Cantabria ha ganado hoy en visibilidad dentro del Congreso de los Diputados. Ya nos hemos podido acostumbrar a escuchar a José María Mazón, una vez que el PRC decidió presentarse a las elecciones generales y conseguir un diputado en Madrid, que forma parte del Grupo Mixto y tiene la oportunidad de participar en numerosos debates. Y también Pedro Casares, por parte del PSOE, tiene protagonismo por ser el portavoz de Economía del Grupo Parlamentario.

Pero hoy se va más allá. Y es que Diego Movellán ha sido el elegido para sustituir a Teodoro García-Egea, que este martes dimitió como secretario general del PP, para ser el diputado de los populares que formule pregunta a Yolanda Díaz, vicepresidenta segunda del Gobierno y ministra de Trabajo y Economía Social.

Cada miércoles de sesión de control al Gobierno se producía ese cruce dialéctico, que ya se había convertido en un clásico de la legislatura, con el diputado murciano preguntando y criticando a la ministra por la situación del mercado laboral, las numerosas personas que siguen en paro o la necesidad de reforzar a diversos colectivos que sufren por la crisis desatada por la pandemia. Y Díaz acostumbraba a decirle aquello de «le voy a dar un dato».

Cambio de interlocutor, pero la vicepresidenta sigue defendiendo esa manera de contestar a quien le pregunta. Movellán le ha formulado una pregunta dirigida a la defensa de los trabajadores autónomos, en un momento en que existe preocupación por lo que deben pagar de cuota mensual, en un momento complicado por las restricciones que hemos estado atravesando durante los dos últimos años.

El diputado popular le ha pedido a Díaz que escuche las reclamaciones de los autónomos, aportando el dato de «16.000 han cerrado su negocio en enero, y seis de cada 10 facturan un 50% menos que antes de la pandemia», añadiendo la preocupación por la manera en que podrán devolver los créditos ICO.

La vicepresidenta del Gobierno no ha olvidado el desagradable episodio de hace casi un año. En una comisión parlamentaria, Movellán le dijo a Díaz que, en Unidas Podemos, «las mujeres, para subir en el escalafón, tienen que agarrarse bien fuerte a una coleta».

Hoy la ministra le ha respondido a Movellán que ella pretende escuchar «a autónomos y autónomas, se lo digo por aquel resbalón que tuvo conmigo y la dificultad que tiene para entender la igualdad entre los hombres y las mujeres».

En su turno de réplica, Movellán ha ido más al grano de la pregunta (lo habitual en este tipo de sesiones), y le ha espetado a la vicepresidenta que «todo lo que tiene que ofrecer su Gobierno a las autónomas es un sablazo para que paguen más los que menos cobran».

El diputado cántabro también ha querido señalar que la subida en el número total de autónomos se debe a las personas de más de 55 años. «Sólo pueden apuntarse al RETA o pasarse los lunes al sol», decía. También acusaba a Díaz y al Gobierno en su conjunto de convertir en su enemigo «todo aquel que invierte, arriesga y se esfuerza», para concluir recordando que, en España, defender a los autónomos es preocuparse por cuatro millones de puestos de trabajo.

En la contestación final de Yolanda Díaz es cuando ha vuelto a aparecer su frase habitual, para remarcar que los autónomos son más de 3,3 millones, pero sólo 2.030.000 son personas físicas, y de ellas, «poco más de 400.000 tienen alguna persona contratada», mientras que «casi un millón forman parte de fórmulas societarias».

Después de decir que el Gobierno se centra en apoyar a los autónomos que se encuentran en una situación más débil, Díaz ha defendido que, durante la pandemia, 1.500.000 de autónomos han recibido una prestación por cese de actividad y que la inversión pública ha sido de 11.600.000 millones de euros. «No va a encontrar nada semejante en la historia democrática de España», afirmaba.

A partir de ahora es probable que se convierta en habitual ver estos debates, salvo que los cambios que se avecinan en el PP tras la crisis abierta entre Pablo Casado e Isabel Díaz Ayuso determinen algún otro cambio de cara a la dinámica habitual de las sesiones de control al Ejecutivo.