El Consejo de Administración del Puerto pasa de puntillas por el asunto de las concertinas

En la reunión celebrada en la sede de la Autoridad Portuaria, las quejas por la instalación de cuchillas en la valla del Puerto sólo tuvo cabida en el turno de ruegos y preguntas
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El orden del día no recogía un punto concreto para hablar sobre la contestación que está sufriendo el hecho de que parte de la valla del Puerto de Santander tenga concertinas como medida disuasoria para los migrantes que tratan de saltarla y acceder a un barco que les lleve al Reino Unido.

La cuestión salió en el turno de ruegos y preguntas, cuando el presidente del Puerto, Francisco Martín, explicó que se había hecho llegar a la Autoridad Portuaria un escrito de las Juventudes Socialistas de Santander y la asociación Pasaje Seguro entregó 43.000 firmas recogidas en la plataforma change.org pidiendo que se de marcha atrás en esta decisión.

El Puerto es una institución aparte, pero cuenta con la presencia de distintas personalidades políticas de la Comunidad, como la delegada del Gobierno, Ainoa Quiñones (que este miércoles se mostraba contraria al uso de concertinas), los consejeros del Gobierno de Cantabria Francisco Javier López Marcano, de la cartera de Industria, y José Luis Gochicoa, de Obras Públicas, el portavoz del PP en el Ayuntamiento de Santander, César Díaz, o el concejal del PRC José María Fuentes-Pila. También está en el Consejo Enrique Conde, presidente de CEOE-Cepyme en Cantabria, o Modesto Piñeiro, presidente de la Cámara de Comercio y consignatario de Britanny Ferries.

Precisamente Piñeiro ha sido uno de los que ha intervenido, y ha señalado que la presencia de los migrantes es algo que provoca perjuicios en empresas que trabajan en el Puerto, argumento suficiente para defender la decisión de poner las concertinas. Y sin embargo, las cifras económicas de esta instalación a caballo entre Santander y Camargo están mejorando incluso durante la pandemia.

Como recordaba en nuestra tertulia Israel Ruiz Salmón, coordinador de Izquierda Unida en Cantabria, este es un método legal. No hay una prohibición de instalar este tipo de elementos para frenar los intentos de salto. Sin embargo, cuchillas cortantes no le parecen al líder de la formación de izquierdas una forma adecuada de solucionar el problema. En una línea parecida se expresaron sus compañeros en el tiempo de debate de EL FARADIO DE LA MAÑANA, en Arco FM, Rafael Sebrango, coordinador de Ciudadanos en Santander y la doctora Mercedes Boix.

También se ha estado posicionando en contra de la decisión de aumentar la seguridad a base de cuchillas afiladas el vicepresidente y portavoz del Gobierno de Cantabria, Pablo Zuloaga, que hablaba de dejar de «violentar» a personas que sufren una situación similar.

Antes de la reunión, un grupo de manifestantes se concentraba frente a la sede de la Autoridad Portuaria para protestar por el uso de cuchillas en la valla. Paradójicamente, las concertinas han empezado a desaparecer de las vallas de Ceuta y Melilla, un lugar mucho más tensionado por las dinámicas migratorias, siendo dos fronteras entre África y Europa que desean cruzar muchas personas procedentes de diversos países de aquel continente.

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