La ONG ha elaborado un plan en Cantabria con diferentes medidas con el objetivo de conseguir que la población que queda más desamparada por la propagación del virus y las difíciles consecuencias que conlleva.

Una primera idea destaca y es mantenerse pendientes de todas las personas que están incluidas en sus programas. A unas 4.000 les hacen de un seguimiento telefónico. También hacen repartos de alimentos y kits de productos de primera necesidad o medicamentos a quienes tiene identificados como más vulnerables, que son otras 1.000 personas, aproximadamente. Y ponen todos sus recursos a disposición de las autoridades, por si pudieran necesitarles.

Otro de los ámbitos en los que mostrar su compromiso social es realizando campañas de comunicación y sensibilización ante el problema, y anunciando que hay un curso gratuito sobre el COVID-19 que está desarrollando Cruz Roja.

En total, Cruz Roja pretende dar respuesta, en unos dos meses, a unas 10.000 personas que se encuentren en una situación delicada. Quieren contar con más de 300 voluntarios que puedan atender distintas peticiones en los nueve lugares presenciales que tiene la organización en nuestra comunidad, situados en Santander, Torrelavega, Castro Urdiales, Laredo, Reinosa, Santoña, Potes, Ramales de la Victoria y Vargas.

Las funciones que desempeña Cruz Roja Cantabria en este momento de emergencia sanitaria y previsible crisis económica se reparte en varias áreas para tratar de abarcar lo máximo posible.

Por un lado está el área de Socorro, que conlleva una acción directa contra las situaciones más acuciantes. Desde apoyar al 112 hasta poder dar alojamiento a 12 personas sin hogar, pasando por aportar 10 ambulancias o movilizar albergues con capacidad de hasta 200 personas.

El área de Inclusión Social está más pensada en hacer compañía. Ahora que muchas personas están en confinamiento obligatorios, hay muchas personas que están aisladas y se sienten muy solas, de ahí la atención telefónica que se quiere hacer, y 500 personas también recibirán una atención psicológica.

También está el área de Empleo, especialmente sensible a partir de ahora, por todas las personas que se pueden ver afectadas en su vida laboral. Para ello Cruz Roja quiere reforzar su servicio multicanal y asesorar a 500 personas, incluso ofreciéndoles orientación laboral mientras estén confinadas en sus casas.

El área de Educación también aumenta su importancia, dado que los centros educativos están cerrados y eso genera necesidades, no sólo para niños, sino para otras personas que estén en algún proceso formativo. Además del curso sobre el COVID-19, Cruz Roja ofrece apoyo a niñas y niños de manera virtual, y también formación a personas que quieran convertirse en voluntarias de la ONG.

Por último está el área de Medio Ambiente. Aunque ahora no sea un tema del que se hable mucho, Cruz Roja cree que es buen momento para formar y sensibilizar sobre esta materia, en temas como la gestión de residuos, la compra responsable o el uso del agua y la electricidad.

Su página web https://www.cruzroja.es/principal/web/cantabria, donde se puede encontrar el número de teléfono de todos sus locales y el correo electrónico Cantabria@cruzroja.es son las mejores opciones para contactar con ellos, ya sea para pedir algún de tipo de ayuda, para sumarse a su voluntariado o para contribuir con alguna donación.