‘Santuario’ es un documental en el que participaron los hermanos Bardem, dirigido por el cántabro Álvaro Longoria, cofundador de la productora Morena Films, en el que se habla de la protección de las aguas marinas, especialmente centrado en el Océano Antártico. Una cinta de corte medioambiental que subraya la necesidad de conservar la naturaleza y sus ecosistemas. El propio Longoria ya había dirigido un corto documental sobre una temática similar llamado ‘Esperanza’ en 2016.

Es un documental que ya había recibido premios anteriormente (es de 2019) y ahora le ha tocado el Faro Verde del Festival de Cine de Santander. Estaba previsto que los dos hermanos, Carlos y Javier, recogieran el galardón, pero finalmente sólo asistió el hermano mayor a la ceremonia.

Agradecimiento por el Premio Faro Verde del @fcinesantander en nombre de @BardemAntarctic y mío, con algunas reflexiones sobre la ecología, el Genocidio en Gaza y la utilidad de la movilización popular. pic.twitter.com/c2KAAuF5QT

— Carlos Bardem Oficial (@carlosbardem) September 13, 2025

Carlos Bardem aprovechó la visita para sumarse al llamamiento de la cultura de Cantabria para frenar el genocidio que se está cometiendo en la Franja de Gaza. Fue este sábado, a mediodía, en el Auditorio de El Sardinero.

Carlos Bardem anima a los creadores cántabros a “contagiar” la condena del genocidio

A la hora de recibir el premio, la ecología era el tema del que hablar, al hilo de ‘Santuario’. Bardem, tras una pequeña alusión a Gaza, dijo que «a veces es muy jodido ser Pepito Grillo», porque si adoptas una actitud insistente diciéndole a muchas personas o hablando en público que, en el mundo, «las cosas están muy mal, que no estamos haciendo las cosas bien», es posible que muchas personas te miren como a una persona incómoda y que pone demasiadas veces el énfasis en cosas negativas.

El actor recordó que «la degradación de los ecosistemas y la destrucción del planeta se ha acelerado de forma exponencial» o también que este verano el Mar Mediterráneo ha alcanzado unas temperaturas anormalmente cálidas, «una bomba de energía que ahora en otoño colisionará con las corrientes del aire frío. O sea, las danas que vimos el año pasado es muy posible que las veamos incluso más intensas».

«Si te duele que maten niños, eres humano”

Por eso quiso lanzar un mensaje de cambio en las mentalidades para no seguir viendo «la naturaleza simplemente como una proveedora de cosas, de recursos». Afirmó que «mantener un consumo infinito en un planeta de recursos finitos, si hacemos una contabilidad básica, está volcado al desastre». Planteó que no estamos fuera ni por encima de la naturaleza, y por eso cree necesario «darle una protección legal a los ecosistemas, a los mares, a las junglas, a los ríos, a los animales. Una protección legal, real y efectiva, que no salga gratis destruir la naturaleza».

Entonces volvió a Gaza, porque «la ecología empieza por nosotros mismos» y por eso estima que «el mayor acto de ecología es denunciar un genocidio». Aludió a una acción que tendrá lugar este lunes en la Puerta del Sol de Madrid en la que se leerán los nombres de los niños y niñas asesinadas en Gaza desde octubre de 2023. En Santander, en la Plaza del Ayuntamiento, se hizo lo mismo el pasado mes de agosto. 15 horas no fueron suficientes para leer todos los nombres, y en Madrid ocurrirá lo mismo, porque el acto durará sólo 10 horas.

Santander vive la lectura del horror del genocidio en Gaza

Bardem se refirió a Gaza como un lugar donde se comete un genocidio y también un ecocidio: «se está destrozando una parte del planeta para hacerlo inhabitable, para expulsar de allí a sus legítimos moradores». Por todo ello, el actor animó a los asistentes a la ceremonia a no hacer caso cuando oigan que las cosas no se pueden cambiar porque es muy complicado hacerlo. «Hemos notado que en el momento en que la gente se ha echado a la calle y cada vez somos más denunciando un genocidio, los gobiernos, de una manera insuficiente, de una manera lenta, de una manera que no va a devolver la vida a decenas de miles de personas, empiezan a moverse. Así que tenemos que hacerles sentir nuestra presión y denunciar siempre el genocidio de la gente», concluyó.