Alumnos del IES María Telo diseñan una app para que las mujeres en situación de acoso puedan pedir ayuda
Un grupo de alumnos de 3º y 4º de ESO del IES María Telo de Los Corrales de Buelna ha diseñado una aplicación móvil para ayudar a las mujeres y niñas en riesgo de sufrir cualquier tipo de violencia.
La iniciativa se enmarca dentro de la primera edición del Campeonato Regional de Informática, conocido con el nombre BITUCA, que ha contado con una numerosa participación de los centros educativos de primaria y secundaria de Cantabria. Con el trasfondo tecnológico asociado a la informática, la iniciativa animó a alumnos de distintos centros a construir construido robots, diseñar videojuegos, resolver retos de Minecraft y ejercicios de programación en diversos entornos con diferentes niveles.
En este último apartado se incluye el trabajo realizado por los alumnos del IES María Telo, un centro que destaca por su línea en favor de la igualdad de género. (Hace 5 años que se cambió el nombre para que representara a una de las mujeres que más hizo en el siglo XX por la defensa de los derechos de la mujer, la democracia y la igualdad).
Así el grupo de alumnos que participó en esta inciativa, reconoce que antes de emprender esta aventura, «apenas sabíamos programar por bloques en Scratch y con Arduinoblocks cuando nos hemos metido en esta aventura, y ahora nos sentimos satisfechos de todo lo que hemos avanzado, entendemos mucho mejor algunos razonamientos o algoritmos que el año pasado usábamos casi como autómatas. Y, sobre todo,
nos ha impresionado ser capaces de crear esta aplicación para el móvil con App-Inventor, de la que estamos muy orgullosos».
Su proyecto no fue finalmente el ganador, pero destacó por su importante fondo social y su objetivo de ayudar a las mujeres víctimas de violencia.
La app diseñada dispone de una pantalla inicial central que, en función de las necesidades del usuario, derivará a las distintas pantallas.
Permite introducir los números de teléfono de emergencia de cada usuario e incluye un botón de llamada al 112, situado en el centro de la pantalla, que el usuario puede presionar cuando se encuentra en situación de peligro.
Además, existe otro botón que permite grabar el audio desde el momento en que se presiona. Eso facilita que la mujer pueda grabar agresiones, amenazas o cualquier conversación que el usuario considere que atenta sobre su persona (mientras esta operación se realiza, la pantalla del dispositivo mantendrá su imagen de fondo con el fin de no llamar la atención).
También hay otro botón de consulta donde se puede recabar información sobre distintos aspectos: Qué es la violencia y cómo detectarla: para ello este botón deriva a distintas páginas web del Gobierno de Cantabria donde se informa sobre violencia. Aleatoriamente la app selecciona una web de la lista incluida.
Qué hacer y dónde acudir: botón que deriva a las ubicaciones(direcciones y teléfonos) en un plano de las instituciones especializadas: Sede principal de Igualdad y Mujer, Centro de violencia de Género y Centros LGTBI de Cantabria.
Los estudiantes incluyeron también un botón de GPS que, al pulsarlo, envía tres mensajes pidiendo ayuda a los incluidos en la propia aplicación; otro Botón Anjana, que llama al 016 de ayuda a la mujer maltratada; y, también, botón agenda, que permite al usuario escribir un diario de situaciones, sentimientos… con acceso controlado mediante contraseña
TRABAJO PREVIO
Antes de desarrollar la aplicación, el equipo realizó un estudio previo, poniéndose en contacto con la Comisión de Igualdad del Instituto valorando todas y cada una de las aportaciones al proyecto que allí se dieron.
También contactaron con la Subdivisión de Igualdad y Violencia de Género de Cantabria y realizaron un pequeño estudio de las apps existentes: “Alertcops”, “EscApp” y “AgresiónOff” en Galicia, “App Bortxa” en Vizcaya, “Por mí”, detectando que no hay ninguna específica para Cantabria, que cuando te descargas la app tienes que registrarte y que tienen un logo demasiado obvio para ser detectado por terceras personas.
Así es como llegaron a la conclusión de que era necesario proteger la privacidad de los usuarios, mantener la discrección a la hora de utilizar las herramientas de la app, diseñar una aplicación de uso sencillo. y facilitar información existente en Cantabria sobre violencia contra las mujeres.