El pasado día 22 de Diciembre el Presidente del Comité de empresa, Gerardo Grande, convocó de urgencia al Comité, entre otras cosas, por la pérdida de derechos del nuevo Convenio, la negación de la empresa a dar la documentación relativa a la negociación colectiva y la continua vulneración de derechos que sufren no sólo la plantilla sino también los representantes de los trabajadores.

A todo esto, se le suma que la falta de contratación está derivando en una evidente sobrecarga de trabajo y una plantilla enferma, que da como resultado un alto nivel de absentismo, además de una constante sangría de despidos de los trabajadores veteranos que la empresa intenta conseguir a coste cero.

Por otra parte, nos encontramos también con la paralización del Comité de Seguridad y Salud Laboral para poder activar las medidas preventivas y una nula conciliación familiar, donde la empresa ciñe la concreción horaria a las necesidades del sistema organizativo y no a las de los menores o familiares, negándose igualmente a dar la documentación a los trabajadores, para poder hacer con los horarios lo que la empresa quiera.

Una prueba de los actos que está llevando a cabo la mercantil son los dos expedientes sancionadores que tiene abiertos, uno en materia de registro de jornada y otro por salud laboral (evaluación de riesgos psicosociales).

Para la plantilla, la gota que ha colmado el vaso ha sido la firma del nuevo Convenio, que contiene tanto pérdida de derechos como de poder adquisitivo, firmado por las grandes Organizaciones y que empeora considerablemente las condiciones laborales, ya que si el Convenio actual venía sujeto a la subida real del IPC, dentro del nuevo acuerdo se contempla que sólo se garantiza un 2,5%, de ahí al 6%, que sería el tope de subida, han dejado la puerta abierta a lo que la empresa considere como beneficios, todo esto sin ningún tipo de parámetros según las informaciones de los propios sindicatos firmantes, siendo lo más sangrante, que Mercadona es una empresa líder en su sector y con millones de euros en beneficios, motivo por lo que no se entiende que UGT y CCOO no hayan marcado como mínimo unos parámetros y hayan consentido este atropello y pérdida de poder adquisitivo.

Por todo esto, podemos decir que la primera responsable de esta convocatoria de huelga es la propia mercantil, ya que en función de los derechos de información que tiene el Comité se le solicitaron las actas y el acuerdo del Convenio, a lo cual la empresa se negó a facilitar, como se viene negando también desde hace más de un año, a dar solución a los problemas que le plantea la parte social.

Las políticas beligerantes y dictatoriales son el día a día de Mercadona en Cantabria y esta es la gran verdad que viven la plantilla y sus representantes, hasta el punto de que Recursos Humanos se niega a coger el teléfono al mismo Presidente del Comité y es más, cuando se les manda documentación de los afiliados de algunos Sindicatos rehúsan a realizar su trabajo poniéndolo incluso por escrito.

Por todo lo anterior, los sindicatos MAYSA y AITB procederán a hacer las pertinentes asambleas informativas de huelga y empezarán con la batería de medidas aprobadas, sin esperar a que se sumen UGT y CCOO, ya que ni siquiera se presentaron a la reunión extraordinaria del Comité de empresa donde se expusieron todos estos asuntos.