En la mañana de hoy, representantes de la Comisión 8 de Marzo se han reunido con Keruin Martínez Vargas y Daniel Fernández Gómez, portavoces municipales de IU y PSOE, a quienes han trasladado su profunda preocupación y la exigencia de que actúen ante la inacción del equipo de Gobierno del Ayuntamiento de Santander respecto de la reciente condena por violencia de género a un agente de la Policía Local que actualmente desempeña funciones propias de un cargo político, en virtud de una libre designación.

Desde la Comisión consideran inaceptable que una persona condenada por maltrato a su expareja siga ocupando un puesto de responsabilidad institucional y con una proximidad tal al equipo de Gobierno que le ha valido en los últimos tiempos el apodo del «quinceavo concejal del PP».

En una ciudad donde las instituciones deben comprometerse activamente con la erradicación de la violencia machista, permitir que un maltratador condenado permanezca en el Ayuntamiento sin ser cesado de sus funciones políticas supone un mensaje gravísimo de impunidad y una falta de respeto hacia las víctimas de violencia machista y hacia toda la ciudadanía, en opinión de la Comisión 8 de Marzo.

La Comisión ha instado a ambas formaciones, IU y PSOE, a que ejerzan sus responsabilidades institucionales y democráticas y promuevan la suspensión de las funciones asignadas a esta persona mediante libre designación, mientras la condena siga vigente.

Esta reunión es la primera de una serie de encuentros que la Comisión tiene previsto mantener con diferentes responsables municipales. En los próximos días solicitarán reuniones con la alcaldesa de Santander y con la concejala de Barrios y Participación Ciudadana, con el objetivo de exigir que se suspenda de manera inmediata a este agente de toda responsabilidad política, en cumplimiento de los principios más básicos de ética pública y de lucha contra la violencia de género.

Desde la Comisión 8 de Marzo reafirman su compromiso con una ciudad libre de violencias machistas y con unas instituciones que no amparen ni blanqueen a maltratadores.