El presidente del Real Racing Club, Manolo Higuera, ha comparecido en la sala de prensa de El sardinero para hablar sobre la noticia que saltaba en la tarde de este miércoles: la Federación Internacional de Fútbol (FIFA) pretende sancionar al Racing con la retirada de seis puntos en la clasificación por no haber cumplido con el pago que le debe al Panathinaikos griego (75.000 euros) por la cesión del defensa sudafricano Nasief Morris en la temporada 2009/10. Ha expresado que está «convencido de que esto no va a llegar a ninguna parte», porque el club está cumpliendo con la legislación española y no tiene sentido que el máximo organismo del fútbol mundial actúe así, porque «se salta las legislaciones nacionales».

Higuera se mostró indignado ante los medios de comunicación. El comportamiento de la FIFA le sorprende y le decepciona, porque el Racing está cumpliendo con el Panathinaikos y no hay, ahora mismo, motivos para sacionarle por pagos pendientes. El club se encuentra en un concurso de acreedores, de hecho acaba de solicitar su modificación para corregir deficiencias señaladas por el juez Carlos Martínez de Marigorta, y la Ley Concursal española le impide afrontar el pago debido al Panathinaikos, no puede privilegiar a ningún acreedor sobre los demás.

Según el mandamás racinguista, la FIFA no puede tomar decisiones de este calibre sin tener en cuenta las leyes de España, que son las primeras que el Racing debe cumplir. A Higuera se le notaba incluso mordiéndose la lengua para no decir todo lo se le pasaba por la cabeza. Prefirió quedarse en mostrar frustración e incomprensión: «No entiendo como, dos años después, a petición del Panathinaikos, la FIFA decide reabrir el proceso y sancionar al Racing».

También explicó que no es directamente la FIFA quien sanciona, sino que ordena sancionar a la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), que es la única que puede imponer una sanción al club, por ser un asociado suyo. Pero la Española tiene las manos atadas, si recibe una orden de su superior, debe de cumplirla. «La sanción no se ha producido. Ya hemos hablado con la RFEF y nos dan la razón. Pero es un mero instrumento de la FIFA y deben llevar a cabo la orden».

Higuera indicó que el siguiente paso, una vez que llegue la sanción, es recurrir la decisión al Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAD). Lo que tranquiliza al presidente del Racing es que la RFEF «acatará la decisión del tribunal». Además, le parece importante que esto ocurra al principio de la temporada, porque tienen toda la campaña para arreglar el problema y que esos seis puntos no vuelen del casillero. El ascenso a Segunda es primordial.

La conclusión a la que llega Higuera es que «esto no va a llegar a ninguna parte. Estamos tranquilos porque sabemos que tenemos la razón». Pero sabe que el enemigo que tiene en frente es grande, y por eso expresó su deseo de sentirse amparado: «Quiero el apoyo de las insituciones en casos como éste». Y no dudó en mandar un mensaje claro a los que forman la familia del Racing: «Quiero decirle al racinguismo que somos pequeños, pero debemos mantenernos unidos en estos momentos». La FIFA suele ser tozuda en estas situaciones, y eso puede costarle un severo problema al equipo santanderino.

Higuera también criticó la actitud del Panathinaikos, que cree que no es un club «cumplidor, no cumple ni siquiera un pacto entre caballeros. Dicen que la FIFA está por encima de la legislación nacional». Pero no quiere hablar con los mandamases del equipo heleno, cree que «no sería el mejor interlocutor». Seguía mostrándose convencido de que este caso no tiene recorrido, pero lanzó otra queja por el comportamientos de los otros dos actores: «FIFA y Panathinaikos han conseguido que gastemos cientos de horas en arreglar esto, y necesitamos dedicar cientos de horas en otras cosas».

Al hilo de esto, Higuera aprovechó para hablar de los anteriores gestores del Racing, los que estaban en la etapa conocida como de los ‘indignos’: «Tenemos que seguirla vía correcta, ya se tenía que haber seguido antes, pero aquí nadie hacía nada». La siguiente pregunta buscaba una intencionalidad en dejar un tema como este en el aire, pero el presidente no llegó tan lejos: «No creo que haya habido mala intención en los anteriores gestores, pero estaban pendientes de cobrar su sueldo, de sacar dinero con las tarjetas de crédito y de que el abogado ganara todo lo posible».

También se le preguntó por cómo puede afectar esto a la plantilla del primer equipo. Pero ese aspecto no le tenía preocupado: «He hablado con el entrenador y con el capitán, les he transmitido tranquilidad y ellos lo han entendido bien». Es importante que los jugadores sigan trabajando y no piensen en este tipo de polémicas, y por eso Higuera ha preferido ser el que les informe de todo para que sepan que la situación no irá a más.

Nasief Morris jugó en el Racing cedido por el Panathinaikos en la temporada 2009/10. 150.000 euros era el importe a pagar por esa cesión, y el club adeuda la mitad de esa cifra, 75.000, según consta en la lista de acreedores presentada por el club ante el Juzgado de lo Mercantil nº1 de Santander para modificar el Concurso. La FIFA ha llegado a la conclusión de que esta situación debe ser sancionada, y propone restar seis puntos al equipo en la clasificación.

El defensa central, sudafricano, no tuvo demasiada participación en el equipo durante su temporada, sobre todo en la segunda mitad de la temporada. Marcó un gol en 12 partidos jugados, y al finalizar la temporada expiró su contrato con el equipo griego, que decidió no renovarle. La temporada anterior ya había sido cedido a otro equipo español, el Recreativo de Huelva. Actualmente tiene 34 años y juega en un equipo sudafricano.