La Federación Cántabra de Discapacidad Intelectual está más pendiente que nunca de las nuevas restricciones sanitarias. Han preparado con mucha ilusión el viaje a Sevilla para participar en el Campeonato Nacional de Cross y  les daría mucha pena tener que perdérselo.

No irán todos. Por una parte hay limitaciones de asistencia y, por otra, algunos han dejado de entrenar para reducir riesgos.

El que tiene ya todo preparado para el viaje es Adrián Hinojosa, que participará en la categoría absoluta en Dos Hermanas y confía en hacer una buena marca. «Imagínate», me cuenta emocionado, «iba a participar en los 3.000 metros y me acaban de decir que me pasan a los 5.000. Estoy contentísimo, porque, aunque es más difícil conseguir medalla, es un orgullo que me hayan pasado porque así puedo ir, poco a poco, creciendo y mejorando mis marcas».

Rara vez falta a sus entrenamientos en La Albericia,  los martes y viernes, pero, además, hace todas las rutinas de ejercicios que su entrenadora le manda para el resto de los días.

EN BUSCA DE UNA MEDALLA

Adrián en un torneo

«Ya gané un campeonato de España en categoría adaptada  que se celebró en Salamanca y ahora estoy muy ilusionado. Voy bien entrenado y confío en hacerlo bien. Lo importante es entrenar, competir y disfrutar. Par mí, el deporte es muy importante.», cuenta para EL FARADIO.

Adrián tiene 26 años y  vive con sus hermanos. Entrena y ahora está haciendo también un curso de capacitación para el mundo laboral.

Como a cualquier joven de su edad, le gustaría encontrar un trabajo y, con la formación que está recibiendo, confía en estar un poco más preparado para encontrar un empleo fuera del entorno de la discapacidad.

«He trabajado en un centro cívico del Ayuntamiento, como recepcionista y también he estado haciendo una sustitución de conserje en Ampros», explica.

Adrián en una carrera

Con Adrián, en el equipo de cross habitualmente entrenan unos 22 atletas con discapacidad intelectual, entre chicos y chicas.

Su entrenadora es Patricia Aja. «Son unos chicos estupendos. Entrenar les aporta, sobre todo, mucha felicidad. Muchos solo salen de casa para ir a los talleres y, el hecho de poder hacer deporte juntos, les  permite establecer nuevas relaciones. Además, como viajamos a campeonatos, lo pasan muy bien, hacen amigos  y luego se relacionan con ellos a través de las redes sociales. Eso les permite sentirse bien  y también integrarse, que  es muy importante», nos cuenta.

A SEVILLA

A Sevilla irán en microbús. Cruzan los dedos porque no aumenten las restricciones y puedan salir de Santander el día 12 para competir el 13 y volver el 14.

Y después, si todo va bien, ya piensan en ir hasta Cádiz en junio. No solo irá la selección de Cross. la Federación Cántabra de Discapacidad llevará también equipo de natación y de fútbol, con integrantes femeninos y masculinos.

La ilusión de Adrián, además de conseguir una medalla en Sevilla, sería entrar en la selección nacional,  pero sabe que le queda mucho trabajo por delante. «De momento mis marcas están todavía lejos de conseguirlo, pero yo seguiré entrenando, porque sería un sueño hecho realidad, y los sueños hay que trabajarlos y ganárselos», nos dice.