El concierto de los raperos Ayax y Prok, previsto para el sábado 6 de septiembre en el Palacio de los Deportes de Santander, desapareció de la programación pocos días antes de su celebración sin que se conocieran en un primer momento los motivos de la suspensión ni la nueva ubicación del evento, si bien desde la organización se explica a este medio que saldrá una fecha nueva en Cantabria.

La decisión ha generado un pronunciamiento conjunto impulsado por Cantabria No Se Vende, en el que más de 40 personas y colectivos de la cultura cántabra han mostrado su rechazo a que se cedan espacios públicos a artistas acusados por violencias machistas. Los hermanos granadinos acumulan más de 80 acusaciones  en redes sociales y reflejados en medios de comunicación por presuntos delitos de abuso, acoso, maltrato físico y psicológico, violación y sumisión química, según han recordado los firmantes del comunicado.

Entre las adhesiones figuran artistas, músicas, ilustradores, colectivos culturales y asociaciones. Nombres como Eva Bolado, secretaria de la Federación de Asociaciones Culturales de Cantabria (ACANTO), la cantante Inés Pardo, el diseñador sonoro Jaime Pedra García, la compositora Deva Joseph, la actriz Ana Samartín o la artista Nuria García (GRINDIND) se han sumado a este rechazo. También lo han hecho entidades como el Espacio Feminista Gaia Laredo, la Asociación Hábitat, Terrazo y Monte. Museo Casa de las Doñas, o colectivos de ilustradores y músicas de la comunidad. entre otros.

En el comunicado se exige transparencia institucional en la gestión cultural, así como protocolos claros que permitan a las administraciones garantizar que los escenarios y espacios públicos sean lugares seguros para quienes acudan a ellos. Los firmantes reclaman que, hasta que se aclare su situación, no se cedan recintos a artistas  relacionados con acusaciones por abusos sexuales. Además, consideran urgente que las instituciones cántabras asuman criterios feministas en la contratación cultural y se comprometan de manera real en la erradicación de las violencias machistas.

Desde Cantabria No Se Vende subrayan que sigue pendiente la creación de marcos normativos que eviten que estas situaciones se repitan. “Otra cultura es posible”, señalan, una cultura que proteja los derechos de todas las mujeres y ponga el respeto y la igualdad como principios básicos.

El comunicado llega en un momento en el que distintas comunidades autónomas trabajan en la implementación de protocolos contra las violencias machistas en el ámbito cultural y festivo, como ya se aplica en fiestas patronales, festivales o recintos públicos de otras regiones. En Cantabria, diversos colectivos feministas llevan años reclamando medidas similares para garantizar entornos libres de violencia.

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