El Banco Obrero de Alimentos encuentra nuevo local en Santander

El Centro Social Matilde Zapata se convierte en la nueva sede de esta asociación, que trata de ayudar a familias en situación de vulnerabilidad. Aún necesitan un tiempo de trabajo en el local antes de celebrar su inauguración
Tiempo de lectura: 2 min

Vivimos tiempos difíciles. En marzo nos azotó una pandemia y la economía ha sufrido un encogimiento que aumenta la tensión y la preocupación, y también la incertidumbre, por no tener claro cuánta profundidad tiene el agujero en el que estamos, y cuánto tiempo se tardará en salir de él.

Por eso son tiempos en los que la solidaridad y el apoyo mutuo se hacen más importantes. Las administraciones públicas usan esa frase ya tan escuchada de que nadie se quede atrás. Pero el concurso de la sociedad civil siempre se hace imprescindible para que un objetivo de esa magnitud se alcance en muchos casos.

El Banco Obrero de Alimentos es una organización sin ánimo de lucro que trata de hacer llegar alimentos a familias de clase trabajadora que atraviesan por dificultades. Y su esfuerzo se ha visto incrementado en los últimos meses, precisamente porque muchas familias se han quedado sin red y tienen que hacer equilibrismo para conseguir poner platos de comida sobre la mesa.

Las dificultades también llegaron hasta la propia asociación. El pasado mes de agosto anunciaron que se quedaban sin local para seguir desarrollando su valiosa actividad, y que se ponían en búsqueda urgente para encontrar otro lo antes posible.

Ahora, el Banco Obrero de Alimentos anuncia que la búsqueda ha terminado. El Centro Social Matilde Zapata de Santander (la capital de Cantabria es su principal foco de acción) se convierte en la nueva casa. Está en la calle Francisco de Quevedo, muy cerca del Instituto Santa Clara.

En un mensaje lanzado en sus redes sociales, afirman que ya están trabajando en esa nueva ubicación, aunque el local aún necesita de algunos arreglos para estar a pleno rendimiento y para poder ayudar más eficazmente a los vecinos.

También pretenden hacer una inauguración. Pero sin prisa. «Cuando la situación de la COVID-19 sea más favorable», dicen. Y garantizan que cumplirán todas las medidas de seguridad para que sea un lugar seguro y así poder centrarse en los más importante, que es servir de apoyo a esa sociedad civil que demanda ayuda, en unos casos, pero que también la presta, en otros.

De hecho, el mensaje se cierra con unas palabras de agradecimiento a quienes han seguido haciendo donaciones y aportaciones mensuales a la organización. «Gracias a ellas podemos permitirnos abrir el centro social y cubrir otros gastos», concluyen.

  • Este espacio es para opinar sobre las noticias y artículos de El Faradio, para comentar, enriquecer y aportar claves para su análisis.
  • No es un espacio para el insulto y la confrontación.
  • El espacio y el tiempo de nuestros lectores son limitados. Respetáis a todos si tratáis de ser concisos y directos.
  • No es el lugar desde donde difundir publicidad ni noticias. Si tienes una historia o rumor que quieras que contrastemos, contacta con el autor de las informaciones por Twitter o envíanos un correo a info@emmedios.com, y nosotros lo verificaremos para poder publicarlo.