Los Grupos Socialista, Regionalista y Unidas por Santander han registrado este jueves una moción de condena del asesinato de Samuel Luiz en A Coruña, así como en señal de repulsa a la violencia homófoba, para su debate en el pleno ordinario del próximo 29 de julio, tras la negativa del Partido Popular a abordar una Declaración Institucional en la Junta de Portavoces.

En el texto, las tres formaciones instan además a que el Ayuntamiento de Santander convoque una concentración oficial y un minuto de silencio en señal de repulsa de la violencia homófoba, así como a trasladar “la solidaridad y el más profundo pésame de los santanderinos y las santanderinas” a los familiares y allegados de la víctima” del “brutal” asesinato de A Coruña.

“Maricón no debería ser lo último que escuchas al morir. Y lo que te llaman mientras te matan, importa”, reza una moción que, “desde un debido y absoluto respeto a la separación de poderes”, reivindica para el ámbito de la política “la respuesta institucional ante una violencia cuyo repunte genera alarma e indignación social”.

PSOE, PRC y UxS recuerdan que el lunes 5 de julio miles de personas protestaron pacíficamente en manifestaciones por toda España pidiendo Justicia para Samuel y en contra de la LGTBIfobia y la violencia homófoba.

Unas movilizaciones que “han tenido y tendrán su réplica en Santander”, el viernes 9 de julio, en una concentración frente a la Delegación del Gobierno que reunió a varios centenares de personas, y que se repetirá este próximo sábado, 17 de julio, en otra marcha convocada entre la Plaza del Reenganche y la Plaza del Ayuntamiento.

La moción cita fuentes policiales y testigos presenciales de la agresión mortal a Samuel por una “jauría humana pateando a un chaval a lo largo de más de 150 metros en plena calle” hasta que “el chico ya se desplomó” y “cayó como muerto”, donde todavía “allí se ensañaron”, cuando “entre seis y diez personas continuaron pateándole”.

Y apela a la Constitución Española, que consagra la igualdad de los españoles ante la ley sin que pueda prevalecer discriminación alguna por razón de nacimiento, raza, sexo, religión, opinión o cualquier otra condición o circunstancia personal o social, así como el derecho a la vida y a la integridad física y moral.

También recuerdan la Circular 7/2019, de 14 de mayo, de la Fiscalía General del Estado, con pautas para interpretar los delitos de odio del artículo 510 del Código Penal, “producto de la preocupación” por el incremento de estos delitos de un 45% de los entre 2013 y 2019, según el Portal Estadístico de Criminalidad del Ministerio de Interior.

Entre estos, se apuntan la homofobia, la transfobia, la discriminación por sexo, la xenofobia derivada de los movimientos migratorios, la intolerancia religiosa, la romafobia (el odio a la etnia gitana), la mesofobia (el odio a la interculturalidad), la aporofobia (el odio al “pobre” o persona en riesgo de exclusión social) o la gerontofobia (el odio a las personas mayores).

Y aportan más datos, como las ocho personas que han sido asesinadas por su atracción hacia personas de su mismo sexo, según el portal Crímenes de Odio. Mientras, en Cantabria, se produjeron en 2019 un total de 17 casos de delitos de odio, lo que representa un 21% más que el año anterior, en una tendencia al alza año tras año.

CASOS MÁS RECIENTES DE HOMOFOBIA EN CANTABRIA

En la iniciativa conjunta se recuerda que un joven carpintero denunció el pasado mes de mayo que fue rechazado para desarrollar un trabajo en un taller de la comarca de Liébana por tener “ese problema” de “ser gay”, tal y como se lo justificó el empresario.

Un año antes, en marzo de 2020, una pareja denunció otra agresión homófoba en El Astillero, al grito de «maricones de mierda» por parte de su vecino cuando se despedía de unos amigos en la puerta de su casa; y en Santander un joven menor de edad sufrió una agresión homófoba la Semana Santa de 2016 a la salida de un concierto en Escenario Santander, por personas que le pegaron tras insultarle aludiendo a su condición sexual.

“Son sólo algunos de los casos que han trascendido, que no son todos los que se denuncian, como tampoco se denuncian todas las faltas y agresiones que se producen con la componente de odio”, enfatiza la propuesta.

Por todo, plantean tres acuerdos institucionales: condenar el asesinato de Samuel Luiz y trasladar “la solidaridad y el más profundo pésame de los santanderinos y las santanderinas a los familiares y allegados de la víctima”; convocar una concentración y minuto de silencio en recuerdo de Samuel y en señal de repulsa hacia la violencia homófoba, y expresar de forma rotunda el rechazo de la Ciudad de Santander hacia cualquier actitud de homofobia y la solidaridad con el colectivo LGTBIQ+ que la sufre.