El pasado lunes 18 de mayo ‘Movimiento por la Paz’, asociación que es miembro de la Coordinadora Cántabra de ONGDs,  puso en marcha el curso ‘Cinco caminos para la paz una estrategia de educación en valores para el tiempo libre’, una adaptación a formato virtual de los talleres inicialmente planteados para realizar de forma presencial con asociaciones de tiempo libre.

Tras finalizar el curso, desde la organización han querido hacer balance de los 5 caminos para la paz que han recorrido, a través de dinámicas, música, juegos, y de claves para reflexionar en grupo después de estas.

LOS CAMINOS DE MPDL

El primer camino ha sido el de la diversidad cultural, en el que los participantes han de pensar un estereotipo o prejuicio que tengan ellos mismos sobre un determinado grupo étnico, racial o minoritario. Una vez lo hayan pensado, escriben en un papel su estereotipo o prejuicio, y se introduce en una urna, un saco o una bolsa.

Cuando todos los papelitos están metidos en el saco, en la urna o en la bolsa, se van sacando de uno en uno y se van desmitificando entre todos. Una vez se han desmitificado todos, cada participante escribe su prejuicio o estereotipo en un avión de papel y lo deja volar.

El segundo camino es el de la igualdad de género, en un curso en el que la dinámica consiste en analizar los cuentos clásicos de Disney, y observar cómo influyen en la construcción de la masculinidad y de la feminidad. Una vez encontrados y analizados, esos comentarios, escenas, acciones, se modifican y se representan dichos cuentos sin reproducir estereotipos de género.

El camino de la lucha contra la pobreza se ha articulado a través de la moda, “un sector que causa un gran impacto en países con pocos recursos” como explica su profesora.

Lo que propone es una dinámica en la que los participantes miran la ropa que llevan puesta y buscan el lugar donde ha sido fabricada, bien mirando la etiqueta o bien buscando información en la página web de la marca. Una vez conocida esta información, se establecen grupos que buscan datos acerca de los países donde se fabrican las prendas que llevan: índice de pobreza, salario medio de los trabajadores, etc.

Posteriormente se realiza una puesta en común y se hace a los participantes preguntas cómo “¿Erais conscientes de este problema? ¿Os preocupada el origen de vuestra ropa? ¿Conocéis alternativas con un menor impacto?”

Por otro lado, recorren el camino de los Derechos Humanos. Exponen los derechos humanos, los derechos de la infancia, los explican y hablan sobre ellos. Después, la persona encargada de dinamizar ofrece globos y permanentes al grupo, y se coloca en el centro del círculo que formen los participantes.

Se trata de que cada participante reflexione sobre los derechos que consideran que han tenido tan sólo por nacer en España. Cada derecho está escrito en un globo que se pegará al cuerpo del dinamizador/a explicando todo lo que significa ese derecho. Entonces realizan un recuento y reflexionan sobre si esos derechos los tiene toda la humanidad, o consideran que no todos son tan afortunados.

Tras la reflexión, comienzan a pinchar todos aquellos globos de derechos que consideran que no son respetados en algún otro sitio que se ponga como ejemplo, por ejemplo, Siria. Van explotando uno a uno cada derecho no respetado, explicando las razones. Cuando crean que tienen los derechos respetados en el lugar escogido, realizan un recuento al igual que cuando pusieron los de España. Reflexionan sobre porqué es así, si es justo y qué hacer para cambiar esta situación.

El último camino es el del cuidado del medio ambiente, en un curso que comienza con el video sobre consumismo de Steve Cutts. Al finalizar su visionado, dividen a los participantes en grupos de 5 cada uno, y cada grupo reflexiona sobre el vídeo, y sobre las cuestiones que más les han llamado la atención. Cuando acaban de debatir en grupos, se ponen en común todas las opiniones.