El ocio nocturno demanda cambios normativos y ayudas tras constatar que su cierre «no era el origen de los rebrotes»
Hacía tiempo que PeñaHerbosa no estaba tan llena. Desde la pandemia, ya no se ven esas imágenes de la calle llena, los domingos –qué decir de Nochebuena o Nochevieja—
Pero no han sido clientes, sino los propios hosteleros, los del ocio nocturno, afectados por medidas de cierre adelantado desde agosto, que han llevado su mensaje tanto al Ayuntamiento de Santander como al Gobierno de Cantabria.
A estas instituciones les piden tanto cambios en la normativa de Sanidad para evitar la expansión de la pandemia como en la de las licencias –toda vez que ahora hay locales cerrados por tener licencia especial—como ayudas económicas.
De la noche al día, son la parte de la hostelería que menos ha trabajado en un verano en que la parte diurna ha salvado los muebles, con cifras mejores de las que se aventuraban hace tres meses.
Son los que mejor saben la importancia del efecto Zona: con tres bares abiertos, tienes una zona y beneficia todos, y, en consecuencia, con bares cerrados, se perjudica a todo el entorno, como recordaba Javier, de El Rincón de Javi, en Suances. Otro indicador es el ruido: desde hace meses las zonas más ruidosas de Santander por el ocio nocturno, como el entorno de Casimiro Sáinz, viven noches de calma por el cierre de los locales.
Convocan la Asociación Empresarial de Hostelería de Cantabria, la Asociación de Empresas de Ocio Nocturno y los taxistas, que han acompañado el final de la marcha (en torno a 1.500 personas, según la organización).
Y han reivindicado no sólo su importancia numérica para la economía, sino también que el foco que se puso en ellos como origen de rebrotes no se ha traducido en que su cierre haya evitado el incremento de casos detectado a raíz del cierre del verano.
“Si se tiene que cerrar, se debe ayudar a la empresa para que eso no sea su ruina y tenga que echar la persiana”.
“Hay que decir alto y claro que el ocio nocturno lleva más de un mes cerrado y los contagios han seguido creciendo” por lo que está claro que el ocio nocturno “no es el culpable de los rebrotes”, ha asegurado Ángel Cuevas, presidente de la Asociación de Hostelería.
De hecho, ha asegurado que “prohibir lo controlado” sólo está “propiciando el ocio descontrolado” y ha finalizado haciendo hincapié en la necesidad de “ayudas para no desaparecer”.
Con megáfonos, con mensajes a Revilla (“de sobaos y anchoas no se come”),con salvavidas o carteles de SE VENDE BAR (era habitual entre los manifestantes el recuerdo de que pese a estar cerrados, siguen pagando los alquileres de sus locales), han desfilado por el centro de Santander en un día de niebla y sol, entre británico y tropical.
La manifestación convocada por la Asociación de Empresas de Ocio Nocturno a través de la Asociación de Hostelería ha reunido también a empresarios y trabajadores de los sectores del taxi y la distribución de bebidas y alimentos al sumarse la Federación del Taxi de Cantabria y ADISHORECA.
Los tres colectivos empresariales representan a empresas que sostienen en la Comunidad cerca de 5.000 empleos directos y más del doble de empleo indirecto.
Las más de 300 empresas de ocio nocturno de Cantabria asumen que perderán este verano 20 millones de euros.
La Federación Cántabra del Taxi por su parte reclama la falta de ayudas por parte del Gobierno , habiendo sido excluidos del Cheque de Resistencia y del Cheque de Autónomos, pese a que el sector fue declarado servicio esencial durante el Estado de Alarma y estuvo obligado a seguir prestando servicio a los ciudadanos.
Las empresas de ocio nocturno reclaman además ayudas para el sostenimiento de los gastos fijos que se mantienen pese al cierre como es el caso de los alquileres, en la mayor parte de los casos muy elevados al tratarse de locales situados en zonas estratégicas y con licencias que les habilitan para su explotación dentro del ocio nocturno.
EL PP ACUSA AL GOBIERNO DE «MIRAR HACIA OTRO LADO»
En el plano político, el Partido Popular plantea que el Gobierno prepare un decreto que regule que «mientras no puedan ejercer su actividad de noche, al menos se les deje trabajar de día como bares convencionales».
Lo contrario significaría «dejar al colectivo a los pies de los caballos y al borde de la ruina», según explica el diputado Íñigo Fernández. El PP defenderá esta postura en el pleno del Parlamento de Cantabria, ante la «pasividad» del Gobierno.
Ese decreto permitiría a los establecimientos con licencia de bar especial A ejercer de manera transitoria su actividad como bares convencionales», toda vez que la alternativa de tramitar nuevas licencias de actividad se ha revelado «larga, engorrosa e inviable», pues tardarían tiempo en tramitarse y en muchos casos exigirían obras para adaptar los locales y cumplir los requisitos que se exigen en la actualidad.
Según el diputado del PP en el Parlamento de Cantabria, la solución «más rápida» es, a su juicio, aquella que consiste en «asimilar estos establecimientos a la actividad de bar convencional de modo provisional, en tanto dure la suspensión de la actividad que les es propia».
CIUDADANOS ADVIERTE DE LA «SITUACIÓN LÍMITE DEL SECTOR»
El portavoz de Ciudadanos (Cs) en el Parlamento de Cantabria, Félix Álvarez, ha denunciado que más de 300 empresas de la región dedicadas al ocio nocturno «se enfrentan en estos momentos a una situación límite» tras el «cierre unilateral» decretado por el Gobierno de Cantabria que, en colaboración con el Ministerio de Sanidad, ha dicho, ha dejado «en la estacada» a cientos de familias.
«Si tomamos medidas drásticas», ha subrayado Álvarez, «que estén respaldadas por un plan b», ya que «decretar el cierre sin tener en cuenta de qué manera evitar el hundimiento y el ahogo económico de todos estos negocios es un movimiento kamikaze«.
En este contexto, además, Cs ha registrado en el Parlamento una moción a través de la que ha solicitado instar al Gobierno Central a la elaboración de un plan de apoyo para el sector de la hostelería y del ocio nocturno que, entre otras medidas, «contemple la exoneración de los tributos y de la Seguridad Social, el aplazamiento de las moratorias sobre los préstamos personales y la recuperación de la prestación extraordinaria por cese de actividad para los autónomos que tengan que cerrar su negocio o vean desplomarse sus ingresos».
Asimismo, la formación naranja ha planteado la confección de un plan de ayudas directas que permita a los empresarios del ocio nocturno seguir afrontando los gastos fijos de sus negocios (suministros, gastos corrientes, así como hipotecas o alquileres) y que todos los establecimientos en los que se desarrollen actividades de hostelería y restauración puedan abrir hasta las 01.00 horas, «no pudiendo, en ningún caso, admitirse nuevos clientes a partir de las 00.00 horas».
El portavoz de Cs también ha hecho hincapié en otro de los aspectos que recoge la moción presentada en el Parlamento de Cantabria, como es la necesidad de modificar la normativa autonómica para adecuar a la situación actual el desarrollo de la actividad de restauración que recoge la Ley 3/2017 de 5 de abril, de Espectáculos Públicos y Actividades Recreativas de Cantabria.