El accidente de tráfico en Escalante esconde un posible caso de violencia de género

Cuando la Guardia Civil acudió al domicilio de un fallecido en accidente de tráfico a informar a su familia de su muerte, se encontró con que la esposa había sido asesinada
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La Guardia Civil investiga el asesinato de una mujer, ocurrido esta tarde en la localidad de Escalante, en lo que podría ser un nuevo caso de violencia de género.

Teléfono de asistencia a víctimas de violencia de género. No deja rastro en la factura aunque hay que borrarlo de las las llamadas realizadas

De confirmarse este hecho, ya que no existen denuncias previas malos tratos o violencia de género, se trataría de la segunda víctima por este tipo de violencia en Cantabria, tras el asesinato de otra mujer el pasado 3 de enero en Laredo.

La mujer hallada muerta en su domicilio es M.J.R.R., nacida en 1966, mientras que el presunto asesino es su marido, J.F.A.E., nacido en 1963.

Se da la circunstancia de que la pareja tenía su domicilio fijado en Zaragoza, aunque actualmente residían en el Barrio San Roque de la localidad cántabra de Escalante.

El hallazgo del cuerpo de la mujer asesinada se ha producido cuando los agentes de la Guardia Civil se han trasladado al domicilio para informar del fallecimiento de su marido, ocurrido a las 17.40 horas de este lunes tras colisionar con su vehículo contra un árbol en el kilómetro 0,8 de la CA-460.

Al acceder al domicilio del matrimonio, los agentes han encontrado el cuerpo de la mujer, que presentaba varias heridas de arma blanca y se encontraba junto a un charco de sangre.

Se da la circunstancia de que el cuerpo del marido, fallecido en el accidente de tráfico, también presentaba heridas de arma blanca, tal y como se ha comprobado al proceder al levantamiento del cadáver.

LA UIMP DA SU MEDALLA DE HONOR A UNA ASOCIACIÓN DE AYUDA A MUJERES MALTRATADAS

La Fundación Ana Bella, organización de ayuda a las mujeres maltratadas, recibe la Medalla de Honor de la UIMP
La Fundación Ana Bella, que ayuda a mujeres maltratadas a “romper el silencio, empoderarse con un trabajo digno y volver a ser felices”, ha recibido la Medalla de Honor de la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP) de manos de su rectora, María Luz Morán Calvo Sotelo.

Ha recogido el galardón la directora operativa y coordinadora del Programa Amiga de la Fundación Ana Bella, Gracia Prada Chamorro, quien ha recordado que “todavía en España uno de cada diez hombres maltrata a su pareja”.

“La mayoría de mujeres maltratadas no piden ayuda porque no saben que están siendo maltratadas”, ha afirmado Prada Chamorro, quien ha relatado en su discurso la “historia de superación” de la impulsora de la iniciativa premiada, Ana Bella. “La historia de Ana Bella se ha convertido en una luz que ilumina el camino de empoderamiento de millones de mujeres en todo el mundo”, ha añadido.

Prada Chamorro ha subrayado también que las mujeres que han superado una situación de maltrato de género actúan “como agentes de cambio social” en las empresas, en las instituciones públicas o en los medios de comunicación, acudiendo a ellos para modificar la versión que estos trasmiten.

“Por primera vez, mujeres que hemos sido maltratadas salimos en los medios de comunicación, no porque nos han asesinado, sino porque estamos cambiando el mundo”, ha concluido.

Por su parte, la rectora de la UIMP ha afirmado que la labor de la Fundación Ana Bella “conecta directamente con un relato de supervivencia”, y “revierte” la “construcción social y, sobre todo, mediática de la violencia de género” que, según ha dicho, “suele asentarse en relatos fatídicos en los que el resultado, el impacto y la muerte prevalecen sobre los procesos”.

“Tras los referentes de la ausencia, la Fundación Ana Bella nos devuelve la imagen real y tangible de todas aquellas mujeres que con su fortaleza suponen una guía para todas nosotras para seguir adelante. Frente al silencio nos proponen visibilidad, presencia y relatos de esperanza”, ha indicado Morán Calvo Sotelo.

La licenciada en Derecho por la Universidad de Cantabria y activista feminista Teresa Páramo Arroyo ha sido la encargada de pronunciar la laudatio, la que ha aprovechado para defender que la organización homenajeada “ha cambiado el victimismo por la victoria”.

“No hay nada más valioso para una mujer en esta sociedad que la ayuda de otra mujer”, ha indicado Páramo Arroyo, para quien, aun así, “las asociaciones no deben sustituir a la Administración” del Estado. “La única forma de acabar con la violencia de género es evitar su caldo de cultivo, el machismo. Los asesinos de mujeres son asesinos que nacen de la normalidad”, ha opinado.

En el acto de entrega de la Medalla de Honor de la UIMP ha intervenido también su secretario general, Pablo Acosta.

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