un proyecto político alternativo que acabe con cuarenta años de gobierno de un partido que amenaza con arrastrar a esta ciudad al desastre».